Palabra de Vida 22/5/18:
«Quien quiera ser el primero, que sea el último»
Por P. Jesús Higueras
«Quien quiera ser el primero, que sea el último»
Por P. Jesús Higueras
Camino Católico
Publicado el 22 may. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Espacio "Palabra de Vida" de 13 TV del 22 de mayo de 2018, martes de la 7ª semana de Tiempo Ordinario, presentado por el padre Jesús Higueras, en el cual se comenta el evangelio del día.
Evangelio: San Marcos 9, 30-37:
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos.
Les decía:
«El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará».
Pero no entendían lo que decía, y les daba miedo preguntarle.
Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó:
«¿De qué discutíais por el camino?».
Ellos callaban, pues por el camino habían discutido quién era el más importante.
Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo:
«Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos».
Y tomando un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo:
«El que acoge a un niño como este en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí, no me acoge a mí, sino al que me ha enviado».
Les decía:
«El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará».
Pero no entendían lo que decía, y les daba miedo preguntarle.
Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó:
«¿De qué discutíais por el camino?».
Ellos callaban, pues por el camino habían discutido quién era el más importante.
Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo:
«Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos».
Y tomando un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo:
«El que acoge a un niño como este en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí, no me acoge a mí, sino al que me ha enviado».
Padre Don: Jesús Higueras Esteban
00:19
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos». Qué curioso, eh, si queremos realmente estar arriba, hay que ponerse abajo. Si queremos ser los primeros, nos tenemos que poner en el último lugar. ¿Qué quiere decir el Señor con esto?, una gran dificultad que tenemos para ser Santos, una gran dificultad que tenemos para saber, ¿sabeís cuál es? el afán de protagonismo. El querer ser el centro, el querer que nos reconozcan, que nos agradezcan, que vean lo buenos que somos. Lo bien que hemos hecho las cosas y claro hay gente que en ese sentido pues tiene un afán de protagonismo terrible.
00:55
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Había una canción hace muchos años de una cantante se llamaba a Cecilia que decía:
si no fuera por miedo
sería la novia en la boda
el niño en el bautizo o
el muerto en el entierro
con tal de dejar sus huellas y a veces nos gusta ser como el perejil de todas las salsas, nos gusta estar informados de todo. Pues bueno, hay que ser muy humilde para ponerse en el último lugar. El que quiera ser el primero que sea último. Esto quiere decir, hay que gozarse en que nosotros también estén bien, que tengan su protagonismo. Que la gente les quiera, en definitiva, el ponerse el último de todos es estar convencido que la humildad es una virtud. Que nos ayuda mucho a identificarnos, con Dios porque Cristo se puso al final de todo, es el último de todos.
01:35
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Ahora efectivamente está adelante pero porque se humilló completamente. Yo desde luego, mi experiencia que tengo en la Parroquia cuando los Grupos Parroquiales alguien tiene afán de protagonismo y quiere destacar y que su opinión impere sobre los demás. Pues ya eso es un motivo de conflictos, de luchas, de choques, porque cada propuesta porque tiene que ser más protagonistas y tiene que dejar de ser. Y lo mismo que pasa en la Parroquia pasa en las familias. Cuando alguien porque yo tengo más razón que los demás, porque yo quiero decirlo.
02:00
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Que terrible, si los afanes de protagonismo siempre son causas de división. Por eso Jesús decía quereis ser Santos, queréis llegar lejos, poneros al final, poneros a servir, poneros a disposición de los demás. No queréis tener siempre razón. No queréis ser siempre como el centro de atención. Porque eso al final es un egolatrismo, es una idolatría hacia mí mismo. Porque lo que yo pienso, porque lo que yo digo, porque lo que a mí me gusta, lo que a mí me parece, lo que yo he decidido, tiene que ser necesariamente lo mejor.
02:29
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y dices pués no, mi opinión es una más, como la de otros ni mejor ni peor. Pero bueno pues ahí está, si me la pide, la doy, pero no imponer nada, no querer ser ahí como el eje alrededor del cual todos tienen que girar. No podemos dejar que se nos meta ese afán de protagonismo, ese egocentrismo, porque nos hará mucho daño a nosotros y por supuesto aparte de hacernos daño a nosotros, también puede hacer mucho daño a los demás.
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos». Qué curioso, eh, si queremos realmente estar arriba, hay que ponerse abajo. Si queremos ser los primeros, nos tenemos que poner en el último lugar. ¿Qué quiere decir el Señor con esto?, una gran dificultad que tenemos para ser Santos, una gran dificultad que tenemos para saber, ¿sabeís cuál es? el afán de protagonismo. El querer ser el centro, el querer que nos reconozcan, que nos agradezcan, que vean lo buenos que somos. Lo bien que hemos hecho las cosas y claro hay gente que en ese sentido pues tiene un afán de protagonismo terrible.
00:55
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Había una canción hace muchos años de una cantante se llamaba a Cecilia que decía:
si no fuera por miedo
sería la novia en la boda
el niño en el bautizo o
el muerto en el entierro
con tal de dejar sus huellas y a veces nos gusta ser como el perejil de todas las salsas, nos gusta estar informados de todo. Pues bueno, hay que ser muy humilde para ponerse en el último lugar. El que quiera ser el primero que sea último. Esto quiere decir, hay que gozarse en que nosotros también estén bien, que tengan su protagonismo. Que la gente les quiera, en definitiva, el ponerse el último de todos es estar convencido que la humildad es una virtud. Que nos ayuda mucho a identificarnos, con Dios porque Cristo se puso al final de todo, es el último de todos.
01:35
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Ahora efectivamente está adelante pero porque se humilló completamente. Yo desde luego, mi experiencia que tengo en la Parroquia cuando los Grupos Parroquiales alguien tiene afán de protagonismo y quiere destacar y que su opinión impere sobre los demás. Pues ya eso es un motivo de conflictos, de luchas, de choques, porque cada propuesta porque tiene que ser más protagonistas y tiene que dejar de ser. Y lo mismo que pasa en la Parroquia pasa en las familias. Cuando alguien porque yo tengo más razón que los demás, porque yo quiero decirlo.
02:00
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Que terrible, si los afanes de protagonismo siempre son causas de división. Por eso Jesús decía quereis ser Santos, queréis llegar lejos, poneros al final, poneros a servir, poneros a disposición de los demás. No queréis tener siempre razón. No queréis ser siempre como el centro de atención. Porque eso al final es un egolatrismo, es una idolatría hacia mí mismo. Porque lo que yo pienso, porque lo que yo digo, porque lo que a mí me gusta, lo que a mí me parece, lo que yo he decidido, tiene que ser necesariamente lo mejor.
02:29
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y dices pués no, mi opinión es una más, como la de otros ni mejor ni peor. Pero bueno pues ahí está, si me la pide, la doy, pero no imponer nada, no querer ser ahí como el eje alrededor del cual todos tienen que girar. No podemos dejar que se nos meta ese afán de protagonismo, ese egocentrismo, porque nos hará mucho daño a nosotros y por supuesto aparte de hacernos daño a nosotros, también puede hacer mucho daño a los demás.
Santa Misa del martes 22 de mayo de 2018, 7ª semana de Tiempo Ordinario
Camino Católico
Publicado el 22 may. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Celebración de la Santa Misa del martes de la 7ª semana de Tiempo Ordinario, presidida por el P. José Blanco, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Inicio de la Santa Misa y Dedicación
00:56
Padre Don: José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
01:02
Padre Don: José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
01:14
Padre Don: José Blanco:
Hermanos buenos días, sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la 7ª Semana del Tiempo Ordinario. Ya hemos terminado el Ciclo Pascual con la Fiesta de Pentecostés del pasado Domingo. La Cincuentena Pascual y ahora ya volvemos al Tiempo Ordinario. Pero aún dentro de este tiempo ordinario hoy vamos a hacer mención de dos Santas. Pues bastante conocidas de todos nosotros, una española que es «Santa Joaquina Vedruna» y la otra «Santa Rita de Casia» también que todos conocen. Pues vamos a hacer mención a hacer la fiesta de estas dos Santas conocidas nuestras. Las dos casadas, las dos madres, las dos viudas, las dos religiosas, Joaquina Vedruna y santa Rita.
02:17
Padre Don: José Blanco:
Un saludo como siempre muy cordial y cercano a todos aquellos hermanos nuestros, que a través de canal 13 televisión se unen a nosotros en la Celebración Eucarística. Y ahora como siempre en un momento de silencio pedimos perdón al Señor por nuestros pecados.
02:46
Padre Don: José Blanco:
℣. Tú que eres la plenitud
de la Verdad y de la Gracia
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que te has hecho pobre
para enriquecernos
℟. Cristo, Ten Piedad
℣. Tú que has venido para hacer
de nosotros Tu Pueblo Santo
℟. Señor, Ten Piedad
03:08
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna
℟. Amen.
03:16
Padre Don: José Blanco:
Oremos
Señor Tú que otorgaste
a Santa Joaquina Vedruna
y a Santa Rita la gracia
de imitar con fidelidad a Cristo
pobre y humilde, concédenos también
a nosotros por su intercesión
de estas santas la gracia de vivir
fielmente nuestra vocación
para que así tendamos a la Perfección
que tú nos has propuesto
en la persona de tu Hijo
Él que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los siglos
de los siglos
℟. Amen.
04:14
Lectora de la Primera Lectura:
Lectura de la carta del apóstol Santiago 4, 1-10 1ª lectura: Pedís y no recibís, porque pedís mal.
04:19
Lectora de la Primera Lectura: - Queridos hermanos:
¿De dónde proceden los conflictos y las luchas que se dan entre vosotros? ¿No es precisamente de esos deseos de placer que pugnan dentro de vosotros? Ambicionáis y no tenéis, asesináis y envidiáis y no podéis conseguir nada; lucháis y os hacéis la guerra y no obtenéis porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, con la intención de satisfacer vuestras pasiones.
¡Adúlteros! ¿No sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Por tanto, si alguno quiere ser amigo del mundo, se constituye en enemigo de Dios.
¿O es que pensáis que la Escritura dice en vano: «El espíritu que habita en nosotros inclina a la envidia»? Pero la gracia que concede es todavía mayor; por eso dice: «Dios resiste a los soberbios, mas da su gracia a los humildes».
Por tanto, sed humildes ante Dios, pero resistid al diablo y huirá de vosotros. Acercaos a Dios y él se acercará a vosotros. Lavaos las manos, pecadores; purificad el corazón, los inconstantes. Lamentad vuestra miseria, haced duelo y llorad; que vuestra risa se convierta en duelo y vuestra alegría en aflicción. Humillaos ante el Señor y él os ensalzará.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
05:59
Lectora de los Salmos:
Salmo: Sal 54, 7-8. 9-10a. 10b- 11. 23 Encomienda a Dios tus afanes, que él te sustentará.
05:41
Lectora de los Salmos:
℣. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará.
℟. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará.
℣. Y pienso: «¡Quién me diera alas
de paloma para volar y posarme!
Emigraría lejos, habitaría
en el desierto». ℟.
℣. «Esperaría en el que puede
salvarme del huracán y la tormenta».
¡Destrúyelos, Señor,
confunde sus lenguas! ℟.
℣. Pues veo en la ciudad violencia
y discordia: día y noche hacen
la ronda sobre sus murallas. ℟.
℣. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará; no permitirá
jamás que el justo caiga. ℟.
06:58
Padre Don: José Blanco:
Aleluya Gál 6, 14 Aleluya, aleluya, aleluya
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Dios me libre de gloriarme
si no es en la cruz del Señor,
por lo cual el mundo
está crucificado para mí,
y yo para el mundo. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
07:41
Padre Don: José Blanco:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Marcos 9, 30-37 Evangelio: El Hijo del hombre va a ser entregado. Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos
07:42
Padre Don: José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Marcos
℟. Gloria a ti, Señor.
07:51
Padre Don: José Blanco:
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos.
Les decía:
«El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará». Pero no entendían lo que decía, y les daba miedo preguntarle. Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó:
«¿De qué discutíais por el camino?».
Ellos callaban, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo:
«Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos». Y tomando un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo:
«El que acoge a un niño como este en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí, no me acoge a mí, sino al que me ha enviado».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús
HOMILIA
09:09
Padre Don: José Blanco:
Sentáos un momento, la verdad es que al leer la Primera Lectura de hoy, de la Carta del Apóstol Santiago. Pues parece que nos está poniendo verdes, a los Cristianos, a los que él escribe, pero por extensión a todos los Cristianos. ¿Porqué?, pues porque por una parte nos dice que no caigamos en la soberbia de crearnos los mejores. Y aquellos a los que todo el mundo tiene que admirar. Y por otra parte, nos está invitando a la humildad. Pero en el fondo con estas palabras tan directas y tan duras para los Cristianos a los que él escribe. Pues como de alguna manera nos hunde en la miseria.
10:01
Padre Don: José Blanco:
Porque nos está llamando, bueno nos está diciendo que, estamos constantemente con conflictos y con luchas que se dan entre vosotros. Ambicionáis y no tenéis, asesinais y envidiais y no podéis conseguir nada. Lucháis y os hacéis la guerra, es decir es que nos pone verdes. No nos está diciendo una serie de cosas que realmente no son como para celebrarlo. Sin embargo, hay algo aquí fundamental, después de decirnos lo los malos que somos. Nos dice, la gracia que concede Dios es todavía mayor, es decir, nosotros somos pecadores, qué duda cabe. Pero la gracia que nos concede el Señor es todavía mayor, por eso dice Dios resiste a los soberbios, más da su gracia a los humildes.
11:07
Padre Don: José Blanco:
Yo creo que es el dentro de todos, digamos ambiente de ponernos todo lo malo, lo malos que somos. Todos los defectos que tenemos esta frase quizá es la más importante. Que aunque seamos soberbios, aunque seamos pecadores el Señor da su gracia a los humildes. Por tanto saca él como consecuencia, ser humildes ante Dios y resistir al diablo que él además huirá de vosotros. Acercaos a Dios y Él se acercará a vosotros. Todavía insiste lavaos las manos pecadores, purificad el corazón, lamentad vuestra miseria. Haced duelo y llorad, humillaos, termina, humillaos ante el Señor y Él os ensalzará.
12:10
Padre Don: José Blanco:
Es quizá, como digo, dentro del reconocimiento de nuestros defectos y que con dureza el Apóstol Santiago nos echa en cara. Dentro de todo eso, el mensaje sigue siendo todavía esperanzador. Humillaos ante el Señor y Él os ensalzará. No nos suena estas últimas palabras, no nos suenan tan bien al Evangelio de hoy. Donde por una parte Jesús, en el camino ha ido instruyendo a los discípulos y anunciándole Su Pasión y Su Muerte. Pero nos dice San Marcos, pero ellos no lo entendían. Pero no entendían lo que decía y les daba miedo preguntarle. Quizá porque Jesús tenía un carácter fuerte. El hecho es que les daba miedo preguntarle.
13:16
Padre Don: José Blanco:
Pero de lo que sí estaban seguros los Discípulos, es de que Jesús quería después de su Muerte y Resurrección quería dejar una Institución. Es decir, la Iglesia y que ellos fueran los Discípulos, los Apóstoles los que dieran comienzo a la iglesia. Lo hemos celebrado anteayer en Pentecostés. Pero claro, también como humanos, pues si Jesús quiere dejar esta Institución, quiere dejar esta Comunidad. ¿Cómo se va a organizar esta Comunidad?, ¿quién va a ser el principal en esta Comunidad? es muy humano. ¿Seré yo el que mande?, ¿seré yo el principal?, ¿seré yo el director? digámoslo así.
14:09
Padre Don: José Blanco:
Y Jesús lo que les dice es, lo que hemos oído os decía en la última expresión de Santiago. Donde decía: «humillaos ante el Señor y Él os ensalzará». Y aquí Jesús dice: «quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos». Es que los criterios humanos aquí, no nos sirven, aquí nos sirven los criterios que nos da el propio Jesús. Que es ser servidor de todos, ser el último de todos, el que se ensalza será humillado, el que se humilla será enaltecido. Por lo tanto no sigáis los criterios del mundo. Lo ha dicho en la Lectura de Santiago, «el que es amigo del mundo, es enemigo de Dios».
15:01
Padre Don: José Blanco:
Porque los criterios del mundo normalmente, pues no van o no se compaginan suficientemente con los valores del Señor con los valores del Evangelio. Y qué es lo que hace Jesús para que lo entiendan, para qué se den cuenta de lo que quiere decir. Escoge un niño y lo pone en el centro, todos sabemos, que un niño lo que tenemos que hacer los adultos, es servirle, es sustentable, es educarle, es vestirle. Es decir el niño lo que requiere, son los servicios del adulto por completo. Porque él no tiene digamos fuerzas, no tiene fundamento todavía, para nada más. Y yo creo que entonces los Discípulos sí que lo debieron entender. Es decir, nosotros al niño tenemos que darle todo, servirle, ser su servidor.
16:04
Padre Don: José Blanco:
En el fondo somos sus servidores, los que sois padres o madres lo sabéis deme de memoria todo esto claro. Porque lo habéis experimentado, el niño merece todo nuestro servicio. Y los Discípulos al ver lo que está diciendo Jesús, pues se darían cuenta, es verdad. El servicio es lo principal y nosotros ahora como miembros o dirigentes de una Comunidad que esperamos formar. Que todavía no estaba hecha la Iglesia, tenemos que ser los servidores y ese es el criterio de Dios no el criterio de los hombres. El criterio de Dios es servir, a los hermanos. Pues como veis, la Palabra de Dios que hoy hemos proclamado, debió, no sé de qué manera, pero debió impregnar los corazones de las dos Santas que hoy celebramos.
17:09
Padre Don: José Blanco:
«Santa Rita» del siglo finales del XIV principios del XV. Como os decía antes madre, el marido parece que la maltrataba, tuvo dos hijos. Al marido le asesinaron también en una revuelta, debío ser pues eso, un nombre agresivo. Entonces ella una vez viuda, entra en la «Orden de las Agustinas» y ahí dedica toda su vida hasta la muerte. Y murió, para la edad en la que estamos hablando del siglo XIV, XV pues murió mayor. Porque murió a los 76 años y en aquellos tiempos era una edad grande. Y bueno como sabéis se les representa por «una espina y por una rosa». Cuándo sé Canonizó, pues el Papa Juan Pablo II en una Celebración de Santa Rita que dijo que: «la espina se convirtió en rosa». Es decir, «el dolor el sufrimiento se convirtió en Olor de Santidad».
18:35
Padre Don: José Blanco:
Le sirvió para ser Santa y «Joaquina Vedruna», era barcelonesa. Pues también tuvo nueve hijos, sufrió eran los momentos en el siglo XIX los momentos de las Guerras Carlistas. Tuvo que huir a Francia, tuvo porque era de una familia la acomodada. Y bueno, pues sintió la llamada para Fundar a las «Hermanas Carmelitas de la Caridad». Que es lo que hizo, fundarlo, por supuesto decía antes que había tenido nuevos hijos. Luego quedó viuda y efectivamente luego se hizo religiosa y fundó esta Congregación de las «Hermanas Carmelitas de la Caridad».
19:25
Padre Don: José Blanco:
Dedicadas fundamentalmente, pues a los enfermos y a la educación de la mujer, a la adecuación de la juventud femenina. Bueno a estas dos Santas Celebramos hoy y que la Palabra de Dios que acabamos de proclamar. Y que con toda seguridad dejaron ellas, dejaron que penetrara esta Palabra en su corazón que también penetre en nuestros corazones la Palabra del Señor. Que vivamos como nos dice la Escritura de hoy en la humildad y que por muy pecadores que seamos la gracia del Señor está por encima de todo esto. Que el Señor nos ayude a vivir nuestra fe, en metiéndonos de verdad en lo que el Señor pide de cada uno de nosotros. Y que con coherencia sepamos responder, vamos a pedírselo así al Señor.
20:36
Padre Don: José Blanco:
℣. La Iglesia de Cristo
es Una, Santa, Católica y Apostólica
la Santidad es señal de la presencia
del Espíritu que actúa en nosotros
hasta el fin del mundo.
20:49
PETICIONES:
℣. Para que la iglesia animada
por el espíritu santo sea testigo
ante los hombres de la nueva creación
que ha sido inaugurada
por la Pascua de Cristo Jesús.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que la mujer manifieste
en los varios sectores
de la corresponsabilidad humana
y eclesial la riqueza de dones
y carismas que el Señor a depositado en ella.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Espíritu Santo
susciten su Iglesia corazones
generosos capaces de testimoniar
la primacía de la caridad
el mayor de todos los Carismas.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Señor conceda
a las familias Cristianas la gracia
de ser en la Iglesia y en el mundo
signo del amor de Dios que crea
redime y santifica.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los enfermos sus cuidadores
y familiares para que el Señor...
toda su paz y su gracia.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Espíritu Santo
librándonos de todo miedo y vacilación
nos ayude a seguir a Jesucristo
modelo de santidad en toda
situación de la vida.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
22:10
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios bendito sea Señor
porque nos has dado el ejemplo
y la compañía de los santos
tus siervos y amigos
por su preciosa intercesión
concédenos el gozo de recorrer
con la valentía de la fe el itinerario
que lleva desde la fuente bautismal
hasta la Jerusalén celestial
por Jesucristo Nuestro Señor
℟. Amen.
23:24
Padre Don: José Blanco:
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este pan, fruto de la tierra
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros pan de vida.
Bendito seas por siempre, Señor.
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este vino, fruto de la vid
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros bebida de salvación.
Bendito seas por siempre, Señor.
Padre Don: José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
01:02
Padre Don: José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
01:14
Padre Don: José Blanco:
Hermanos buenos días, sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la 7ª Semana del Tiempo Ordinario. Ya hemos terminado el Ciclo Pascual con la Fiesta de Pentecostés del pasado Domingo. La Cincuentena Pascual y ahora ya volvemos al Tiempo Ordinario. Pero aún dentro de este tiempo ordinario hoy vamos a hacer mención de dos Santas. Pues bastante conocidas de todos nosotros, una española que es «Santa Joaquina Vedruna» y la otra «Santa Rita de Casia» también que todos conocen. Pues vamos a hacer mención a hacer la fiesta de estas dos Santas conocidas nuestras. Las dos casadas, las dos madres, las dos viudas, las dos religiosas, Joaquina Vedruna y santa Rita.
02:17
Padre Don: José Blanco:
Un saludo como siempre muy cordial y cercano a todos aquellos hermanos nuestros, que a través de canal 13 televisión se unen a nosotros en la Celebración Eucarística. Y ahora como siempre en un momento de silencio pedimos perdón al Señor por nuestros pecados.
02:46
Padre Don: José Blanco:
℣. Tú que eres la plenitud
de la Verdad y de la Gracia
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que te has hecho pobre
para enriquecernos
℟. Cristo, Ten Piedad
℣. Tú que has venido para hacer
de nosotros Tu Pueblo Santo
℟. Señor, Ten Piedad
03:08
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna
℟. Amen.
03:16
Padre Don: José Blanco:
Oremos
Señor Tú que otorgaste
a Santa Joaquina Vedruna
y a Santa Rita la gracia
de imitar con fidelidad a Cristo
pobre y humilde, concédenos también
a nosotros por su intercesión
de estas santas la gracia de vivir
fielmente nuestra vocación
para que así tendamos a la Perfección
que tú nos has propuesto
en la persona de tu Hijo
Él que vive y reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los siglos
de los siglos
℟. Amen.
04:14
Lectora de la Primera Lectura:
Lectura de la carta del apóstol Santiago 4, 1-10 1ª lectura: Pedís y no recibís, porque pedís mal.
04:19
Lectora de la Primera Lectura: - Queridos hermanos:
¿De dónde proceden los conflictos y las luchas que se dan entre vosotros? ¿No es precisamente de esos deseos de placer que pugnan dentro de vosotros? Ambicionáis y no tenéis, asesináis y envidiáis y no podéis conseguir nada; lucháis y os hacéis la guerra y no obtenéis porque no pedís. Pedís y no recibís, porque pedís mal, con la intención de satisfacer vuestras pasiones.
¡Adúlteros! ¿No sabéis que la amistad con el mundo es enemistad con Dios? Por tanto, si alguno quiere ser amigo del mundo, se constituye en enemigo de Dios.
¿O es que pensáis que la Escritura dice en vano: «El espíritu que habita en nosotros inclina a la envidia»? Pero la gracia que concede es todavía mayor; por eso dice: «Dios resiste a los soberbios, mas da su gracia a los humildes».
Por tanto, sed humildes ante Dios, pero resistid al diablo y huirá de vosotros. Acercaos a Dios y él se acercará a vosotros. Lavaos las manos, pecadores; purificad el corazón, los inconstantes. Lamentad vuestra miseria, haced duelo y llorad; que vuestra risa se convierta en duelo y vuestra alegría en aflicción. Humillaos ante el Señor y él os ensalzará.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
05:59
Lectora de los Salmos:
Salmo: Sal 54, 7-8. 9-10a. 10b- 11. 23 Encomienda a Dios tus afanes, que él te sustentará.
05:41
Lectora de los Salmos:
℣. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará.
℟. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará.
℣. Y pienso: «¡Quién me diera alas
de paloma para volar y posarme!
Emigraría lejos, habitaría
en el desierto». ℟.
℣. «Esperaría en el que puede
salvarme del huracán y la tormenta».
¡Destrúyelos, Señor,
confunde sus lenguas! ℟.
℣. Pues veo en la ciudad violencia
y discordia: día y noche hacen
la ronda sobre sus murallas. ℟.
℣. Encomienda a Dios tus afanes,
que él te sustentará; no permitirá
jamás que el justo caiga. ℟.
06:58
Padre Don: José Blanco:
Aleluya Gál 6, 14 Aleluya, aleluya, aleluya
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Dios me libre de gloriarme
si no es en la cruz del Señor,
por lo cual el mundo
está crucificado para mí,
y yo para el mundo. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
07:41
Padre Don: José Blanco:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Marcos 9, 30-37 Evangelio: El Hijo del hombre va a ser entregado. Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos
07:42
Padre Don: José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Marcos
℟. Gloria a ti, Señor.
07:51
Padre Don: José Blanco:
En aquel tiempo, Jesús y sus discípulos atravesaron Galilea; no quería que nadie se enterase, porque iba instruyendo a sus discípulos.
Les decía:
«El Hijo del hombre va a ser entregado en manos de los hombres y lo matarán; y, después de muerto, a los tres días resucitará». Pero no entendían lo que decía, y les daba miedo preguntarle. Llegaron a Cafarnaún, y, una vez en casa, les preguntó:
«¿De qué discutíais por el camino?».
Ellos callaban, pues por el camino habían discutido quién era el más importante. Jesús se sentó, llamó a los Doce y les dijo:
«Quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos». Y tomando un niño, lo puso en medio de ellos, lo abrazó y les dijo:
«El que acoge a un niño como este en mi nombre me acoge a mí; y el que me acoge a mí, no me acoge a mí, sino al que me ha enviado».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús
HOMILIA
09:09
Padre Don: José Blanco:
Sentáos un momento, la verdad es que al leer la Primera Lectura de hoy, de la Carta del Apóstol Santiago. Pues parece que nos está poniendo verdes, a los Cristianos, a los que él escribe, pero por extensión a todos los Cristianos. ¿Porqué?, pues porque por una parte nos dice que no caigamos en la soberbia de crearnos los mejores. Y aquellos a los que todo el mundo tiene que admirar. Y por otra parte, nos está invitando a la humildad. Pero en el fondo con estas palabras tan directas y tan duras para los Cristianos a los que él escribe. Pues como de alguna manera nos hunde en la miseria.
10:01
Padre Don: José Blanco:
Porque nos está llamando, bueno nos está diciendo que, estamos constantemente con conflictos y con luchas que se dan entre vosotros. Ambicionáis y no tenéis, asesinais y envidiais y no podéis conseguir nada. Lucháis y os hacéis la guerra, es decir es que nos pone verdes. No nos está diciendo una serie de cosas que realmente no son como para celebrarlo. Sin embargo, hay algo aquí fundamental, después de decirnos lo los malos que somos. Nos dice, la gracia que concede Dios es todavía mayor, es decir, nosotros somos pecadores, qué duda cabe. Pero la gracia que nos concede el Señor es todavía mayor, por eso dice Dios resiste a los soberbios, más da su gracia a los humildes.
11:07
Padre Don: José Blanco:
Yo creo que es el dentro de todos, digamos ambiente de ponernos todo lo malo, lo malos que somos. Todos los defectos que tenemos esta frase quizá es la más importante. Que aunque seamos soberbios, aunque seamos pecadores el Señor da su gracia a los humildes. Por tanto saca él como consecuencia, ser humildes ante Dios y resistir al diablo que él además huirá de vosotros. Acercaos a Dios y Él se acercará a vosotros. Todavía insiste lavaos las manos pecadores, purificad el corazón, lamentad vuestra miseria. Haced duelo y llorad, humillaos, termina, humillaos ante el Señor y Él os ensalzará.
12:10
Padre Don: José Blanco:
Es quizá, como digo, dentro del reconocimiento de nuestros defectos y que con dureza el Apóstol Santiago nos echa en cara. Dentro de todo eso, el mensaje sigue siendo todavía esperanzador. Humillaos ante el Señor y Él os ensalzará. No nos suena estas últimas palabras, no nos suenan tan bien al Evangelio de hoy. Donde por una parte Jesús, en el camino ha ido instruyendo a los discípulos y anunciándole Su Pasión y Su Muerte. Pero nos dice San Marcos, pero ellos no lo entendían. Pero no entendían lo que decía y les daba miedo preguntarle. Quizá porque Jesús tenía un carácter fuerte. El hecho es que les daba miedo preguntarle.
13:16
Padre Don: José Blanco:
Pero de lo que sí estaban seguros los Discípulos, es de que Jesús quería después de su Muerte y Resurrección quería dejar una Institución. Es decir, la Iglesia y que ellos fueran los Discípulos, los Apóstoles los que dieran comienzo a la iglesia. Lo hemos celebrado anteayer en Pentecostés. Pero claro, también como humanos, pues si Jesús quiere dejar esta Institución, quiere dejar esta Comunidad. ¿Cómo se va a organizar esta Comunidad?, ¿quién va a ser el principal en esta Comunidad? es muy humano. ¿Seré yo el que mande?, ¿seré yo el principal?, ¿seré yo el director? digámoslo así.
14:09
Padre Don: José Blanco:
Y Jesús lo que les dice es, lo que hemos oído os decía en la última expresión de Santiago. Donde decía: «humillaos ante el Señor y Él os ensalzará». Y aquí Jesús dice: «quien quiera ser el primero, que sea el último de todos y el servidor de todos». Es que los criterios humanos aquí, no nos sirven, aquí nos sirven los criterios que nos da el propio Jesús. Que es ser servidor de todos, ser el último de todos, el que se ensalza será humillado, el que se humilla será enaltecido. Por lo tanto no sigáis los criterios del mundo. Lo ha dicho en la Lectura de Santiago, «el que es amigo del mundo, es enemigo de Dios».
15:01
Padre Don: José Blanco:
Porque los criterios del mundo normalmente, pues no van o no se compaginan suficientemente con los valores del Señor con los valores del Evangelio. Y qué es lo que hace Jesús para que lo entiendan, para qué se den cuenta de lo que quiere decir. Escoge un niño y lo pone en el centro, todos sabemos, que un niño lo que tenemos que hacer los adultos, es servirle, es sustentable, es educarle, es vestirle. Es decir el niño lo que requiere, son los servicios del adulto por completo. Porque él no tiene digamos fuerzas, no tiene fundamento todavía, para nada más. Y yo creo que entonces los Discípulos sí que lo debieron entender. Es decir, nosotros al niño tenemos que darle todo, servirle, ser su servidor.
16:04
Padre Don: José Blanco:
En el fondo somos sus servidores, los que sois padres o madres lo sabéis deme de memoria todo esto claro. Porque lo habéis experimentado, el niño merece todo nuestro servicio. Y los Discípulos al ver lo que está diciendo Jesús, pues se darían cuenta, es verdad. El servicio es lo principal y nosotros ahora como miembros o dirigentes de una Comunidad que esperamos formar. Que todavía no estaba hecha la Iglesia, tenemos que ser los servidores y ese es el criterio de Dios no el criterio de los hombres. El criterio de Dios es servir, a los hermanos. Pues como veis, la Palabra de Dios que hoy hemos proclamado, debió, no sé de qué manera, pero debió impregnar los corazones de las dos Santas que hoy celebramos.
17:09
Padre Don: José Blanco:
«Santa Rita» del siglo finales del XIV principios del XV. Como os decía antes madre, el marido parece que la maltrataba, tuvo dos hijos. Al marido le asesinaron también en una revuelta, debío ser pues eso, un nombre agresivo. Entonces ella una vez viuda, entra en la «Orden de las Agustinas» y ahí dedica toda su vida hasta la muerte. Y murió, para la edad en la que estamos hablando del siglo XIV, XV pues murió mayor. Porque murió a los 76 años y en aquellos tiempos era una edad grande. Y bueno como sabéis se les representa por «una espina y por una rosa». Cuándo sé Canonizó, pues el Papa Juan Pablo II en una Celebración de Santa Rita que dijo que: «la espina se convirtió en rosa». Es decir, «el dolor el sufrimiento se convirtió en Olor de Santidad».
18:35
Padre Don: José Blanco:
Le sirvió para ser Santa y «Joaquina Vedruna», era barcelonesa. Pues también tuvo nueve hijos, sufrió eran los momentos en el siglo XIX los momentos de las Guerras Carlistas. Tuvo que huir a Francia, tuvo porque era de una familia la acomodada. Y bueno, pues sintió la llamada para Fundar a las «Hermanas Carmelitas de la Caridad». Que es lo que hizo, fundarlo, por supuesto decía antes que había tenido nuevos hijos. Luego quedó viuda y efectivamente luego se hizo religiosa y fundó esta Congregación de las «Hermanas Carmelitas de la Caridad».
19:25
Padre Don: José Blanco:
Dedicadas fundamentalmente, pues a los enfermos y a la educación de la mujer, a la adecuación de la juventud femenina. Bueno a estas dos Santas Celebramos hoy y que la Palabra de Dios que acabamos de proclamar. Y que con toda seguridad dejaron ellas, dejaron que penetrara esta Palabra en su corazón que también penetre en nuestros corazones la Palabra del Señor. Que vivamos como nos dice la Escritura de hoy en la humildad y que por muy pecadores que seamos la gracia del Señor está por encima de todo esto. Que el Señor nos ayude a vivir nuestra fe, en metiéndonos de verdad en lo que el Señor pide de cada uno de nosotros. Y que con coherencia sepamos responder, vamos a pedírselo así al Señor.
20:36
Padre Don: José Blanco:
℣. La Iglesia de Cristo
es Una, Santa, Católica y Apostólica
la Santidad es señal de la presencia
del Espíritu que actúa en nosotros
hasta el fin del mundo.
20:49
PETICIONES:
℣. Para que la iglesia animada
por el espíritu santo sea testigo
ante los hombres de la nueva creación
que ha sido inaugurada
por la Pascua de Cristo Jesús.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que la mujer manifieste
en los varios sectores
de la corresponsabilidad humana
y eclesial la riqueza de dones
y carismas que el Señor a depositado en ella.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Espíritu Santo
susciten su Iglesia corazones
generosos capaces de testimoniar
la primacía de la caridad
el mayor de todos los Carismas.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Señor conceda
a las familias Cristianas la gracia
de ser en la Iglesia y en el mundo
signo del amor de Dios que crea
redime y santifica.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los enfermos sus cuidadores
y familiares para que el Señor...
toda su paz y su gracia.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que el Espíritu Santo
librándonos de todo miedo y vacilación
nos ayude a seguir a Jesucristo
modelo de santidad en toda
situación de la vida.
℣. Oremos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
22:10
Padre Don: José Blanco:
℣. Dios bendito sea Señor
porque nos has dado el ejemplo
y la compañía de los santos
tus siervos y amigos
por su preciosa intercesión
concédenos el gozo de recorrer
con la valentía de la fe el itinerario
que lleva desde la fuente bautismal
hasta la Jerusalén celestial
por Jesucristo Nuestro Señor
℟. Amen.
23:24
Padre Don: José Blanco:
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este pan, fruto de la tierra
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros pan de vida.
Bendito seas por siempre, Señor.
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este vino, fruto de la vid
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros bebida de salvación.
Bendito seas por siempre, Señor.
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