martes, 17 de abril de 2018

17.04.2018 - Santa Misa en 13tv - José Blanco






Palabra de Vida 17/4/18:
«Es mi Padre el que da el verdadero pan del cielo»
Por P. Jesús Higueras




Camino Católico

Publicado el 17 de abril de 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Espacio "Palabra de Vida" de 13 TV del 17 de abril de 2018, martes de la 3ª semana de Pascua, presentado por el padre Jesús Higueras, en el cual se comenta el evangelio del día.

Evangelio: San Juan 6, 30-35:

En aquel tiempo, en gentío dijo a Jesús:

«¿Y qué signo haces tú, para que veamos y creamos en ti? ¿Cuál es tu obra? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: “Pan del cielo les dio a comer”».

Jesús les replicó:

«En verdad, en verdad os digo: no fue Moisés quien os dio pan del cielo, sino que es mi Padre el que os da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da vida al mundo».

Entonces le dijeron:

«Señor, danos siempre de este pan».

Jesús les contestó:

«Yo soy el pan de la vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed».


Padre Don: Jesús Higueras Esteban


00:22
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Mi padre es el que da el verdadero Pan del cielo». Estos días en las Misas de entre semana vamos a escuchar el discurso de Jesucristo en la Sinagoga de Cafarnaúm. San Juán no cuenta la Institución de la Eucaristía, como lo cuenta San Mateo, San Marcos, San Lucas, no. Él ya sabía que las Comunidades Cristianas conocían perfectamente el Relato de la Institución pero sin embargo San Juan relata detalladamente una Homilía preciosa que Jesucristo hizo en Cafarnaúm, al lado de la Casa de Simón Pedro en la Sinagoga, que había.

00:56
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Acerca del Pan de la Vida, acerca del Pan de la Vida dando claridad, dando profunda, esa.. Es más este discurso fue tan polémico, claro: «Mi Carne es verdadera Comida, mi Sangre es verdadera Bebida». Que claro muchos, muchos Judíos se escandalizaron, pero bueno este hombre es una antropófago, quiere que comamos y se marcharon. Marca un antes y un después, porque claro Jesucristo dice: «bueno es que yo os quiero tanto, que me voy a convertir en alimento y mi Sangre se va a convertir en vuestra Bebida, Yo voy a ser vuestro Sustento».

01:28
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y por tanto empieza a hablar de Moisés que si efectivamente dio al Pueblo de Israel el maná. Pero dice: «Mi Padre es el que da el verdadero Pan del cielo», no fue Moisés. Sí, Moisés dio una cosa para para salir del apuro, para salir del desierto. Pero el maná lo que hacía era sostener físicamente a las personas y ya está. La Eucaristía es un alimento mucho más profundo, la Eucarístia es como el Gran Tesoro de la Iglesia, es el Tesoro porque la Eucaristía está Cristo. Con su Cuerpo, con su Sangre, con su Alma, con su Divinidad.

01:28
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y claro, decía San Juan Pablo II que un Cristiano nunca puede dejar de perder el Asombro Eucarístico. ¿Cómo es posible que tomemos el pan del cielo?, ¿cómo es posible que al recibir la Santa Comunión que Dios mismo el Autor del universo entre en mí o yo entré en Él? Esto no nos podemos acostumbrar, qué pena que yo por lo menos cuando a veces en algunas Iglesias en mi Parroquía también. Pues doy la Comunión el Cuerpo de Cristo y la gente da la impresión como que Comulga como si recibiera con perdón una pastilla de café con leche.

02:31
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - En sentido de pues muy bien, luego el Señor.. con qué fervor, con qué cariño, con que amor, tendríamos que valorar la Santísima Eucaristía. Primero la Santa Misa, pero después también el Don de la Sagrada Comunión, es el Padre el que nos da el verdadero Pan del cielo. Por tanto estos días escucharemos las Palabras que Jesús dice sobre la Eucaristía, Palabras bellísimas. Vamos a pedirle a Dios: «Dios Mío concédeme el Asombro Eucarístico, que nunca me deje de asombrar cuanto Amor, me tienes que Te has encerrado, en un poco de pan por mí».


Santa Misa del martes de la 3ª Semana de Pascua, 17 de abril de 2018




Camino Católico

Publicado el 17 de abril de 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Celebración de la Santa Misa del martes de la 3ª semana de Pascua, presidida por el P. José Blanco, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.

Inicio de la Santa Misa y Dedicación


00:38
Padre Don José Blanco:

℣.  En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo

℟.  Amen.

00:45
Padre Don José Blanco:

℣.  La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.

00:55
Padre Don José Blanco:

Hermanos buenos días, sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la 3ª Semana de Pascua. Seguimos Celebrando con gozo y alegría que el Señor ha Resucitado, que el Señor Vive. Y que él está presente en medio de la comunidad de sus Seguidores, de los Creyentes Cristianos. Vamos a Celebrar en éste todavía clima como digo de alegría y de gozo esta Celebración. Y al comenzar lo hacemos como siempre purificando en nuestros corazones pidiendo perdón al Señor por nuestros pecados.

01:50
Padre Don José Blanco:

℣.  Porque has destruido el pecado
y la muerte con tu resurrección
℟.  Señor, Ten Piedad

℣.  Señor, Ten Piedad

℣.  Tú que has renovado la creación
entera con tu resurrección.
℟.  Cristo, Ten Piedad

℣.  Cristo, Ten Piedad

℣.  Tú que das la alegría a los vivos
y la vida a los muertos
con tu resurrección
℟.  Señor, Ten Piedad

℣.  Señor, Ten Piedad

02:16
Padre Don José Blanco:

℣.  Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna

℟.  Amen.

02:23
Padre Don José Blanco:

Oremos.
Señor que abres las puertas
de tu reino a los que han renacido
del agua y del espíritu acrecienta

la gracia que has dado a tus hijos
para que purificados ya
de sus pecados alcancen

todas tus promesas
Por Nuestro Señor Jesucristo
Tu Hijo, que Vive y Reina Contigo

en la Unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los Siglos de los Siglos

℟.  Amen.

03:00
Lectora de la Primera Lectura:


Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 7, 51-8, 1a 1ª lectura: Señor Jesús, recibe mi espíritu.

03:04
Lectora de la Primera Lectura: - En aquellos días, dijo Esteban al pueblo y a los ancianos y escribas:

«¡Duros de cerviz, incircuncisos de corazón y de oídos! vosotros siempre resistís al Espíritu Santo, lo mismo que vuestros padres. ¿Hubo un profeta que vuestros padres no persiguieran? Ellos mataron a los que anunciaban la venida del Justo, y ahora vosotros lo habéis traicionado y asesinado; recibisteis la Ley por mediación de ángeles, y no la habéis observado». Oyendo sus palabras se recomían en sus corazones y rechinaban los dientes de rabia. Esteban, lleno de Espíritu Santo, fijando la mirada en el cielo, vio la gloria de Dios, y a Jesús de pie a la derecha de Dios, y dijo:


04:02
Lectora de la Primera Lectura: - «Veo los cielo abiertos y al Hijo del hombre de pie a la derecha de Dios».

Dando un grito estentóreo, se taparon los oídos; y, como un solo hombre, se abalanzaron sobre él, lo empujaron fuera de la ciudad y se pusieron a apedrearlo. Los testigos, dejaron sus capas a los pies de un joven llamado Saulo y se pusieron a apedrear a Esteban, que repetía esta invocación:

«Señor Jesús, recibe mi espíritu»

Luego, cayendo de rodillas, y clamando con voz potente, dijo:

«Señor, no les tengas en cuenta este pecado.» Y, con estas palabras, murió. Saulo aprobaba su ejecución.


℣.  Palabra de Dios
℟.  Te Alabamos Señor.

04:50
Lectora de los Salmos:


Salmo: Sal 30. 3cd-4. 6ab y 7b y 8a. 17 y 21 ab A tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu.

04:46
Lectora de la Primera Lectura:

℣.  A tus manos, Señor,
encomiendo mi espíritu.

℟.  A tus manos, Señor,
encomiendo mi espíritu.

℣.  Sé la roca de mi refugio,
un baluarte donde me salve,
tú que eres mi roca y mi baluarte;
por tu nombre dirígeme y guíame.  ℟.

℣.  A tus manos encomiendo mi espíritu:
tú, el Dios leal, me librarás;
yo confío en el Señor. Tu misericordia
sea mi gozo y mi alegría.  ℟.

℣.  Haz brillar tu rostro
sobre tu siervo,
sálvame por tu misericordia.
En el asilo de tu presencia
los escondes de las conjuras humanas.  ℟.

05:39
Padre Don José Blanco:


Aleluya Jn 6, 35ab Aleluya, aleluya, aleluya

℟.  Aleluya, aleluya, aleluya.

℣.  Yo soy el pan de vida
- dice el Señor -; el que viene a mí
no tendrá hambre.  ℟.

℟.  Aleluya, aleluya, aleluya.

06:21
Padre Don José Blanco:


  Lectura del santo Evangelio según san Juan 6, 30-35 Evangelio: No fue Moisés, sino que es mi Padre el que da el verdadero pan del cielo.

06:24
Padre Don José Blanco:

℣.  El Señor esté con vosotros
℟.  y con tu espíritu

℣.  Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Juan
℟.  Gloria a ti, Señor

06:31
Padre Don José Blanco:

En aquel tiempo, el gentío dijo a Jesús:

«¿Y qué signo haces tú, para que veamos y creamos en ti? ¿Cuál es tu obra? Nuestros padres comieron el maná en el desierto, como está escrito: “Pan del cielo les dio a comer”». Jesús les replicó:

«En verdad, en verdad os digo: no fue Moisés quien os dio pan del cielo, sino que es mi Padre el que os da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios es el que baja del cielo y da vida al mundo». Entonces le dijeron:

«Señor, danos siempre de este pan». Jesús les contestó:

«Yo soy el pan de vida. El que viene a mí no tendrá hambre, y el que cree en mí nunca tendrá sed».


℣.  Palabra del Señor
℟.  Gloria a Ti Señor, Jesús


HOMILIA

07:30
Padre Don José Blanco:

Sentaos un momento, estamos viendo todo este Tiempo de Pascua cómo leyendo el Libro de los Hechos de los Apóstoles como los Primeros Cristianos, van dando Testimonio del Señor Jesús. Van Predicando y como lo dice más de una vez, el Libro de los Hechos cientos o miles de personas se van adhiriendo a la Fe Cristiana y van pidiendo el Bautismo en nombre del Señor Jesús. Y lo estamos viendo todos estos días, sin embargo el propio San Lucas en el Libro de los Hechos de los Apóstoles, desde también muy desde el principio. Estamos hablando hoy del Capítulo 7 de los Hechos ya desde el principio empieza a hacernos ver que no todo el mundo va a aceptar la Fe en Jesús.

08:35
Padre Don José Blanco:

Que no todo el mundo, se va o va a pedir el Bautismo en el nombre de Jesús, sino que hay muchos pues eso que van perseguir, que van a buscar la pelea con los que Predican. Y van a llegar a la Persecución e incluso hasta la Muerte y el Martirio. Y es lo que hoy desde ayer ya estamos leyendo en el Libro de los Hechos con Esteban, con San Esteban el Primer Mártir del Cristianismo. ¿Por qué?, pues porque a muchos les sienta mal, ellos que conocían perfectamente la Ley de Moisés y conocían su propia Fe, su propia Religión, les sentaba mal oír de esta gente. Lo oíamos en los Discursos de Pedro y ayer en Esteban como les dice: «vosotros sois los que habéis matado al Justo, al Gran Profeta, al Mesías, al que Dios había enviado, vosotros lo habéis matado».

09:45
Padre Don José Blanco:

Anteayer en el Discurso Pedro decía: «por vuestra ignorancia, porque vosotros no es que hayáis tenido mala fe o malas intenciones, sino que por ignorancia habéis consentido esto». Y hoy vemos a Esteban que está declarando delante del Sanedrín y lo que les dices eso: «es que vosotros en el Antiguo Testamento, habéis ido matando a los Profetas, cuando no han dicho las palabras que vosotros queríais oír». Y entonces habéis matado a los Profetas y ahora mataron a los que anunciaban la venida del Justo y vosotros lo habéis traicionado y asesinado.

10:34
Padre Don José Blanco:

Es decir las acusaciones que hacen, lógicamente despiertan el odio y despiertan el afán de venganza en estos que están oyendo estas Palabras porque ellos se creen los justos y ellos se creen los verdaderos cumplidores de la Ley de Moisés. Oyendo sus Palabras se recomian en sus corazones y rechinaban los dientes de rabia. Porque les estaba contando las verdades del barquero. Les estaba diciendo eso, pero vosotros que os creáis los Justos, los que verdaderamente obedecéis la Ley de Moisés. No miráis hacia vuestra o hacia nuestra porque Él es Judío también propia historia. Si es que a los Profetas los habéis ido matando, unos a otros es que no habéis hecho caso de lo que se han dicho. No habéis sabido interpretar las Palabras de los Profetas hablando del siervo de Yahvé que sería pues es un masacrado y Sacrificado en la Cruz.

11:47
Padre Don José Blanco:

Bueno pues a Ése, es al que yo vengo a Predicar y por eso lleno del Espíritu Santo nos dice la Palabra de Dios. Fijando la mirada en el cielo: «vio la gloria de Dios y a Jesús de pie a la Derecha del Padre. Veo los cielos abiertos y al Hijo del Hombre de pie a la derecha de Dios». Y eso es lo que ya no pueden de ninguna manera consentir los Miembros del Sanedrín. Dando un grito estentóreo se taparon los oídos y como un solo hombre se abalanzaron sobre él lo empujaron fuera de la ciudad y se pusieron a pedrearlo. No podían escuchar esas acusaciones, porque eso en el fondo tendría que remover los corazones.

12:38
Padre Don José Blanco:

Sin embargo ellos en su soberbia, en su autosuficiencia estaban convencidos de que lo habían hecho bien. Y ahí tenemos ya como digo el primer Mártir de nuestra historia Cristiana. Hemos visto a Pedro Predicando, hemos visto al resto de los Apóstoles también dando Testimonio del Señor. Y hemos visto cómo mucha gente se adhería a la Fe Bautizándose en el nombre del Señor Jesús. Pero también vemos hoy, a otra mucha gente que de ninguna manera puede aceptar la Palabra del Señor y se revuelve contra Él Sacrificando a aquellos que lo predican. Y San Lucas en este pasaje nos presenta ya curiosamente al que va a ser luego el Gran Apóstol de la Fe a San Pablo.

13:37
Padre Don José Blanco:

Pero nos lo presenta como adhiriéndose al Martirio de Esteban, es decir, digamos qué justificando perfectamente lo que estaban haciendo con Esteban. Saulo, bueno primero nos dicen: «que dejaron sus capas a los pies de un Joven, llamado Saulo y se pusieron a apedrear a Esteban que repetía: «Jesús recibe mi espíritu». Y termina diciendo: «Saulo aprobaba su ejecución». Nos va a presentar Saulo como diciendo bueno pues uno de esos perseguidores de la Fe, luego va a ser el Gran Predicador y el Gran Defensor de la Fe. Pero termina el pasaje de hoy diciéndonos; «como Esteban al estilo de Jesús muere perdonando a los que le están asesinando, a los que le están Sacrificando.

14:44
Padre Don José Blanco:

Así es Esteban muere perdonando, como tantos otros Mártires a lo largo de nuestra historia. Que han sabido también derramar su sangre, perdonando a aquellos que les Sacrificaban. Y en el Evangelio estamos empezando a leer en el «Capítulo VI de San Juan», lo que llamaríamos «Los Evangelios del Pan». Donde Jesús se autocalifica a sí mismo como el Pan de la Vida. Él en unos momentos antes, unos Capítulos anteriores, había multiplicado los Panes y entonces claro como la gente va hacia Él. Pues les echa en cara que solamente han venido porque han visto esa multiplicación de panes, porque han saciado el hambre física con esos panes.

15:50
Padre Don José Blanco:

Pero Él quiere hablar de otra cosa mucho más importante, que es la Fe en Él y Él cómo digo, se autodefine como Pan de Vida. Me preguntan bueno aparte de esto que hemos visto que has multiplicado los Panes, ¿qué otras cosas, qué otros signos haces? para que creamos en Ti. ¿Cuál es tu Obra?, porque también nos dio pan Moisés en el desierto. Y entonces Él les dice: «lo primero no fue Moisés, fue nuestro Padre del Cielo. Porque del Padre del Cielo viene todo Bien, del Padre del Cielo viene todo Beneficio para el hombre. Él nos dio el Pan del Cielo, no Moisés porque el Pan de Dios es el que baja del Cielo y da Vida al mundo».

16:50
Padre Don José Blanco:

Ahí se descubre otra dimensión, ya no es el Pan que alimenta al cuerpo, que sacia la necesidad física, da vida al mundo. Es otro Pan y los que le están escuchando al descubrir digamos esa otra dimensión, «Pan que da Vida al mundo». Les dicen pues danos de ese Pan y ahí está la gran definición: «Yo soy el Pan de Vida el que viene a Mí no tendrá hambre y el que cree en Mí no tendrá sed», está invitándoles a creer en Él. El que cree en mí no tendrá sed. Ese es el Jesús también en el que nosotros creemos o al que nosotros queremos, ese es el Jesús del que dan Testimonio aquellos Primitivos Cristianos empezando por Pedro.

17:57
Padre Don José Blanco:

Dan testimonio de Él, hasta incluso como hemos visto en la Lectura de hoy, derramar su sangre por dar Testimonio del Amor de Dios manifestado en Cristo. Ese es nuestro Dios y ese es nuestro Cristo. Y también la invitación sigue estando presente hoy en nuestros días para todos y cada uno de nosotros. Dad Testimonio del Pan de Vida, Dad Testimonio del Amor de Dios, Dad Testimonio del Amor de Cristo. Esa es la invitación que hoy también se nos hace al escuchar esta Palabra de Dios de hoy. Nosotros decimos: «Creemos en Ti y Creyendo en Ti no tendremos sed jamás».

18:49
Padre Don José Blanco:

Pero porque creemos en Ti tenemos que dar testimonio hasta el extremo de tu amor en el mundo y en la sociedad en que vivimos. Una sociedad que necesita ese Mensaje de Amor, quizá hoy más que nunca o si no más que nunca lo necesita y con mucha intensidad. Vamos por tanto a pedirle al Señor, que nosotros también tengamos el coraje y la valentía de dar testimonio del amor de Dios en nuestro mundo vamos a pedírselo hacia el Señor.

19:29
Padre Don José Blanco:

℣.  Roguemos a Dios
con la confianza que nos da a formar
parte de la comunidad que su hijo
constituyó mediante su muerte
y resurrección

19:42
PETICIONES de los FIELES:

℣.  Para que la Iglesia de Cristo
tenga hoy la misma valentía
que los Apóstoles en anunciar
el evangelio a pesar
de las contrariedades del mundo.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Para que las relaciones
por los Cristianos entre todos
los hombres se desarrollen
en un clima de amor y de comprensión.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Para que la presencia
de Cristo resucitado ayude
y consuele a cuantos sufren
las enfermedades del dolor,
el abandono y la soledad.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Para que los aquí presentes
sepamos obedecer a Dios
antes que a los hombres
demos Fiel Testimonio
de la Resurrección de Cristo
por nuestras Obras y Palabras.


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