viernes, 7 de agosto de 2020

07.08.2020 - Santa Misa en 13tv - Presidida por el P. Félix Castedo






07.08.2020 - Santa Misa en 13tv - Presidida por el P. Félix Castedo




Camino Católico

07 de agosto de 2020. (Camino Católico). Celebración de la Santa Misa de hoy, viernes de la 18ª semana de Tiempo Ordinario, presidida por el P. Félix Castedo, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.







Inicio de la Santa Misa



00:08
MÚSICA de la BASÍLICA:

JUNTOS CANTANDO LA ALEGRÍA
Autor: de la Canción


Juntos cantando la alegría,
de vernos unidos en la fe y el amor,
juntos sintiendo en nuestras vidas
la alegre presencia del Señor.

Somos la Iglesia peregrina que El fundó,
somos un pueblo que camina sin cesar.
Entre cansancios y esperanzas hacia Dios
nuestro amigo Jesús nos llevará.

Hay una fe que nos alumbra con su luz,
una esperanza
que empapó nuestro esperar.
Aunque LA noche
nos envuelva en su inquietud,
nuestro amigo Jesús nos guiará.

Es el Señor, nos acompaña al caminar
con su ternura a nuestro lado siempre va
Si los peligros nos acechan por doquier,
nuestro amigo Jesús nos salvará.

00:36
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  En el Nombre del  Padre y del  Hijo y del  Espíritu Santo.

℟.  Amen.

℣.  La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión del
Espíritu Santo estén
con todos vosotros.

℟.  Y con tu espíritu.

00:53
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Celebramos hoy la Fiesta de los Santos Justo y Pastor, nacidos en Alcalá de Henares. Sufrieron el Martirio cuando tenían siete y nueve años respectivamente. En un arrabal de la ciudad de Alcalá, llamado Campo Laudable fueron asesinados. Los cuerpos se conservan hoy en la Iglesia Magistral en la Catedral de Alcalá. Comenzamos la Celebración reconociendo humildemente ante el Señor, que somos pecadores, que necesitamos continuamente la Conversión.

01:39
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Tú que ha sido enviado a sanar
los corazones afligidos.

℣.  Señor, Ten Piedad.
℟.  Señor, Ten Piedad.

℣.  Tú que has venido
a llamar a los pecadores.

℣.  Cristo, Ten Piedad.
℟.  Cristo, Ten Piedad.

℣.  Tú que estás sentado
a la derecha del Padre
para interceder por nosotros.

℣.  Señor, Ten Piedad.
℟.  Señor, Ten Piedad.

01:59
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna

℟.  Amen.

02:08
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Oremos.
Señor Dios Nuestro
que colmaste de fortaleza
y valor a los niños

Justo y Pastor hasta derramar
su sangre por Cristo
concédenos por su Intercesión
dar testimonio de la Fe

que profesamos.
Por Nuestro Señor Jesucristo, Tu Hijo
que contigo vive y reina en la Unidad
del Espíritu Santo y es Dios
por los siglos de los siglos.

℟.  Amen.



LITURGÍA DE LA PALABRA



02:22
Primera Lectura:


Lectura de la Profecía de Nahúm 2,1,3; 3,1-3, 6-7 1ª lectura: Ay de la ciudad sanguinaria.


02:49
Primera Lectura

He aquí sobre los montes los pies del mensajero que proclama la paz.

Celebra tus fiestas, Judá, cumple tus votos, que no pasará más por ti el perverso; se acabó la destrucción.

Pues restaura el Señor la dignidad de Jacob y de Israel: los desoladores los habían asolado, habían destrozado sus sarmientos.

¡Ay de tí ciudad sanguinaria, toda ella mentira, llena de rapiña, insaciable de botín!

Ruido de látigo, estrépito de ruedas, galope de caballos, brincos de carros, asalto de caballería, brillo de espadas, fulgor de lanzas, heridos sin cuento, montones de muertos, cadáveres sin fin, tropiezan en cadáveres.

Echaré sobre ti, inmundicias, te deshonraré públicamente.

Todo el que te vea huirá de ti, diciendo:

«¡Nínive está devastada! ¿Quién se compadecerá? ¿Dónde encontraré quien te consuele?».

℣.  Palabra de Dios.
℟.  Te Alabamos Señor.

03:54
Lectura de los Salmos:


Salmo: Sal 118, 14.24.72.103.111. 131 Yo doy la muerte y la vida.

03:54
Lectura de los Salmos:

℣.  Yo doy la muerte y la vida.
℟.  Yo doy la muerte y la vida.

℣.  El día de su ruina se acerca,
y se precipita su destino.
El Señor hará justicia a su pueblo
y tendrá piedad de sus siervos.  ℟.

℣.  Pero ahora mirad: soy yo, solo yo,
y no hay Dios fuera de mí.
Yo doy la muerte y la vida,
yo hiero y yo curo.  ℟.

℣.  Cuando afile el rayo de mi espada,
y empuñe en mi mano el juicio,
tomaré venganza de mis enemigos
y daré su paga
a los que me aborrecen.  ℟.

04:37
Aclamación del Evangelio:


Aleluya Mt 5, 10 Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.

℟.  Aleluya, aleluya, aleluya.

℣.  Bienaventurados los perseguidos
por causa de la justicia,
porque de ellos
es el reino de los cielos.  ℟.

℟.  Aleluya, aleluya, aleluya.

04:51
Lectura del Santo Evangelio:


  Lectura del Santo Evangelio según San Mateo 16, 24-28 Evangelio: ¿Qué podrá dar un hombre para recobrar su alma?

04:51
Lectura del Santo Evangelio:

℣.  El Señor esté con Vosotros.
℟.  Y con tu espíritu.

℣.  Lectura del Santo Evangelio según San Mateo.
℟.  Gloria a ti, Señor.

05:02
Lectura del Santo Evangelio:

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos:

«Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz y me siga.

Porque quien quiera salvar su vida, la perderá; pero el que la pierda por mí, la encontrará.

¿Pues de qué le servirá a un hombre ganar el mundo entero, si pierde su alma? ¿O qué podrá dar para recobrarla?

Porque el Hijo del hombre vendrá, con la gloria de su Padre, entre sus ángeles, y entonces pagará a cada uno según su conducta.

En verdad os digo que algunos de los aquí presentes no gustarán la muerte hasta que vean al Hijo del Hombre en su reino».

℣.  Palabra del Señor
℟.  Gloria a Ti Señor, Jesús.

06:05
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Hemos leído durante días pasados, como Primera Lectura al Profeta Jeremías. Hoy hemos leído una página del Profeta Nahún, uno de los Textos más breves de toda la Sagrada Escritura. Apenas llega a tres páginas, de la Sagrada Biblia, el Texto de Nahún. Y hay aquí como en tantas ocasiones, a lo largo de sobre todo, del Antiguo Testamento, digamos un Juicio de Dios sobre la Historia. De alguna manera, lo que resalta el Autor, es cómo los seres humanos nos buscamos, con nuestra conducta, tantas ruinas y tantas desgracias. Que al mismo tiempo por otro lado, sirven de escarmientos, sino a un nuevo mismo, a los demás.

06:56
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Y así ocurre también con las naciones, o con los reinos, en este caso la palabra de Nahún, da consuelo al Pueblo de Israel. Que habiendo sido agobiado, por la ciudad de Nínive famosa. Ahora va a contemplar como esa ciudad, que en algunos momentos les hizo sufrir. Ahora va a ser ella la destruida. Digamos que de alguna manera, la Historia del Mundo, está continuamente yendo de un lado a otro. Y no hay nada estable, todo cambia, todo fluye, hay momentos de luminosidad, hay momentos malos. Hay situaciones, en las que los seres humanos, se dedican a hacer fundamentalmente el mal. Después algunos escarmientan, quizá surgen personas que ayuden a cambiar.

08:01
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Uno de ellos, una de estas personas, por supuesto aparte de Nuestro Señor Jesucristo. Uno de los Santos de la Iglesia cuya Fiesta Celebrábamos, hace más o menos una semana. San Ignacio de Loyola, recibió el impacto de las Palabras de Jesús que nosotros acabamos de escuchar, hoy una vez más. Para él, estas Palabras fueron determinantes, precisamente para ese cambio en su vida. Un cambio que no solamente le afectó a él, sino que por medio de él, también el Señor a lo largo de la Historia de la Iglesia. Hasta nuestros días, ha hecho cambiar a muchas personas, me refiero a San Ignacio de Loyola. Que al escuchar estas Palabras de Jesús: «de qué le sirve al hombre, ganar el mundo entero, si al final pierde su alma».

08:59
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

¿De qué sirve todo lo de aquí?, si ante la eternidad, lo que ocurre es la pavorosa situación de encontrarse lejos de Dios. Lejos por lo tanto, de toda posibilidad de felicidad. ¿De qué sirve todo esto? Y esto lo meditó él, larga y seriamente y se dio cuenta, de que eso le exigía una decisión. Y así, yendo unas líneas más arriba, lee esas Palabras de Jesús que son toda una declaración programática. «Si alguno quiere venir en pos de mí, que se niegue a sí mismo, tome su cruz y se venga conmigo». Y así San Ignacio de Loyola, va a descubrir cuál es el Camino de ese Seguimiento de Jesús.

09:51
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Pero sobre todo, él que había sido militar, se da cuenta, de que en la vida, como Jesús mismo declara en varias ocasiones. «Sólo hay dos posturas, o con Jesús o de espaldas a Jesús. El que no está conmigo, está contra mí. El que no recoge conmigo, desparrama», -dirá Jesús-. «Ya antes, cuando se presentan con el Niño Jesús en el Templo Sus Padres, se le Anuncia que ese Niño será Signo de Contradicción. Y es que Cristo, en definitiva, es la prueba fundamental, en medio del mundo de la decisión que hay que tomar».

10:41
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

«O dejarse salvar por Él o condenarse lejos de Él. No hay situaciones intermedias», no las hay por mucho que nosotros queramos, muchas veces permanecer indiferentes. Pero es que esa indiferencia, posiblemente ya es una elección en contra del Señor. Por eso merece la pena que nos tomemos en serio, lo que nos dice Jesús. Y por ejemplo, comencemos por darnos cuenta de que poco influyen en nuestra vida estas Palabras que hemos escuchado. Que son además, la Primera Condición que Jesús pone para poderlo seguir.

11:20
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

«Si alguien se viene en pos de Mí, que se niegue a sí mismo». Es todo un Programa de Vida, encerrado en esas pocas palabras. Pero un Programa de Vida, que se opone radicalmente al Programa de Vida que el mundo presenta. Que el enemigo de Jesucristo, presenta por medio del mundo. Es un programa totalmente contrario, el programa del mundo, es presentar lo que se llama hoy el estado del bienestar. Se presenta toda una serie de alicientes, para pasarlo bien, el ideal de vida, es fundamentalmente, eso. El hacer lo que uno quiera, se presenta como las personas de mayor valía, las que se pasan la vida haciendo lo que les da la gana.

12:14
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Y así se presentan a sí mismas muchas, lo he oído yo, con mis oídos, más de una vez, yo he hecho siempre lo que he querido. Y eso es evidentemente todo lo contrario, de lo que dice Jesús. «El que quiera seguirme, el que quiera venir por el Camino que Yo marco, que es el Camino del Amor Auténtico. Y por lo tanto de la Salvación, que se niegue a sí mismo». Todo lo contrario de el que haga que haga lo que a él le dé la gana. O sea el Programa de Jesús es: «no hacer, lo que nos dé, la gana. Negarnos a nosotros mismos». En otras épocas hoy no se habla tanto de eso, pero se ha hablado mucho, pues del Espíritu de Sacrificio, de Ascética.

13:03
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Hoy no suena bien esto, en nuestros oídos, hablar de Sacrificios, de Renuncias, no suena bien, no nos gusta escucharlo. Y si alguien nos lo dice, no le hacemos caso. Nos parece que no está en conformidad, con los tiempos que corren. Cierto, no está en conformidad con los tiempos que corren. Pero lo que habría que buscar, es que está en conformidad con la Salvación de la Vida, si el Programa de Jesús o el programa del mundo. Negarse a sí mismo, es acostumbrarse, a llevarse la contraria. Es acostumbrarse a no hacer siempre lo que apetece. Es aceptar, que si queremos realmente Amar en la vida, hemos de aprender a decirnos no a nosotros mismos.

14:03
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Porque, lo contrario del Amor, es justamente el egoísmo, no el odio, el egoísmo. El que Ama, se olvida de sí, para estar pendiente de los demás. Pierde su vida, en Palabras de Jesús, no se preocupa de su vida, de su bienestar, de lo que a él le apetece. Piensa ante todo y sobre todo, en lo que Dios quiere y en servir a los demás. El egoísta, es todo lo contrario, se olvida de lo que los demás quieran y se centra en lo que él quiere y eso es lo que busca. Las personas que son tan radicalmente egoístas, que quisieran seguramente ser amados como los demás. Se encuentran con que hay rechazo hacia ellos, porque cuando se es tan descaradamente egoísta, los demás a esas personas no las aceptan, ni las quieren.

15:04
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

En cambio, los que aman, los que se entregan, si son aceptados. Y así se cumplen las Palabras de Jesús: «el que pierde su vida, por Mí, la encontrará». Es decir, que no busca su felicidad, su salvación, al final la encuentra. La encuentra por el camino que parecía que era imposible, pero la encuentra. Después, como digo todo un Programa, San Ignacio de Loyola, que medito muy largamente, todas las Palabras de Jesús. Y después nos ha dejado un instrumento muy importante a todos, para y ganarnos el provecho de sus Reflexiones.

15:50
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

En los Ejercicios Espirituales, plantea estas Palabras de Jesús en una meditación que él llama de «dos banderas». Y él propone que nos imaginemos, que estamos ante dos caudillos, cada uno con sus respectivos ejércitos y con sus respectivas banderas. De ahí el Título de la Meditación, por un lado está Jesucristo qué Acaudilla a todos aquellos que quieren la Salvación. Y que por lo tanto, quieren seguirle a Él, por el Camino de la Negación de sí mismo y de la Cruz. Por otro lado está satanás, con su bandera y con su ejército. Y son los que proponen al mundo no hacer caso a Dios, encerrarse en el egoísmo de uno mismo.

16:41
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Y San Ignacio pues nos invita a que nos planteemos así la vida. Realmente hay que tomar una decisión, porque no hay otros, a quienes seguir o Cristo o el diablo. O el Bien y el Amor o el mal y el egoísmo. Y no hay caminos intermedios y evidentemente tenemos que elegir, el Señor nos ha dado libertad para que elijamos nosotros. Eso no quiere decir, que cualquier elección es buena. Lo mismo que cuando vamos a una tienda, hay muchos aparatos en los que elegir. El hecho de que elijamos este, que me gusta más, no quiere decir que sea el mejor.

17:27
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Puedo encontrarme con la sorpresa de que luego no funciona nada bien. No, elegir no garantiza nada, elegir bien, es lo que hace que la libertad sea provechosa. Es el Señor quien hoy una vez más, nos está planteando: «el que quiera salvar su vida, el que se busque a sí mismo, el que se plantee egoístamente su existencia, no encontrará la felicidad, la perderá. Pero aquella que no le importe perder, aparentemente su tiempo, sus cosas, su dinero, por Mí, ese encontrará lo que busca, que en el fondo es la felicidad». Ahí está la aparente paradoja, permanentemente planteada por el Señor a todas las generaciones.

18:21
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Unos pocos se fían de Él y encuentran lo que el Señor promete. Otros muchos por desgracia no nos fiamos de Él y por lo tanto nos encontramos con que nuestra vida, muchas veces está un poco menos que perdida, poco menos que inútil. «El Hijo del Hombre no lo olvidemos, vendrá con gloria, entre sus Ángeles, para pagar a cada uno según su conducta». Este es un dato fundamental de nuestra Fe, que no podemos perder de vista, que no podemos olvidar, el Juicio de Dios. Los juicios de los seres humanos no importan, los seres humanos se equivocan, o nos equivocamos con harta frecuencia.

19:05
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Y desde luego no van a ser nuestros jueces, es el Señor. Es ante Él a quien tiene que desarrollarse nuestra vida y ojalá que con responsabilidad, con prudencia y con ayuda de la Gracia de Dios, con Sabiduría.


Oración Universal u Oración de los Fieles

19:44
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Dios quiere que todos se salven
y lleguen al conocimiento de la verdad.
Pidámosle pues por todos.

19:51
PETICIONES:

℣.  Por la Iglesia de Jesús
sometida siempre a tentación
para que con la ayuda
del Espíritu se adhiera
Fielmente a las Enseñanzas
de Su Maestro.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Por los gobernantes de este mundo
para que piensen que son responsables
de sus decisiones no sólo ante la historia
sino ante Dios.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Por todos los seres humanos
llamados a tomar una decisión
a favor o en contra
de seguir a Jesucristo enviado
por el Padre para mostrarnos
el único camino de salvación
para que todos piensen a fondo
lo que realmente conviene.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Por todos los que sufren
los enfermos, los ancianos solos
los parados y los que no tienen hogar
y también para que el Señor
haga pasar pronto la pandemia
que nos viene azotando
ayúdanos a pensar más en llevar
una vida responsable y solidaria.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

℣.  Por todos nosotros
para que no olvidemos de seguir
en la Fe a Jesucristo que exige
de nosotros dar la batalla
a nuestras tendencias egoístas
y aprender a dar la vida.

℣.  Rogemos al Señor
℟.  Te Rogamos Oyenos.

21:07
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Oh Padre lleno de Bondad
y Misericordia, Ten Compasión
de nosotros y Ayúdanos a superar
nuestra cortedad de vista

y a poner nuestra esperanza
en la Vida Eterna
que tú nos ofreces.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

23:09
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Orad, hermanos,
para que este Sacrificio,
mío y vuestro, sea agradable
a Dios, Padre Todopoderoso.

℟.  El Señor reciba de tus manos
este sacrificio, para alabanza
y gloria de su nombre,
para nuestro bien
y el de toda su santa Iglesia.

℟.  Amen.

23:25
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Recibe Señor los Dones
de Tu Pueblo ofrecidos
en Honor de la Pasión
de Tus Santos Mártires

y lo que dio fortaleza
en la Persecución
a los Santos Justo y Pastor
nos dé también a nosotros

constancia en las adversidades.
Por jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amen.

23:43
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  El Señor esté con vosotros.
℟.  Y con tu espíritu.

℣.  Levantemos el corazón.
℟.  Lo tenemos levantado hacia el Señor.

℣.  Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
℟.  Es justo y necesario.

26:54
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre y en todo lugar
Señor Padre Santo, Dios Todopoderoso

y Eterno porque Tú eres ensalzado
en la Alabanza de Tus Santos
y cuánto pertenece a su Pasión
es Obra admirable de Tu Poder

Tú bondadosamente otorga es el ardor
de su Fe, das firmeza en la perseverancia
y concedes la victoria en el combate.
Por Cristo Señor Nuestro,

por eso Señor Tus criaturas del cielo
y de la tierra te adoran cantando
un cántico nuevo y también nosotros
con todo el Ejército de los Ángeles

que ha clamamos por siempre
diciendo sin cesar:

24:38
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del Universo.
Llenos están el cielo
y la tierra de tu gloria.

Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene
en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.

24:59
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Santo eres en verdad Señor
Fuente de toda Santidad
por eso te pedimos
que Santifiques estos Dones

con la Efusión de tu Espíritu
de manera que se conviertan
para nosotros en el Cuerpo
y la Sangre de Jesucristo

Nuestro Señor, el cual iba
a ser entregado a su Pasión
voluntariamente aceptada

tomó Pan, dándote gracias
lo partió y lo dió
a sus Discípulos diciendo:

TOMAD Y COMED TODOS DE EL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.

25:58
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el caliz, y dándote gracias
de nuevo, lo pasó
a sus discípulos, diciendo:

TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.

26:43
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Éste es el Sacramento de nuestra Fe:

℟.  Anunciamos tu muerte,
proclamamos tu resurrección.
!Ven, Señor Jesús!

26:51
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Así pues Padre, al Celebrar
ahora el Memorial de la muerte
y resurreción de Tu Hijo
te ofrecemos el Pan de Vida

y el Cáliz de Salvación
y te damos gracias
porque nos haces dignos
de servirte en Tu Presencia

te pedimos humildemente
que el Espíritu Santo congregue
en la unidad a cuantos
participamos del Cuerpo y Sangre

de Cristo, acuérdate Señor
de Tu Iglesia extendida
por toda la tierra
y con el Papa Francisco

con nuestro Obispo Carlos
y sus Obispos Auxiliares
y todos los Pastores que cuidan
Tu Pueblo llevalá a su perfección

por la caridad, acuerdate también
de nuestros hermanos que durmieron
en la esperanza de la resurreción
de ... y de todoslos que han muerto

en tu misericordia, admítelos
a contemplar la luz de Tu Rostro,
Ten Misericordia de todos nosotros
y así con María, la Virgen

Madre de Dios su esposo san José
los Apóstoles y cuantos vivieron
en Tu Amistad a través
de los tiempos merezcamos

por Tu Hijo Jesucristo
compartir la Vida Eterna
y Cantar Tus Alabanzas.

28:06
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Por Cristo, con Él y en Él,
a Ti, Dios Padre Omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos.

℟.  Amen.

28:23
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Llenos de alegría por ser hijos de Dios, digamos confiadamente la Oración que Jesús nos enseñó:


PADRE NUESTRO

Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.

28:57
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.

La Asamblea

Tuyo es el reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.

29:19
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Señor Jesucristo, que dijiste
a tus Apóstoles: "La paz os dejo,
mi paz os doy"; no tengas

en cuenta nuestros pecados,
sino la Fe de tu Iglesia
y, conforme a Tu Palabra,

concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.

℟.  Amen.

29:38
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Que la paz del Señor esté siempre con vosotros.
℟.  Y con tu espíritu.

℣.  Intercambiad entre vosotros hermanos un signo de paz y fraternidad.
℟.  La Paz esté contigo

29:46
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟.  ten piedad de nosotros.

℣.  Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟.  ten piedad de nosotros.

℣.  Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟.  danos la paz.

30:29
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

℣.  Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados
a la Cena del Señor.

℟.  Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.

El Cuerpo de Cristo nos guarde para la Vida Eterna.
℟.  Amen.

31:26
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Os recuerdo que la Comunión preferentemente en la mano, pero con dignidad, con dignidad. Haciendo un trono. Como han dicho siempre los Santos Padres y sin moverse de ahí se lleva la Forma, el Cuerpo del Señor a la boca. Y las personas que quieran Comulgar la boca, pues que se queden al final del todo. Respetemos exquisitamente estas normas, para evitar este maldito contagio. Hagámoslo así y también no nos amontonamos demasiado, guardemos un poco las distancias de seguridad y tampoco respondamos nada. Digamos todos un Amén sonoro y ya no decimos ya nada.

31:26
MÚSICA de la BASÍLICA:

EL CÁLIZ QUE BENDECIMOS
Autor: Francisco Palazón


EL CÁLIZ QUE BENDECIMOS
ES LA COMUNIÓN
DE LA SANGRE DE CRISTO.

1.  Cómo pagaré al Señor
el bien que me ha hecho;
alzaré la copa de la salvación
invocando su Nombre.

2.  Mucho le cuesta al Señor
la muerte de sus fieles;
Señor, yo soy tu siervo,
hijo de tu esclava,
rompiste mis cadenas.

3.  Cumpliré mis votos al Señor,
en presencia del pueblo;
en el atrio de la casa del Señor,
en medio de ti, Jerusalén.

33:46
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Oremos.
Fortalecidos con el Pan y el Vino
te pedimos Señor por Intercesión
de los Mártires Justo y Pastor

que superando las pruebas
de cada día alcancemos
los Goces Eternos.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amen.

℣.  El Señor Esté Con Vosotros.
℟.  y Con Tu Espíritu

℣.  Y la Bendición de Dios Todopoderoso  Padre,  Hijo y  Espíritu Santo descienda sobre vosotros y os acompañe siempre.

℟.  Amén.

34:15
Rvrndo.: P. Félix Castedo:

Vamos a concluir elevando una vez más y con plena confianza la Oración del Papa Francisco a Nuestra Madre la Virgen pidiendo por el fin de esta Pandemia.

Oración del Papa Francisco a la Virgen

℣.  Oh María, tu resplandece siempre
en nuestro camino
como signo de Salvación y de Esperanza
nos confiamos a Ti

Salud de los Enfermos
bajo la Cruz estuviste asociada
al dolor de Jesús
manteniendo firme tu Fe

tu salvación de todos los pueblos
sabes de que tenemos necesidad
y estamos seguros de que proveerá
para que como en Caná de Galilea

pueda volver la alegría y la fiesta
después de estos momentos de prueba
ayúdanos Madre del Divino Amor
a conformarnos a la Voluntad

del Padre y a hacer
lo que nos diga Jesús
quien ha tomado sobre sí
nuestros sufrimientos

y ha cargado con nuestros dolores
para conducirnos a través
de la Cruz a la alegría
de la Resurrección.

℟.  Amén.

℣.  Podéis ir en paz

℟.  Demos gracias a Dios.


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