07.10.2022 - Santa Misa X aniversario de San Juan de Ávila como Doctor de la Iglesia, desde Montilla
07 de Octubre de 2022. - (13 TV / Camino Católico) Santa Misa por el X Aniversario de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia, desde
Montilla. Preside la Celebración de la Santa Misa el Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid, Monseñor Don Antonio María Rouco Varela.
Inicio de la Santa Misa
PRESIDE
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
CONCELEBRAN
Francisco Javier Martínez Fernández
Arzobispo de Granada
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Demetrio F. González
Obispo de Cordoba
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Francisco Jesús Orozco Mengíbar
Obispo de Guadix
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Jesús Esteban Catalá Ibáñez
Obispo de Málaga
COMENTARIOS:
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
00:29
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Muy buenos días, bienvenidos al corazón de Andalucía, a la bellísima localidad de Montilla. Area del Gran Capitán, tierra de Olivares y Viñedos, conocidos en el mundo entero, por sus caldos, por sus vinos de Montilla Moriles. Hoy la Iglesia Universal, Celebra el Día de Nuestra Señora del Rosario. Y también de forma muy especial, en esta Localidad, el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia Universal. Es por esa razón, que le ofreceremos a todos ustedes la Sagrada Eucaristía Precedida por su Excelencia Reverendísima Antonio María Rouco Varela, Arzobispo Emérito de Madrid y Cardenal.
01:19
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Estará Concelebrada, por Miembros del Clero Diocesano Cordobés, con la presencia de Monseñor Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba y de Monseñor Francisco Jesús Orozco, Obispo de Guadix.
03:30
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. En el Nombre del ✠ Padre, y del ✠ Hijo, y del ✠ Espíritu Santo.
℟. Amen.
℣. La Paz esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
03:45
Palabras del Monitor de la Catedral
Celebramos en esta mañana, la Memoria de la Virgen del Rosario, el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia. Damos la bienvenida, al Señor Cardenal, Don Antonio María Rouco Varela, que en aquel entonces era el Presidente de la Conferencia Episcopal Española. Y las gracias por la Presencia a los Obispos Españoles, que están tan importantes intervención tuvieron para esta declaración. Al Obispo de Córdoba, que continúa con esta Misión, de dar a conocer a San Juan de Ávila. En estos 10 años, hemos vivido un Trienio Jubilar, del 2012 al 2015, un Año Jubilar, también a San Juan de Ávila en el año 2019.
04:30
Palabras del Monitor de la Catedral
Tres Congresos Internacionales, dedicados a San Juan de Ávila, desde diferentes perspectivas. Sus Obras han sido traducidas, a los diferentes idiomas, Inglés, Francés, Alemán, Italiano, Polaco y está en previsión la Publicación de sus Obras en Ruso, en Portugués, Árabe y Chino. Numerosos Estudios Académicos, la inclusión de San Juan de Ávila, en el Calendario Universal, para toda la iglesia. Y desde hace 10 años, numerosas Visita de Obispos, con su Presbiterio, de Sacerdotes y Seminaristas, Grupos de Fieles, que se acercan a conocer la figura de San Juan de Ávila. Pues damos gracias por estos diez años y todo ello pues lo acogemos, por gracias a la mediación de la Virgen María, de la que San Juan de Ávila, decía: «prefiero perder el pellejo, antes que perder mi Devoción a la Virgen». Pues le damos gracias a María, por esta Intervención de San Juan.
05:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Hermanos para Celebrar
dignamente los Sagrados
Misterios reconozcamos
nuestros pecados.
Pausa de silencio.
Yo Confieso...
Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, y a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor.
Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen.
KÝRIE ELÉISON
06:27
Coro de la Capilla Sixtina:
℣. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℣. Chríste, Chríste, Chríste eléison.
℟. Chríste, Chríste, Chríste eléison.
℣. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
CONCELEBRAN
Francisco Javier Martínez Fernández
Arzobispo de Granada
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Demetrio F. González
Obispo de Cordoba
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Francisco Jesús Orozco Mengíbar
Obispo de Guadix
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Jesús Esteban Catalá Ibáñez
Obispo de Málaga
COMENTARIOS:
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
00:29
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Muy buenos días, bienvenidos al corazón de Andalucía, a la bellísima localidad de Montilla. Area del Gran Capitán, tierra de Olivares y Viñedos, conocidos en el mundo entero, por sus caldos, por sus vinos de Montilla Moriles. Hoy la Iglesia Universal, Celebra el Día de Nuestra Señora del Rosario. Y también de forma muy especial, en esta Localidad, el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia Universal. Es por esa razón, que le ofreceremos a todos ustedes la Sagrada Eucaristía Precedida por su Excelencia Reverendísima Antonio María Rouco Varela, Arzobispo Emérito de Madrid y Cardenal.
01:19
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Estará Concelebrada, por Miembros del Clero Diocesano Cordobés, con la presencia de Monseñor Demetrio Fernández, Obispo de Córdoba y de Monseñor Francisco Jesús Orozco, Obispo de Guadix.
03:30
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. En el Nombre del ✠ Padre, y del ✠ Hijo, y del ✠ Espíritu Santo.
℟. Amen.
℣. La Paz esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
03:45
Palabras del Monitor de la Catedral
Celebramos en esta mañana, la Memoria de la Virgen del Rosario, el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia. Damos la bienvenida, al Señor Cardenal, Don Antonio María Rouco Varela, que en aquel entonces era el Presidente de la Conferencia Episcopal Española. Y las gracias por la Presencia a los Obispos Españoles, que están tan importantes intervención tuvieron para esta declaración. Al Obispo de Córdoba, que continúa con esta Misión, de dar a conocer a San Juan de Ávila. En estos 10 años, hemos vivido un Trienio Jubilar, del 2012 al 2015, un Año Jubilar, también a San Juan de Ávila en el año 2019.
04:30
Palabras del Monitor de la Catedral
Tres Congresos Internacionales, dedicados a San Juan de Ávila, desde diferentes perspectivas. Sus Obras han sido traducidas, a los diferentes idiomas, Inglés, Francés, Alemán, Italiano, Polaco y está en previsión la Publicación de sus Obras en Ruso, en Portugués, Árabe y Chino. Numerosos Estudios Académicos, la inclusión de San Juan de Ávila, en el Calendario Universal, para toda la iglesia. Y desde hace 10 años, numerosas Visita de Obispos, con su Presbiterio, de Sacerdotes y Seminaristas, Grupos de Fieles, que se acercan a conocer la figura de San Juan de Ávila. Pues damos gracias por estos diez años y todo ello pues lo acogemos, por gracias a la mediación de la Virgen María, de la que San Juan de Ávila, decía: «prefiero perder el pellejo, antes que perder mi Devoción a la Virgen». Pues le damos gracias a María, por esta Intervención de San Juan.
05:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Hermanos para Celebrar
dignamente los Sagrados
Misterios reconozcamos
nuestros pecados.
Pausa de silencio.
Yo Confieso...
Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, y a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor.
Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen.
KÝRIE ELÉISON
06:27
Coro de la Capilla Sixtina:
℣. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℣. Chríste, Chríste, Chríste eléison.
℟. Chríste, Chríste, Chríste eléison.
℣. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie, Kýrie eléison.
08:39
El CORO - Gloria:
Gloria en Latín
Gloria in excelsis Deo,
et in terra pax hominibus bonae voluntatis.
Laudamus te,
Benedicimus te,
Adoramus te,
Glorificamus te,
Gratias agimus tibi propter
magnam gloriam tuam,
Domine Deus, Rex caelestis,
Deus Pater omnipotens.
Domine fili unigenite, Jesu Christe,
Domine Deus, Agnus Dei, Filius patris,
Qui tollis peccata mundi, miserere nobis.
Qui tollis peccata mundi,
suscipe deprecationem nostram.
Qui sedes ad dexteram Patris, miserere nobis.
Quoniam tu solus sanctus,
Tu solus Dominus,
Tu solus Altissimus, Jesu Christe,
Cum Sancto Spiritu in gloria Dei Patris.
℟. Amén.
Gloria in excelsis Deo,
et in terra pax hominibus bonae voluntatis.
Laudamus te,
Benedicimus te,
Adoramus te,
Glorificamus te,
Gratias agimus tibi propter
magnam gloriam tuam,
Domine Deus, Rex caelestis,
Deus Pater omnipotens.
Domine fili unigenite, Jesu Christe,
Domine Deus, Agnus Dei, Filius patris,
Qui tollis peccata mundi, miserere nobis.
Qui tollis peccata mundi,
suscipe deprecationem nostram.
Qui sedes ad dexteram Patris, miserere nobis.
Quoniam tu solus sanctus,
Tu solus Dominus,
Tu solus Altissimus, Jesu Christe,
Cum Sancto Spiritu in gloria Dei Patris.
℟. Amén.
Gloria en Español
Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tu que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros.
Porque sólo tú eres Santo,
sólo tu Señor,
Sólo tú Altísimo Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
℟. Amén.
Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tu que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros.
Porque sólo tú eres Santo,
sólo tu Señor,
Sólo tú Altísimo Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
℟. Amén.
12:56
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Oremos.
Oh Dios que hiciste de San Juan de Ávila
un maestro ejemplar para tu pueblo
por la Santidad de su vida
y por su Celo Apostólico
had que también en nuestros días
crezca la Iglesia en santidad
por el Celo ejemplar de tus Ministros.
Por Nuestro Señor Jesucristo
Tu Hijo, que Contigo Vive y Reina
en la Unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los Siglos de los Siglos
℟. Amen.
13:39
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
La Primera Lectura, estará tomada del Libro de los Hechos de los Apóstoles, «Sabed que nos dedicamos a los gentiles».
13:52
Primera Lectura:
Lectura del Libro de los Hechos de los Apóstoles 1ª lectura: sabed que nos dedicamos a los gentiles
13:55
Primera Lectura:
En aquellos días, Pablo y Bernabé dijeron a los judíos: teníamos que anunciaros primeros a vosotros la palabra de Dios. Pero como la rechazáis y no os consideráis dignos de la vida eterna, sabed que nos dedicamos a los gentiles. Así nos lo han mandado el Señor: "yo te haré luz de los gentiles Para que lleven la salvación hasta el extremo de la Tierra". Cuando los gentiles oyeron esto, se alegraron y alababan la palabra del Señor y los que estaban destinados a la vida eterna, creyeron. La palabra de Dios se iba difundiendo por toda la región.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
14:36
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Se cantará el Salmo 22: «el Señor es mi pastor, nada me falta».
14:42
Lectura de los Salmos:
Salmo: Sal 22 El Señor es mi pastor, nada me falta.
14:42
Lectura de los Salmos:
℣. El Señor es mi pastor, nada me falta.
℟. El Señor es mi pastor, nada me falta.
℣. El Señor es mi pastor, nada me falta
en verdes praderas me hace recostar
me conduce hacia fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas. ℟.
℣. Me guía por el sendero justo
por el honor de Su Nombre
aunque camine por cañadas oscuras
nada temor porque tú vas conmigo
tu vara y tu callado me sosiega. ℟.
℣. Preparas una mesa ante mí
enfrente de mis enemigos
me unges la cabeza con perfume
y mi copa reboza. ℟.
℣. Tu bondad y misericordia
me acompañan todos los días de mi vida
y habitaré en la Casa del Señor
por años sin termino. ℟.
17:16
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
La Segunda Lectura se tomará de la Carta de San Pablo a los Romanos: «ninguna criatura podrá apartarnos del amor de Dios, manifestado en Cristo».
17:29
Exclamación del Evangelio:
Canto al Evangelio San Juan (6, 44-51) Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre.
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya.
℣. Yo soy el pan vivo
que ha bajado del cielo;
el que coma de este pan
vivirá para siempre".
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
18:36
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Se proclamará el Evangelio según San Mateo: «vosotros sois la luz del mundo».
18:36
Lectura del Santo Evangelio
✠ Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 2, 16-21 Evangelio: Encontraron a Jóse y María con el Niño, a los ocho días le pusieron el Nombre de Jesús.
18:37
Lectura del Santo Evangelio
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateos
℟. Gloria a ti, Señor.
19:05
Lectura del Santo Evangelio
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «vosotros hoy la sal de la tierra, pero si la sal se vuelve sosa, ¿con que la salarán? No sirve más que para tirar afuera y que la pise la gente. Vosotros sois la luz del mundo, no se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara, para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Brille así vuestra luz, ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre, que está en los cielos. No creáis que he venido abolir la ley de los profetas, no he venido a abolir sino a dar plenitud.
20:01
Lectura del Santo Evangelio
En verdad os digo, que antes pasarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y lo enseñe así a los hombres, será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien lo cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos.
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria y Honor a Ti Señor, Jesucristo.
HOMILIA
21:11
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Mis queridos hermanos y hermanas en el Señor, saludo fraternalmente al Señor Obispo de de Córdoba. Sucesores de los Apóstoles, en la Iglesia particular de Córdoba, Señor Arzobispo de Granada, al Señor Obisco de Málaga, al Señor Obisco de Guadix. A todos todos los Sacerdotes, que son de mis hermanos y a los fieles que están presentes y participan en esta Celebración de la Eucaristía. Queremos dar gracias al Señor, de la forma insuperable, de la Acción de Gracias de la Eucarística. Queremos que nuestra Acción de Gracias, pedimos que sea .... en este momento en que, en este momento de la historia, del Triunfo de hace 2000 años, su resurrección continua vivo, Eternamente vivo y Eternamente vivo y presente para nosotros.
22:08
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Lo hacemos por la Memoria de San Juan de Ávila, más concretamente en la Memoria de su Declaración como Doctor Universal de la Iglesia hace 10 años. Un día como hoy, en la Plaza de San Pedro, por el Papa Benedicto XVI. Era el día, de la Virgen del Rosario, San Juan de Ávila murió el año 1569, dos años más tarde, se libraba la Batalla de Lepanto, en que las Naves Cristianas y la Flota Cristiana, vencía a la Flota Turca. El Papa San Pío V había pedido que se celebrase una forma del Rosario, para conseguir la victoria. La amenaza a Europa entonces, amenaza no solo del Mediterráneo, sino también en el Centro de Europa, para amenaza turca.
23:00
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y que incluían la amenaza, a la subsistencia y al futuro de la Europa Cristiana, era evidente, era uno de los grandes problemas de la época. Pues bien, dos años antes, moría San Juan de Ávila. Él había sido Sacerdote, el sentido más hondo y más vivo de la expresión. Por lo tanto, había sido un Maestro de la Fe. Un Maestro de la Fe, que unía a una Carrera, o al final de una Carrera de Estudios, simultáneada con una especie de Carreras Espiritual Interior. Que conformaba una personalidad sugestiva, para los que lo conocen y conocemos después de largos siglos de historia. Pero fascinante y apostólicamente fecunda para todos los que lo conocían, lo trataban de cerca y sobre todo para aquellos que habían sido destinatarios de su Celo Apostólico, de su Palabra y también de su sabiduría.
24:02
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Palabra que no era la de él, que era la de Dios. Sabiduría que no era la suya, sino que venía del Don del Espíritu Santo. Pero que recibía como una Gracia, como Gracia, la Gracia de la Verdad, es la Gracia que recibimos escuchando la Palabra de Dios. La Gracia de la Verdadera Vida, que es la que recibimos cuando nos acercamos a los Sacramentos de la Iglesia, a los Signos de la Presencia Vital del Señor. El Señor que es la Palabra, el Señor que es la Vida, el Señor que es Sacerdote Eterno. Su espiritualidad, estaba centrada en la persona de Cristo y en el Misterio de Cristo.
24:46
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
No ha habido siglo, en la Historia de la Iglesia, que eso no fuese cuestión. Entender a Cristo, la Vida suya, la Verdad suya, a Cristo como Camino. Para llegar al final de la vida, de forma plena, siendo eternamente feliz. Con la felicidad que incluye la verdad, incluye el bien, que incluye la belleza, pero en el siglo, que Él vivió, la cuestión de Cristo es vital. La interpretación luterana, era una interpretación recortada, de lo que era Cristo, recortada de lo que significaba su Pascua. Y que recordaba también en el fondo, al hombre. El hombre pues, quedaba al final, un poco decíamos entregado, a una justificación externa, que no le llegaba al fondo del alma.
25:41
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Una Concepción del amor de Dios, ...a través del amor de Cristo y de su Pascua que le rozábamos por fuera y poco más. El hombre seguía siendo pecador, es muy popular ese dualismo luterano, LA FÓRMULA «SIMUL IUSTUS ET PECCATOR» EN LUTERO. No tendría todo el rigor, todo el rigor de una Antropología, de la Constitución del Hombre. En la que por su historia de pecado pues no era capaz interiormente y personalmente de salir de ella. Eso tenía como consecuencia naturalmente pues, una incapacidad radical, para abordar los problemas del hombre en su historia total.
26:21
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
San Juan de Ávila dio ese siglo como la respuesta plenamente Cristiana a ese reto, de un Dios que salvaba externamente, pero que no llegaba con su gracia a transformar el corazón del hombre. La vida del hombre, personalmente y luego en todo el mundo de sus relaciones, culturales, intelectuales, estéticas, humanas, hasta políticas. Por eso la figura de él, su vida y su obra, fue tan fecunda, en el siglo XVI. El siglo XVI español, es un siglo de Reforma y Renovación de la Iglesia a fondo, no de contrarreforma. Se habla de contrarreforma, cuando la respuesta Católica a los problemas de la Iglesia venía de efectivamente de un encuentro renovado y otro con Cristo, que venía del siglo XV ya.
27:21
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y que impregnó toda la historia de España del siglo XVI. Que se manifestó en grandes Santos, de ese siglo. Se puede entender a San Juan de Ávila sin Ignacio de Loyola, o viceversa, o a San Ignacio de Loyola sin San Juan de Ávila. Se puede entender a San Juan de Ávila sin Santa Teresa de Jesús y viceversa. Se pueden tener San Juan de Ávila sin San Juan de la Cruz, pues no y viceversa. Pero un poco el origen, el Origen Teológico, el Origen Espiritual de esa historia, está muy cerca de él y muy en él. Es una especie de precursor de los Grandes Santos de la Historia de España, en el siglo XVI. Su figura iluminó por lo tanto, siempre, todos los siglos que van desde entonces hasta hoy.
28:16
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y en el, diremos en la forma viva de hacerse realidad, su Teología, su Espiritualidad, su Apostolado. Pues está el reconocimiento central, de lo que es el Sacerdocio Ministerial de la Iglesia. Por supuesto también Sacerdocio General, el Sacerdote Común de los Fieles, pero de una manera muy especial, el Sacerdote Ministerial. El Sacerdote tiene que ser, Alter Cristos, para que la presencia de Cristo en la Iglesia se note, se noten en la Palabra, se note en los Sacramentos, se note en la Vida. Tiene que haber hijos de la Iglesia, que estén dispuestos en Continuidad y Sucesión Apostólica, ser Alter Cristo.
29:00
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Cuando nos decimos eso a nosotros mismos y nos miramos, vemos lo pecadores que somos, lo limitados que somos, pues nos asusta, a él le asustaba, ser Alter Cristo. Ser de la Eucaristía, como él trataba la Eucaristía, nos conmueven, nos conmueve ahora sobre todo que la tratamos a veces con mucha ligerencia. Y no con La Piedad que hemos heredado de nuestros mayores. Si hoy hablamos de él y hablamos de él, como Doctor de la Iglesia Universal y recordamos que el anuncio de la declaración suya como Doctor, de la Iglesia Universal. Fue el marco de la Jornada Mundial de la Juventud del año 2011 en Madrid. De la que Beníto XVI, dijo que era, había sido una cascada de luz, de una forma evidente de Nueva Evangelización.
29:56
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Pues tendríamos que responder, ese reclamo de Nueva Evangelización, para el siglo XX, para el siglo XXI que hemos recibido ya desde Pablo VI, en el Concilio Vaticano II hasta hoy hasta el papá Francisco. Pues no se puede atender, ni se puede satisfacer, sin Sacerdotes, sin Sacerdotes Apostólicamente fervorosos, sigamos sin Sacerdotes identificados en un camino que no terminará nunca. Hasta que el Señor nos llame, de identificación con Cristo. El Sacerdotes que lleve la Palabra de la Verdad, que hagan en su vida de Cristo, su Verdad. Que hagan de su vida, la Vida de Cristo y que hagan de su camino y de su Camino Pastoral, a Cristo como Camino.
30:50
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Si queremos pues, en este momento de la Historia de la Iglesia, fijarnos en San Juan de Ávila. Una especie de Cristo, que pasa por nuestro siglo. Y queremos así ser Fieles a lo que el Señor nos pide, que es estar en la Iglesia y del Mundo. Pues tendremos que afirmarlo, que no se puede renunciar al Sacerdocio Ministerial, de ningún modo. El Ministerio de la Palabra, el Misterio de los Sacramentos, en el Ministerio del ser Pastores, que Rigen y que Cuidan la Comunidad de los Cristianos. Y que no se puede renunciar, a la hora de consevirla, las tareas de la Iglesia en la Historia en lo Social, en la Política, en la Cultural.
31:41
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Si no se atreve de proyectar la luz del Misterio de Cristo, de su Pascua, sobre la vida personal de cada uno de los que atendemos, las Comunidades a las que cuidamos, en la sociedad en la que vivimos. Y como curadora de todas las enfermedades y todas las debilidades y todas las pobrezas de nuestro tiempo. Comenzando por la persona misma, el Matrimonio, de la Familia y terminando en la Comunidad Internacional. Terminando con el deseo de Paz, que siempre alumbra, como una especie de ideal, que parece que se alcanza, pero que vienen acontecimientos históricos de nuevo, que parece que lo perdemos.
32:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Pero nunca lo perderemos del todo, si vivimos nuestra Vocación Cristiana, nuestra Vocación Sacerdotal, abrazados a Cristo. Y dejándonos Conducir a Él por su Madre, la Santísima Virgen, diría la Virgen de Fátima, lo había dicho en Lourdes, Rezando el Rosario. No solo de forma material, de forma que hay que hacerlo, sino de forma profundamente Espiritual, pidiendo con ella siglo XX, siglo XXI, es nuestro ahora, el Misterio de Cristo, de sus Misterios de Gozo, de sus Misterios Iluminados, de sus Misterios de la Pasión, de sus Misterios de la Resurrección, que así sea.
33:51
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Presentemos nuestras peticiones al Señor
en esta Fiesta de San Juan de Ávila.
34:07
Peticiones de los Fieles
℣. Por la Santa Iglesia de Dios
Para que el Señor suscite en ella
Predicadores de la Fe Apostólica
que lleven la salvación
hasta el confín de la Tierra.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Sacerdotes hoy, especialmente por los de España
Para que emulando al Buen Pastor
en el ejercicio de su Ministerio
crezcan cada vez más en la Santidad.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por las Vocaciones
Para que surjan jóvenes
que a ejemplo de San Juan de Ávila
sean Sabio Maestros en el Espíritu.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Sacerdotes que sufren la crisis espiritual, están enfermo, o se sienten solos en su ancianidad
Para que caminando por cañadas oscuras
confíen en el Señor
que va con ellos.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por nuestra Iglesia Diocesana
Para que valoremos el Ministerio
de nuestros Sacerdotes
y colaboremos con ello
en ser sal y luz del mundo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
35:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Escucha Señor
nuestras suplicas que hoy te dirigimos
confiando en la valiosa intercesión
de San Juan de Ávila
y concédenos lo que te pedimos.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
Himno Acatisto a la Madre de Dios
Procedencia del Himno
Salve, por ti resplandece la dicha;
Salve, por ti se eclipsa la pena.
Salve, levantas a Adán, el caído;
Salve, rescatas el llanto de Eva.
Salve, oh cima encumbrada a la mente del hombre;
Salve, abismo insondable a los ojos del ángel.
Salve, tú eres de veras el trono del Rey;
Salve, tú llevas en ti al que todo sostiene.
Salve, lucero que el Sol nos anuncia;
Salve, regazo del Dios que se encarna.
Salve, por ti la creación se renueva;
Salve, por ti el Creador nace niño.
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, tú guía al eterno consejo;
Salve, tú prenda de arcano misterio.
Salve, milagro primero de Cristo;
Salve, compendio de todos sus dogmas.
Salve, celeste escalera que Dios ha bajado;
Salve, oh puente que llevas los hombres al cielo.
Salve, de angélicos coros solemne portento;
Salve, de turba infernal lastimero flagelo.
Salve, inefable, la Luz alumbraste;
Salve, a ninguno dijiste el secreto.
Salve, del docto rebasas la ciencia;
Salve, del fiel iluminas la mente.
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Oremos.
Oh Dios que hiciste de San Juan de Ávila
un maestro ejemplar para tu pueblo
por la Santidad de su vida
y por su Celo Apostólico
had que también en nuestros días
crezca la Iglesia en santidad
por el Celo ejemplar de tus Ministros.
Por Nuestro Señor Jesucristo
Tu Hijo, que Contigo Vive y Reina
en la Unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los Siglos de los Siglos
℟. Amen.
13:39
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
La Primera Lectura, estará tomada del Libro de los Hechos de los Apóstoles, «Sabed que nos dedicamos a los gentiles».
13:52
Primera Lectura:
Lectura del Libro de los Hechos de los Apóstoles 1ª lectura: sabed que nos dedicamos a los gentiles
13:55
Primera Lectura:
En aquellos días, Pablo y Bernabé dijeron a los judíos: teníamos que anunciaros primeros a vosotros la palabra de Dios. Pero como la rechazáis y no os consideráis dignos de la vida eterna, sabed que nos dedicamos a los gentiles. Así nos lo han mandado el Señor: "yo te haré luz de los gentiles Para que lleven la salvación hasta el extremo de la Tierra". Cuando los gentiles oyeron esto, se alegraron y alababan la palabra del Señor y los que estaban destinados a la vida eterna, creyeron. La palabra de Dios se iba difundiendo por toda la región.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
14:36
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Se cantará el Salmo 22: «el Señor es mi pastor, nada me falta».
14:42
Lectura de los Salmos:
Salmo: Sal 22 El Señor es mi pastor, nada me falta.
14:42
Lectura de los Salmos:
℣. El Señor es mi pastor, nada me falta.
℟. El Señor es mi pastor, nada me falta.
℣. El Señor es mi pastor, nada me falta
en verdes praderas me hace recostar
me conduce hacia fuentes tranquilas
y repara mis fuerzas. ℟.
℣. Me guía por el sendero justo
por el honor de Su Nombre
aunque camine por cañadas oscuras
nada temor porque tú vas conmigo
tu vara y tu callado me sosiega. ℟.
℣. Preparas una mesa ante mí
enfrente de mis enemigos
me unges la cabeza con perfume
y mi copa reboza. ℟.
℣. Tu bondad y misericordia
me acompañan todos los días de mi vida
y habitaré en la Casa del Señor
por años sin termino. ℟.
17:16
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
La Segunda Lectura se tomará de la Carta de San Pablo a los Romanos: «ninguna criatura podrá apartarnos del amor de Dios, manifestado en Cristo».
17:29
Exclamación del Evangelio:
Canto al Evangelio San Juan (6, 44-51) Yo soy el pan vivo que ha bajado del cielo; el que coma de este pan vivirá para siempre.
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya.
℣. Yo soy el pan vivo
que ha bajado del cielo;
el que coma de este pan
vivirá para siempre".
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
18:36
Comentarios: D. Joaquín de Velasco
Se proclamará el Evangelio según San Mateo: «vosotros sois la luz del mundo».
18:36
Lectura del Santo Evangelio
✠ Lectura del Santo Evangelio según San Lucas 2, 16-21 Evangelio: Encontraron a Jóse y María con el Niño, a los ocho días le pusieron el Nombre de Jesús.
18:37
Lectura del Santo Evangelio
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateos
℟. Gloria a ti, Señor.
19:05
Lectura del Santo Evangelio
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «vosotros hoy la sal de la tierra, pero si la sal se vuelve sosa, ¿con que la salarán? No sirve más que para tirar afuera y que la pise la gente. Vosotros sois la luz del mundo, no se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara, para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Brille así vuestra luz, ante los hombres, para que vean vuestras buenas obras y den gloria a vuestro Padre, que está en los cielos. No creáis que he venido abolir la ley de los profetas, no he venido a abolir sino a dar plenitud.
20:01
Lectura del Santo Evangelio
En verdad os digo, que antes pasarán el cielo y la tierra, que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes y lo enseñe así a los hombres, será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien lo cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos.
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria y Honor a Ti Señor, Jesucristo.
HOMILIA
21:11
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Mis queridos hermanos y hermanas en el Señor, saludo fraternalmente al Señor Obispo de de Córdoba. Sucesores de los Apóstoles, en la Iglesia particular de Córdoba, Señor Arzobispo de Granada, al Señor Obisco de Málaga, al Señor Obisco de Guadix. A todos todos los Sacerdotes, que son de mis hermanos y a los fieles que están presentes y participan en esta Celebración de la Eucaristía. Queremos dar gracias al Señor, de la forma insuperable, de la Acción de Gracias de la Eucarística. Queremos que nuestra Acción de Gracias, pedimos que sea .... en este momento en que, en este momento de la historia, del Triunfo de hace 2000 años, su resurrección continua vivo, Eternamente vivo y Eternamente vivo y presente para nosotros.
22:08
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Lo hacemos por la Memoria de San Juan de Ávila, más concretamente en la Memoria de su Declaración como Doctor Universal de la Iglesia hace 10 años. Un día como hoy, en la Plaza de San Pedro, por el Papa Benedicto XVI. Era el día, de la Virgen del Rosario, San Juan de Ávila murió el año 1569, dos años más tarde, se libraba la Batalla de Lepanto, en que las Naves Cristianas y la Flota Cristiana, vencía a la Flota Turca. El Papa San Pío V había pedido que se celebrase una forma del Rosario, para conseguir la victoria. La amenaza a Europa entonces, amenaza no solo del Mediterráneo, sino también en el Centro de Europa, para amenaza turca.
23:00
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y que incluían la amenaza, a la subsistencia y al futuro de la Europa Cristiana, era evidente, era uno de los grandes problemas de la época. Pues bien, dos años antes, moría San Juan de Ávila. Él había sido Sacerdote, el sentido más hondo y más vivo de la expresión. Por lo tanto, había sido un Maestro de la Fe. Un Maestro de la Fe, que unía a una Carrera, o al final de una Carrera de Estudios, simultáneada con una especie de Carreras Espiritual Interior. Que conformaba una personalidad sugestiva, para los que lo conocen y conocemos después de largos siglos de historia. Pero fascinante y apostólicamente fecunda para todos los que lo conocían, lo trataban de cerca y sobre todo para aquellos que habían sido destinatarios de su Celo Apostólico, de su Palabra y también de su sabiduría.
24:02
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Palabra que no era la de él, que era la de Dios. Sabiduría que no era la suya, sino que venía del Don del Espíritu Santo. Pero que recibía como una Gracia, como Gracia, la Gracia de la Verdad, es la Gracia que recibimos escuchando la Palabra de Dios. La Gracia de la Verdadera Vida, que es la que recibimos cuando nos acercamos a los Sacramentos de la Iglesia, a los Signos de la Presencia Vital del Señor. El Señor que es la Palabra, el Señor que es la Vida, el Señor que es Sacerdote Eterno. Su espiritualidad, estaba centrada en la persona de Cristo y en el Misterio de Cristo.
24:46
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
No ha habido siglo, en la Historia de la Iglesia, que eso no fuese cuestión. Entender a Cristo, la Vida suya, la Verdad suya, a Cristo como Camino. Para llegar al final de la vida, de forma plena, siendo eternamente feliz. Con la felicidad que incluye la verdad, incluye el bien, que incluye la belleza, pero en el siglo, que Él vivió, la cuestión de Cristo es vital. La interpretación luterana, era una interpretación recortada, de lo que era Cristo, recortada de lo que significaba su Pascua. Y que recordaba también en el fondo, al hombre. El hombre pues, quedaba al final, un poco decíamos entregado, a una justificación externa, que no le llegaba al fondo del alma.
25:41
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Una Concepción del amor de Dios, ...a través del amor de Cristo y de su Pascua que le rozábamos por fuera y poco más. El hombre seguía siendo pecador, es muy popular ese dualismo luterano, LA FÓRMULA «SIMUL IUSTUS ET PECCATOR» EN LUTERO. No tendría todo el rigor, todo el rigor de una Antropología, de la Constitución del Hombre. En la que por su historia de pecado pues no era capaz interiormente y personalmente de salir de ella. Eso tenía como consecuencia naturalmente pues, una incapacidad radical, para abordar los problemas del hombre en su historia total.
26:21
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
San Juan de Ávila dio ese siglo como la respuesta plenamente Cristiana a ese reto, de un Dios que salvaba externamente, pero que no llegaba con su gracia a transformar el corazón del hombre. La vida del hombre, personalmente y luego en todo el mundo de sus relaciones, culturales, intelectuales, estéticas, humanas, hasta políticas. Por eso la figura de él, su vida y su obra, fue tan fecunda, en el siglo XVI. El siglo XVI español, es un siglo de Reforma y Renovación de la Iglesia a fondo, no de contrarreforma. Se habla de contrarreforma, cuando la respuesta Católica a los problemas de la Iglesia venía de efectivamente de un encuentro renovado y otro con Cristo, que venía del siglo XV ya.
27:21
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y que impregnó toda la historia de España del siglo XVI. Que se manifestó en grandes Santos, de ese siglo. Se puede entender a San Juan de Ávila sin Ignacio de Loyola, o viceversa, o a San Ignacio de Loyola sin San Juan de Ávila. Se puede entender a San Juan de Ávila sin Santa Teresa de Jesús y viceversa. Se pueden tener San Juan de Ávila sin San Juan de la Cruz, pues no y viceversa. Pero un poco el origen, el Origen Teológico, el Origen Espiritual de esa historia, está muy cerca de él y muy en él. Es una especie de precursor de los Grandes Santos de la Historia de España, en el siglo XVI. Su figura iluminó por lo tanto, siempre, todos los siglos que van desde entonces hasta hoy.
28:16
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y en el, diremos en la forma viva de hacerse realidad, su Teología, su Espiritualidad, su Apostolado. Pues está el reconocimiento central, de lo que es el Sacerdocio Ministerial de la Iglesia. Por supuesto también Sacerdocio General, el Sacerdote Común de los Fieles, pero de una manera muy especial, el Sacerdote Ministerial. El Sacerdote tiene que ser, Alter Cristos, para que la presencia de Cristo en la Iglesia se note, se noten en la Palabra, se note en los Sacramentos, se note en la Vida. Tiene que haber hijos de la Iglesia, que estén dispuestos en Continuidad y Sucesión Apostólica, ser Alter Cristo.
29:00
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Cuando nos decimos eso a nosotros mismos y nos miramos, vemos lo pecadores que somos, lo limitados que somos, pues nos asusta, a él le asustaba, ser Alter Cristo. Ser de la Eucaristía, como él trataba la Eucaristía, nos conmueven, nos conmueve ahora sobre todo que la tratamos a veces con mucha ligerencia. Y no con La Piedad que hemos heredado de nuestros mayores. Si hoy hablamos de él y hablamos de él, como Doctor de la Iglesia Universal y recordamos que el anuncio de la declaración suya como Doctor, de la Iglesia Universal. Fue el marco de la Jornada Mundial de la Juventud del año 2011 en Madrid. De la que Beníto XVI, dijo que era, había sido una cascada de luz, de una forma evidente de Nueva Evangelización.
29:56
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Pues tendríamos que responder, ese reclamo de Nueva Evangelización, para el siglo XX, para el siglo XXI que hemos recibido ya desde Pablo VI, en el Concilio Vaticano II hasta hoy hasta el papá Francisco. Pues no se puede atender, ni se puede satisfacer, sin Sacerdotes, sin Sacerdotes Apostólicamente fervorosos, sigamos sin Sacerdotes identificados en un camino que no terminará nunca. Hasta que el Señor nos llame, de identificación con Cristo. El Sacerdotes que lleve la Palabra de la Verdad, que hagan en su vida de Cristo, su Verdad. Que hagan de su vida, la Vida de Cristo y que hagan de su camino y de su Camino Pastoral, a Cristo como Camino.
30:50
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Si queremos pues, en este momento de la Historia de la Iglesia, fijarnos en San Juan de Ávila. Una especie de Cristo, que pasa por nuestro siglo. Y queremos así ser Fieles a lo que el Señor nos pide, que es estar en la Iglesia y del Mundo. Pues tendremos que afirmarlo, que no se puede renunciar al Sacerdocio Ministerial, de ningún modo. El Ministerio de la Palabra, el Misterio de los Sacramentos, en el Ministerio del ser Pastores, que Rigen y que Cuidan la Comunidad de los Cristianos. Y que no se puede renunciar, a la hora de consevirla, las tareas de la Iglesia en la Historia en lo Social, en la Política, en la Cultural.
31:41
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Si no se atreve de proyectar la luz del Misterio de Cristo, de su Pascua, sobre la vida personal de cada uno de los que atendemos, las Comunidades a las que cuidamos, en la sociedad en la que vivimos. Y como curadora de todas las enfermedades y todas las debilidades y todas las pobrezas de nuestro tiempo. Comenzando por la persona misma, el Matrimonio, de la Familia y terminando en la Comunidad Internacional. Terminando con el deseo de Paz, que siempre alumbra, como una especie de ideal, que parece que se alcanza, pero que vienen acontecimientos históricos de nuevo, que parece que lo perdemos.
32:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Pero nunca lo perderemos del todo, si vivimos nuestra Vocación Cristiana, nuestra Vocación Sacerdotal, abrazados a Cristo. Y dejándonos Conducir a Él por su Madre, la Santísima Virgen, diría la Virgen de Fátima, lo había dicho en Lourdes, Rezando el Rosario. No solo de forma material, de forma que hay que hacerlo, sino de forma profundamente Espiritual, pidiendo con ella siglo XX, siglo XXI, es nuestro ahora, el Misterio de Cristo, de sus Misterios de Gozo, de sus Misterios Iluminados, de sus Misterios de la Pasión, de sus Misterios de la Resurrección, que así sea.
33:51
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Presentemos nuestras peticiones al Señor
en esta Fiesta de San Juan de Ávila.
34:07
Peticiones de los Fieles
℣. Por la Santa Iglesia de Dios
Para que el Señor suscite en ella
Predicadores de la Fe Apostólica
que lleven la salvación
hasta el confín de la Tierra.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Sacerdotes hoy, especialmente por los de España
Para que emulando al Buen Pastor
en el ejercicio de su Ministerio
crezcan cada vez más en la Santidad.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por las Vocaciones
Para que surjan jóvenes
que a ejemplo de San Juan de Ávila
sean Sabio Maestros en el Espíritu.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Sacerdotes que sufren la crisis espiritual, están enfermo, o se sienten solos en su ancianidad
Para que caminando por cañadas oscuras
confíen en el Señor
que va con ellos.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por nuestra Iglesia Diocesana
Para que valoremos el Ministerio
de nuestros Sacerdotes
y colaboremos con ello
en ser sal y luz del mundo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
35:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Escucha Señor
nuestras suplicas que hoy te dirigimos
confiando en la valiosa intercesión
de San Juan de Ávila
y concédenos lo que te pedimos.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
Himno Acatisto a la Madre de Dios
Procedencia del Himno
Salve, por ti resplandece la dicha;
Salve, por ti se eclipsa la pena.
Salve, levantas a Adán, el caído;
Salve, rescatas el llanto de Eva.
Salve, oh cima encumbrada a la mente del hombre;
Salve, abismo insondable a los ojos del ángel.
Salve, tú eres de veras el trono del Rey;
Salve, tú llevas en ti al que todo sostiene.
Salve, lucero que el Sol nos anuncia;
Salve, regazo del Dios que se encarna.
Salve, por ti la creación se renueva;
Salve, por ti el Creador nace niño.
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, tú guía al eterno consejo;
Salve, tú prenda de arcano misterio.
Salve, milagro primero de Cristo;
Salve, compendio de todos sus dogmas.
Salve, celeste escalera que Dios ha bajado;
Salve, oh puente que llevas los hombres al cielo.
Salve, de angélicos coros solemne portento;
Salve, de turba infernal lastimero flagelo.
Salve, inefable, la Luz alumbraste;
Salve, a ninguno dijiste el secreto.
Salve, del docto rebasas la ciencia;
Salve, del fiel iluminas la mente.
Salve, ¡Virgen y Esposa!
Salve, ¡Virgen y Esposa!
39:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Orate, fratres:
ut meum ac vestrum sacrificium
acceptabile fiat apud
Deum Patrem omnipotentem.
℟. Suscipiat Dominus sacrificium
de manibus tuis ad laudem et gloriam
nominis sui, ad utilitatem quoque
nostram totiusque Ecclesiæ suæ sanctæ.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Orate, fratres:
ut meum ac vestrum sacrificium
acceptabile fiat apud
Deum Patrem omnipotentem.
℟. Suscipiat Dominus sacrificium
de manibus tuis ad laudem et gloriam
nominis sui, ad utilitatem quoque
nostram totiusque Ecclesiæ suæ sanctæ.
39:23
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Orad Hermanos:
para que esté sacrificio mío
y vuestro sea agradable
a Dios Padre Todopoderoso.
℟. El Señor reciba de tus manos
este sacrificio para alabanza
y gloria de su nombre
para nuestro bien
y el de toda su Santa Iglesia.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Orad Hermanos:
para que esté sacrificio mío
y vuestro sea agradable
a Dios Padre Todopoderoso.
℟. El Señor reciba de tus manos
este sacrificio para alabanza
y gloria de su nombre
para nuestro bien
y el de toda su Santa Iglesia.
39:37
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℟. Por este sacrificio de salvación
que te ofrecemos con reverencia profunda
enciende Señor nuestros corazones
en el Fuego del Espíritu Santo
con que encendiste el alma llena
de Caridad Pastoral de San Juan de Ávila.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℟. Por este sacrificio de salvación
que te ofrecemos con reverencia profunda
enciende Señor nuestros corazones
en el Fuego del Espíritu Santo
con que encendiste el alma llena
de Caridad Pastoral de San Juan de Ávila.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
PREX EUCHARISTICA
PRÆFATIO
40:04
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Dóminus vobíscum.
℟. Et cum spíritu tuo.
℣. Sursum corda.
℟. Habémus ad Dóminum.
℣. Grátias agámus Dómino Deo nostro.
℟. Dignum et iustum est.
PRÆFATIO
40:04
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Dóminus vobíscum.
℟. Et cum spíritu tuo.
℣. Sursum corda.
℟. Habémus ad Dóminum.
℣. Grátias agámus Dómino Deo nostro.
℟. Dignum et iustum est.
PLEGARIA EUCARÍSTICA
PREFACIO
40:04
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
PREFACIO
40:04
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
40:31
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracia siempre
y en todo lugar Señor, Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
por Cristo Señor Nuestro
porque enriqueciste
con el Carisma de Sabiduría
a San Juan de Ávila
para que como Maestro
llevase muchas almas
por el Camino de la Santidad
Formador de Sacerdotes
Misionero infatigable
abrió Caminos al Evangelio
para que todos sepan
que nuestro Dios es Amor
por eso con los Ángeles y Arcángeles
y con todos los Coros Celestiales
cantamos sin cesar
el Himno de tu Gloria:
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracia siempre
y en todo lugar Señor, Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
por Cristo Señor Nuestro
porque enriqueciste
con el Carisma de Sabiduría
a San Juan de Ávila
para que como Maestro
llevase muchas almas
por el Camino de la Santidad
Formador de Sacerdotes
Misionero infatigable
abrió Caminos al Evangelio
para que todos sepan
que nuestro Dios es Amor
por eso con los Ángeles y Arcángeles
y con todos los Coros Celestiales
cantamos sin cesar
el Himno de tu Gloria:
41:13
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Dominus Deus, Sabaoth.
Pleni sunt coeli et terra gloria tua.
Hosanna in excelsis.
Benedictus qui venit in nomine Domini
Hosanna in excelsis.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Dominus Deus, Sabaoth.
Pleni sunt coeli et terra gloria tua.
Hosanna in excelsis.
Benedictus qui venit in nomine Domini
Hosanna in excelsis.
41:13
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Santo, Santo, Santo,
Santo, Santo, Santo,
Señor Dios de los Ejércitos.
El cielo y la tierra están
llenos de tu gloria.
¡Hosanna! en el Cielos.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosanna! en las Alturas.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Santo, Santo, Santo,
Santo, Santo, Santo,
Señor Dios de los Ejércitos.
El cielo y la tierra están
llenos de tu gloria.
¡Hosanna! en el Cielos.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosanna! en las Alturas.
PLEGARIA EUCARÍSTICA I
42:32
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Padre Misericordioso
te pedimos humildemente
por Jesucristo Tu Hijo
Nuestro Señor, que aceptes
y bendigas estos dones
este sacrificio Santo y Puro
que te ofrecemos, ante todo
por tu Iglesia Santa y Católica
para que le concedas la paz
la proteja, la congreges
en la unidad y la gobierne
en el mundo entero,
con tu servidor el Papa Francisco
con nuestro Obispos Demetrio
con nosotros indígenos siervos tuyos
y todos los demás Obispos que Fieles
a la Verdad promueven la Fe
Católica y Apostólica.
43:08
Exmo. Rvmo. Sr. D. Demetrio Fernández González
Obispo de Córdoba
℣. Acuérdate Señor de tus hijos
y de todos los aquí reunidos
cuya Fe y entrega bien conoces
por ellos y todos los suyos
por el perdón de sus pecados
y la salvación que esperan
Te ofrecemos y ellos mismos
Te ofrecen, este sacrificio
de alabanza a Tí Eterno Dios
Vivo y Verdadero.
43:38
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Francisco Javier Martínez Fernández
Arzobispo de Granada
℣. Reunidos en Comunión
con toda la Iglesia
Veneramos la Memoria ante todo
de la Gloriosa Siempre Virgen María
Madre de Jesucristo
Nuestro Dios y Señor
la de su Esposo San José
la de los Santos Apóstoles
y Mártires, Pedro y Pablo
Andrés, Santiago, y Juan,
Tomás, Santiago, Felipe,
Bartolomé, Mateo, Simón y Tadeo
Lino, Cleto, Clemente, Sixto
Cornelio, Cipriano, Lorenzo
Crisógono, Juan y Pablo
Cosme y Damián y la de todos
los Santos, por sus Méritos
y Oraciones concédenos
en todo tu protección.
44:28
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Acepta Señor en Tu Bondad
esta ofrenda de tus siervos
y de toda tu Familia Santa
ordena tu paz nuestros días
líbranos de la condenación eterna
y cuéntanos entre tus Elegidos +
Bendice y Santifica
esta Ofrenda Padre
haciéndola perfecta
Espiritual y Digna de Tí
que se convierta
para nosotros
en el Cuerpo y la Sangre
de Tu Hijo amado
Jesucristo Nuestro Señor
el cual la víspera
y elevando los ojos al cielo
hacia Tí, Dios Padre Suyo
Todopoderoso, dando gracias
Te Bendijo, lo partió
y lo dio a sus discípulos
diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL,
PORQUE ESTE ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
El Arzobispo Monseñor Rouco Varela presenta al pueblo la Hostia Consagrada y hace la genuflexión en señal de Adoración.
Del mismo modo acabada la cena,
tomó este Cáliz, Glorioso
en su Santas y Venerables Manos,
dando gracias te bendijo,
y lo dió a Sus Discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ
DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA
NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADA
POR VOSOTROS Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
El Arzobispo Monseñor Rouco Varela presenta al pueblo el Cáliz y hace la genuflexión en señal de Adoración.
46:31
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Éste es el Sacramento de Nuestra Fe.
Coro y la Asamblea:
℟. Anunciamos tu muerte, Señor.
Proclamamos tu Resurrección.
Hasta que vuelvas.
46:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Por eso Padre,
nosotros tus siervos
y todo tu Pueblo Santo
al Celebrar este Memorial
de la muerte gloriosa
de Jesucristo, Tu Hijo
Nuestro Señor
de su Santa Resurrección
del lugar de los muertos
y de su admirable
Ascensión a los Cielos
te ofrecemos Dios
de Gloria y Majestad
de los mismos bienes
que nos has dado
el Sacrificio Puro,
Inmaculado y Santo
Pan de Vida Eterna
y Cáliz de Eterna Salvación.
Mira con ojos de bondad
esta ofrenda y acéptala
cómo aceptaste los dones
del Justo Abel
el Sacrificio de Abraham
nuestro padre en la Fe
y la Oblación Pura
de tu sumo el Sacerdote
Melquisedec, te pedimos
humildemente Dios Todopoderoso
que esta ofrenda sea llevada
a tu presencia,
hasta el Altar del Cielo
por manos de tu Ángel
para que cuantos recibimos
el Cuerpo y la Sangre de Tu Hijo
al participar aquí de este Altar
seamos colmados
de Gracia y Bendición.
47:55
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Francisco Jesús Orozco Mengíbar
Obispo de Guadix
℣. Acuérdate también Señor
de tus hijos, que nos han precedido
con el signo de la Fe
y duermen ya el sueño de la paz
A ellos Señor, y a cuantos descansan
en Cristo, concédeles
el lugar del consuelo
de la luz y de la paz.
48:16
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Jesús Esteban Catalá Ibáñez
Obispo de Málaga
℣. Y a nosotros pecadores
siervos tuyos, que confiamos
en tu infinita misericordia
admítenos en la Asamblea
de los Santos Apóstoles y Mártires
Juan el Bautista, Estebán,
Matías y Bernabé, Ignacio,
Alejando, Marcelino y Pedro
Felicidad y Perpetua, Águeda
Lucía, Inés, Cecilia, Anastasia
y de todos los Santos
y acéptanos en su compañía
no por nuestros méritos
sino conforme a Tu Bondad.
48:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Por Cristo, por quien sigues creando
todos los bienes, los Santificas
los llenas de Vida, los Bendices
y los reparte entre nosotros.
49:08
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Por Cristo, con Él y en Él,
a ti, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo Honor y toda Gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
42:32
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Padre Misericordioso
te pedimos humildemente
por Jesucristo Tu Hijo
Nuestro Señor, que aceptes
y bendigas estos dones
este sacrificio Santo y Puro
que te ofrecemos, ante todo
por tu Iglesia Santa y Católica
para que le concedas la paz
la proteja, la congreges
en la unidad y la gobierne
en el mundo entero,
con tu servidor el Papa Francisco
con nuestro Obispos Demetrio
con nosotros indígenos siervos tuyos
y todos los demás Obispos que Fieles
a la Verdad promueven la Fe
Católica y Apostólica.
43:08
Exmo. Rvmo. Sr. D. Demetrio Fernández González
Obispo de Córdoba
℣. Acuérdate Señor de tus hijos
y de todos los aquí reunidos
cuya Fe y entrega bien conoces
por ellos y todos los suyos
por el perdón de sus pecados
y la salvación que esperan
Te ofrecemos y ellos mismos
Te ofrecen, este sacrificio
de alabanza a Tí Eterno Dios
Vivo y Verdadero.
43:38
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Francisco Javier Martínez Fernández
Arzobispo de Granada
℣. Reunidos en Comunión
con toda la Iglesia
Veneramos la Memoria ante todo
de la Gloriosa Siempre Virgen María
Madre de Jesucristo
Nuestro Dios y Señor
la de su Esposo San José
la de los Santos Apóstoles
y Mártires, Pedro y Pablo
Andrés, Santiago, y Juan,
Tomás, Santiago, Felipe,
Bartolomé, Mateo, Simón y Tadeo
Lino, Cleto, Clemente, Sixto
Cornelio, Cipriano, Lorenzo
Crisógono, Juan y Pablo
Cosme y Damián y la de todos
los Santos, por sus Méritos
y Oraciones concédenos
en todo tu protección.
44:28
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Acepta Señor en Tu Bondad
esta ofrenda de tus siervos
y de toda tu Familia Santa
ordena tu paz nuestros días
líbranos de la condenación eterna
y cuéntanos entre tus Elegidos +
Bendice y Santifica
esta Ofrenda Padre
haciéndola perfecta
Espiritual y Digna de Tí
que se convierta
para nosotros
en el Cuerpo y la Sangre
de Tu Hijo amado
Jesucristo Nuestro Señor
el cual la víspera
y elevando los ojos al cielo
hacia Tí, Dios Padre Suyo
Todopoderoso, dando gracias
Te Bendijo, lo partió
y lo dio a sus discípulos
diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL,
PORQUE ESTE ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
El Arzobispo Monseñor Rouco Varela presenta al pueblo la Hostia Consagrada y hace la genuflexión en señal de Adoración.
Del mismo modo acabada la cena,
tomó este Cáliz, Glorioso
en su Santas y Venerables Manos,
dando gracias te bendijo,
y lo dió a Sus Discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE ÉL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ
DE MI SANGRE, SANGRE DE LA ALIANZA
NUEVA Y ETERNA, QUE SERÁ DERRAMADA
POR VOSOTROS Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
El Arzobispo Monseñor Rouco Varela presenta al pueblo el Cáliz y hace la genuflexión en señal de Adoración.
46:31
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Éste es el Sacramento de Nuestra Fe.
Coro y la Asamblea:
℟. Anunciamos tu muerte, Señor.
Proclamamos tu Resurrección.
Hasta que vuelvas.
46:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Por eso Padre,
nosotros tus siervos
y todo tu Pueblo Santo
al Celebrar este Memorial
de la muerte gloriosa
de Jesucristo, Tu Hijo
Nuestro Señor
de su Santa Resurrección
del lugar de los muertos
y de su admirable
Ascensión a los Cielos
te ofrecemos Dios
de Gloria y Majestad
de los mismos bienes
que nos has dado
el Sacrificio Puro,
Inmaculado y Santo
Pan de Vida Eterna
y Cáliz de Eterna Salvación.
Mira con ojos de bondad
esta ofrenda y acéptala
cómo aceptaste los dones
del Justo Abel
el Sacrificio de Abraham
nuestro padre en la Fe
y la Oblación Pura
de tu sumo el Sacerdote
Melquisedec, te pedimos
humildemente Dios Todopoderoso
que esta ofrenda sea llevada
a tu presencia,
hasta el Altar del Cielo
por manos de tu Ángel
para que cuantos recibimos
el Cuerpo y la Sangre de Tu Hijo
al participar aquí de este Altar
seamos colmados
de Gracia y Bendición.
47:55
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Francisco Jesús Orozco Mengíbar
Obispo de Guadix
℣. Acuérdate también Señor
de tus hijos, que nos han precedido
con el signo de la Fe
y duermen ya el sueño de la paz
A ellos Señor, y a cuantos descansan
en Cristo, concédeles
el lugar del consuelo
de la luz y de la paz.
48:16
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Jesús Esteban Catalá Ibáñez
Obispo de Málaga
℣. Y a nosotros pecadores
siervos tuyos, que confiamos
en tu infinita misericordia
admítenos en la Asamblea
de los Santos Apóstoles y Mártires
Juan el Bautista, Estebán,
Matías y Bernabé, Ignacio,
Alejando, Marcelino y Pedro
Felicidad y Perpetua, Águeda
Lucía, Inés, Cecilia, Anastasia
y de todos los Santos
y acéptanos en su compañía
no por nuestros méritos
sino conforme a Tu Bondad.
48:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Por Cristo, por quien sigues creando
todos los bienes, los Santificas
los llenas de Vida, los Bendices
y los reparte entre nosotros.
49:08
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Por Cristo, con Él y en Él,
a ti, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo Honor y toda Gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
RITO DE LA COMUNIÓN
PADRENUESTRO
49:35
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza nos atrevemos a decir:
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
50:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
℟. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.
49:35
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Fieles a la recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza nos atrevemos a decir:
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
50:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
℟. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria, por siempre, Señor.
Pater Noster
49:35
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Praeceptis salutaribus moniti, et divina institutione formati, audemus dicere:
Pater Noster, qui es in caelis,
sanctificétur nomen Tuum,
adveniat Regnum Tuum,
fiat volúntas tua, sicut in caelo et in terra.
Panem nostrum cotidiánum da nobis hódie,
et dimitte nobis débita nostra,
sicut et nos dimittímus debitóribus nostris;
et ne nos indúcas in tentationem,
sed libera nos a malo.
50:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Libera nos, quæsumus, Dómine,
ab ómnibus malis, da propitius
pacem in diébus nostris, ut, ope
misericórdiæ tuæ adiúti,
et a peccáto simus semper
liberi et ab omni perturbatióne
secúri: expectántes beátam spem
at advéntum Salvatoris nostri Iesu Christi.
℟. Quia tuum est regnuum, et potestas, et glória in sæcula.
49:35
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Praeceptis salutaribus moniti, et divina institutione formati, audemus dicere:
Pater Noster, qui es in caelis,
sanctificétur nomen Tuum,
adveniat Regnum Tuum,
fiat volúntas tua, sicut in caelo et in terra.
Panem nostrum cotidiánum da nobis hódie,
et dimitte nobis débita nostra,
sicut et nos dimittímus debitóribus nostris;
et ne nos indúcas in tentationem,
sed libera nos a malo.
50:39
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Libera nos, quæsumus, Dómine,
ab ómnibus malis, da propitius
pacem in diébus nostris, ut, ope
misericórdiæ tuæ adiúti,
et a peccáto simus semper
liberi et ab omni perturbatióne
secúri: expectántes beátam spem
at advéntum Salvatoris nostri Iesu Christi.
℟. Quia tuum est regnuum, et potestas, et glória in sæcula.
51:13
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles:
"La paz os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta nuestros pecados,
sino la fe de tu Iglesia
y, conforme a tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
51:38
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Que la Paz del Señor esté siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Daos fraternalmente la Paz.
℟. La Paz esté contigo.
51:58
El Coro de la Catedral de Montilla
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. miserere nobis (bis).
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. miserere nobis (bis).
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. dona nobis pacem (bis).
53:25
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados a la cena del Señor.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
El Cuerpo de Cristo.
℟. Amen.
54:11
D. Joaquín de Velasco
Como acostumbramos a hacer en nuestras retransmisiones, mientras se administran la Sagrada Comunión, resumiremos brevemente la Homilía que acaba de pronunciar el Cardenal Rouco. Tras saludar a los presentes, especialmente a los Obispos de Córdoba, de Guadix, de Málaga y al Arzobispo de Granada. Ha dado gracias al Señor, gracias al Señor en este momento en el que él continúa eternamente Presente. Ha recordado también, la Proclamación y ha incidido en la cercanía del fallecimiento de Juan de Ávila, con la Batalla de Lepanto. Y la influencia en ella de las Oraciones del Papa a la Virgen del Rosario, cuyo día también Celebramos hoy. San Juan de Ávila, ha dicho Monseñor, resulta impresionante y fecundo en su Magisterio, en su Celo Apostólico y en su Sabiduría.
55:10
D. Joaquín de Velasco
Pero esa Sabiduría y Celo no son propios, sino recibidos del Espíritu Santo. Es una gracia que da el Espíritu Santo, a través de la escucha constante, de la Palabra de Dios en el Evangelio y de la Práctica de los Sacramentos. San Juan de Ávila, ha continuado el Cardenal, estaba centrado en Cristo, con las interpretaciones luteranas de sus tiempos, que no alcanzan en su plenitud el Concepto de Dios y la Dignidad y Capacidad del hombre. San Juan de Ávila contra ellos, da una respuesta plenamente Cristiana. Además ha incidido en su importancia como precursor del siglo de oro. Su Figura y Obra, ha dicho, es fecunda, pero no se entiende a San Ignacio de Loyola, a Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz sin comprender también a San Juan de Ávila y viceversa.
56:08
D. Joaquín de Velasco
Su figura, nos ilumina desde el siglo de oro hasta hoy, reconociendo el Sacerdocio de forma muy especial. Para que la presencia de Cristo se haga evidente en la vida diaria. Para ello, el Sacerdote debe ser en su vida y en su práctica, imagen de Cristo, debe hacer de su vida y su camino la vida y el camino de Cristo. Para así proyectar en la historia, la luz de Cristo. Y para terminar, a manifestado, un deseo de paz, de una paz vivida a la luz de Cristo y de su bendita Madre, la Virgen del Rosario.
59:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Oremos.
Saciados con la dulzura
del manjar de vida
te suplicamos Señor
que nos unamos más a tu Hijo
formando parte más perfectamente
de tu cuerpo Místico
Él que vive reina
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
01:00:20
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Demetrio Fernández
Obispo de Córdoba
Quiero agradecer a todos vuestra participación, muchos que nos siguen a través de la televisión. Han visto pero es la Fiesta de la Virgen del Rosario y Celebramos el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia Universal. Gracias Señor Cardenal Rouco, por estar aquí hoy, como hace 10 años, Presidiendo esta Misa de Acción de Gracias. Igualmente gracias al Señor Arzobispo de Granada, al Obispo de Málaga, al Obispo de Guadix. A este grupo de Sacerdotes y a vosotros Seminaristas y a todos los Fieles que hoy participáis. San Juan de Ávila dice de María: «que es la enfermera en el Hospital de la Misericordia».
01:01:12
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Demetrio Fernández
Obispo de Córdoba
Pues en esta Fiesta de la Virgen del Rosario, también aprendemos de San Juan de Ávila, esta devoción. Que además en Montilla es la Virgen de la Aurora, el mes de octubre, mes del Rosario, mes de María. Hoy hemos recordado, esta Proclamación, del Doctorado y le damos gracias a Dios y nos comprometemos a continuar difundiendo la devoción a San Juan de Ávila. Recibimos ahora la bendición del Señor.
BENDICIÓN SOLEMNE
01:01:45
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
01:01:56
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Bendito sea el Nombre del Señor.
℟. Ahora y por todos los siglos.
℣. Nuestro Auxilio es el Nombre del Señor.
℟. Que hizo el Cielo y la Tierra.
℣. Et benedictio Dei omnipotentis,
✠ Patris, et ✠ Filii, ✠ et Spiritus Sancti,
descendat super vos et maneat semper.
℟. Amen.
01:02:29
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Con la licencia del Señor Obispo de Córdoba, me permito recordar que el día 31 de octubre, se cumplirán 40 años en la primera visita de San Juan Pablo II a España. Que terminó el 9 de noviembre, en el Acto de Europa, en la Catedral de Santiago de Compostela. Él fue decisivo, para la Causa del reconocimiento de San Juan de Ávila, con Doctor de la Iglesia Universal. Fue también decisivo para actualizar, esa Espiritualidad Sacerdotal en su tiempo. Recordamos la Ordenación de los Sacerdotes en Valencia, a principios de noviembre y la de los Sacerdotes en Sevilla en su tercera visita a España, su cuarta visita a España, el año 1993. El Papa San Juan Pablo II, fue por lo tanto también un Papa el tiempo, hizo su Tesis Doctoral, sobre San Juan de la Cruz. En su Doctorado en Teología sobre la luz de la Fe en San Juan de la Cruz y seguro que no se puede entender.
01:03:37
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y ese trabajo y su autor, el autor sobre el que él reflexionó y escribió ... San Juan de Ávila. Así que nos alegramos y creo que sería bueno que la Iglesia en España recordarse y actualizarse los mensajes de Juan Pablo II, en su increíble viaje a España, del año 1982, muchas Señor Obispo.
01:04:05
El Diácono:
Pódeis ir en Paz.
℟. Demos Gracias a Dios.
01:04:16
D. Joaquín de Velasco
Así concluye esta Eucaristía, en Acción de Gracias por el X Aniversario de la Proclamación como Doctor de la Iglesia Universal, de San Juan de Ávila. Apóstol de Andalucía y Patrono del Clero Español. Les agradecemos su atención, a través de 13 Televisión, reciban un cordial saludo, desde Córdoba, desde Montilla. De Montilla Televisión, del Canal de la Diócesis de Córdoba y de este que les habla Joaquín de Velasco.
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles:
"La paz os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta nuestros pecados,
sino la fe de tu Iglesia
y, conforme a tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
51:38
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Que la Paz del Señor esté siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Daos fraternalmente la Paz.
℟. La Paz esté contigo.
51:58
El Coro de la Catedral de Montilla
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. miserere nobis (bis).
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. miserere nobis (bis).
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. dona nobis pacem (bis).
53:25
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados a la cena del Señor.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
El Cuerpo de Cristo.
℟. Amen.
54:11
D. Joaquín de Velasco
Como acostumbramos a hacer en nuestras retransmisiones, mientras se administran la Sagrada Comunión, resumiremos brevemente la Homilía que acaba de pronunciar el Cardenal Rouco. Tras saludar a los presentes, especialmente a los Obispos de Córdoba, de Guadix, de Málaga y al Arzobispo de Granada. Ha dado gracias al Señor, gracias al Señor en este momento en el que él continúa eternamente Presente. Ha recordado también, la Proclamación y ha incidido en la cercanía del fallecimiento de Juan de Ávila, con la Batalla de Lepanto. Y la influencia en ella de las Oraciones del Papa a la Virgen del Rosario, cuyo día también Celebramos hoy. San Juan de Ávila, ha dicho Monseñor, resulta impresionante y fecundo en su Magisterio, en su Celo Apostólico y en su Sabiduría.
55:10
D. Joaquín de Velasco
Pero esa Sabiduría y Celo no son propios, sino recibidos del Espíritu Santo. Es una gracia que da el Espíritu Santo, a través de la escucha constante, de la Palabra de Dios en el Evangelio y de la Práctica de los Sacramentos. San Juan de Ávila, ha continuado el Cardenal, estaba centrado en Cristo, con las interpretaciones luteranas de sus tiempos, que no alcanzan en su plenitud el Concepto de Dios y la Dignidad y Capacidad del hombre. San Juan de Ávila contra ellos, da una respuesta plenamente Cristiana. Además ha incidido en su importancia como precursor del siglo de oro. Su Figura y Obra, ha dicho, es fecunda, pero no se entiende a San Ignacio de Loyola, a Santa Teresa de Jesús o San Juan de la Cruz sin comprender también a San Juan de Ávila y viceversa.
56:08
D. Joaquín de Velasco
Su figura, nos ilumina desde el siglo de oro hasta hoy, reconociendo el Sacerdocio de forma muy especial. Para que la presencia de Cristo se haga evidente en la vida diaria. Para ello, el Sacerdote debe ser en su vida y en su práctica, imagen de Cristo, debe hacer de su vida y su camino la vida y el camino de Cristo. Para así proyectar en la historia, la luz de Cristo. Y para terminar, a manifestado, un deseo de paz, de una paz vivida a la luz de Cristo y de su bendita Madre, la Virgen del Rosario.
59:54
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Oremos.
Saciados con la dulzura
del manjar de vida
te suplicamos Señor
que nos unamos más a tu Hijo
formando parte más perfectamente
de tu cuerpo Místico
Él que vive reina
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
01:00:20
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Demetrio Fernández
Obispo de Córdoba
Quiero agradecer a todos vuestra participación, muchos que nos siguen a través de la televisión. Han visto pero es la Fiesta de la Virgen del Rosario y Celebramos el X Aniversario de la Proclamación de San Juan de Ávila, como Doctor de la Iglesia Universal. Gracias Señor Cardenal Rouco, por estar aquí hoy, como hace 10 años, Presidiendo esta Misa de Acción de Gracias. Igualmente gracias al Señor Arzobispo de Granada, al Obispo de Málaga, al Obispo de Guadix. A este grupo de Sacerdotes y a vosotros Seminaristas y a todos los Fieles que hoy participáis. San Juan de Ávila dice de María: «que es la enfermera en el Hospital de la Misericordia».
01:01:12
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Demetrio Fernández
Obispo de Córdoba
Pues en esta Fiesta de la Virgen del Rosario, también aprendemos de San Juan de Ávila, esta devoción. Que además en Montilla es la Virgen de la Aurora, el mes de octubre, mes del Rosario, mes de María. Hoy hemos recordado, esta Proclamación, del Doctorado y le damos gracias a Dios y nos comprometemos a continuar difundiendo la devoción a San Juan de Ávila. Recibimos ahora la bendición del Señor.
BENDICIÓN SOLEMNE
01:01:45
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
01:01:56
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
℣. Bendito sea el Nombre del Señor.
℟. Ahora y por todos los siglos.
℣. Nuestro Auxilio es el Nombre del Señor.
℟. Que hizo el Cielo y la Tierra.
℣. Et benedictio Dei omnipotentis,
✠ Patris, et ✠ Filii, ✠ et Spiritus Sancti,
descendat super vos et maneat semper.
℟. Amen.
01:02:29
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Con la licencia del Señor Obispo de Córdoba, me permito recordar que el día 31 de octubre, se cumplirán 40 años en la primera visita de San Juan Pablo II a España. Que terminó el 9 de noviembre, en el Acto de Europa, en la Catedral de Santiago de Compostela. Él fue decisivo, para la Causa del reconocimiento de San Juan de Ávila, con Doctor de la Iglesia Universal. Fue también decisivo para actualizar, esa Espiritualidad Sacerdotal en su tiempo. Recordamos la Ordenación de los Sacerdotes en Valencia, a principios de noviembre y la de los Sacerdotes en Sevilla en su tercera visita a España, su cuarta visita a España, el año 1993. El Papa San Juan Pablo II, fue por lo tanto también un Papa el tiempo, hizo su Tesis Doctoral, sobre San Juan de la Cruz. En su Doctorado en Teología sobre la luz de la Fe en San Juan de la Cruz y seguro que no se puede entender.
01:03:37
Excmo. y Rvdmo. Sr. D. Antonio María Rouco Varela
Cardenal Arzobispo Emérito de Madrid
Y ese trabajo y su autor, el autor sobre el que él reflexionó y escribió ... San Juan de Ávila. Así que nos alegramos y creo que sería bueno que la Iglesia en España recordarse y actualizarse los mensajes de Juan Pablo II, en su increíble viaje a España, del año 1982, muchas Señor Obispo.
01:04:05
El Diácono:
Pódeis ir en Paz.
℟. Demos Gracias a Dios.
01:04:16
D. Joaquín de Velasco
Así concluye esta Eucaristía, en Acción de Gracias por el X Aniversario de la Proclamación como Doctor de la Iglesia Universal, de San Juan de Ávila. Apóstol de Andalucía y Patrono del Clero Español. Les agradecemos su atención, a través de 13 Televisión, reciban un cordial saludo, desde Córdoba, desde Montilla. De Montilla Televisión, del Canal de la Diócesis de Córdoba y de este que les habla Joaquín de Velasco.
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