viernes, 7 de abril de 2023

07.04.2023 - Celebración de la Pasión del Señor - Papa Francisco






07.04.2023 - Celebración de la Pasión del Señor - Papa Francisco




07 de abril de 2023. - (Vatican News Español) Santa Misa de la Celebración de la Pasión del Señor, desde Basílica de San Pedro en Roma, presidida por el Papa Francisco. La Liturgia del Viernes Santo se compone de tres momentos, la Liturgia de la Palabra, la Adoración de la Cruz y la Comunión.







Inicio de la Santa Misa



PRESIDE

El Santo Padre - El Papa Francisco

CONCELEBRA

Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Mauro Gambetti
Vicario General de Su Santidad | Arcipreste de la Basílica de San Pedro | Presidente de la Fábrica de San Pedro

COMENTARIOS

Dª Patricia Ynestrosa


00:54
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Amigos oyentes, reciban un saludo de la Redacción de Vatican News y Radio Vaticana, y de quien les habla Patricia Ynestrosa. En esta transmisión de hoy 7 de abril Viernes Santo de la Pasión del Señor. En el que como se puede escuchar, en diferentes idiomas, el Papa Francisco, dentro de unos instantes, estará entrando en la Basílica de San Pedro. En un ambiente de recogimiento, de silencio, un saludo: «preparémonos a recibir al Santo Padre y permanezcamos durante la Procesión de entrada en absoluto silencio». Un saludo a quienes nos retransmiten, por Radio y Televisión, en Redes, Facebook Live y nuestro Canal YouTube.

01:47
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Y nuestro Portal triple www.vaticannews.es, un saludo especial al Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM). Conectado con nosotros a través de Facebook, damos también nuestra cordial bienvenida, a todas las Emisoras Televisivas, que están conectadas con nosotros a través del circuito Mundo Visión de la Unión Europea, de Radio Televisión. También saludamos a Radio San Camilo, en Perú, Radio Luz, en El Salvador, Radio La Voz de María, en Guayaquil, Ecuador. Soy Radio hasta aquí de Colombia, Radio y Televisión Cáritas en Asunción Paraguay, Radio Vicentina, Chile. Radio María, Argentina y Chile, Radio María, de México, del Salvador, de la República Dominicana, de Panamá y de Paraguay.

02:33
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Radio ACD, la Estación de Cristo y María, Radio Paz, de Miami, Radio Vida en Abundancia, Washington, Radio Inmaculada e Inmaculada TV, en Atlanta, Santa Teresita Radio, en Estados Unidos y Catle Finetwork, Setel Monte B, en Alicante España. ESNE, el Sembrador, Radio y Televisión y EWTN Televisión. La Liturgia del Viernes Santo se compone de tres momentos, la Liturgia de la Palabra, la Adoración de la Cruz y la Comunión. En este día y a través de la Liturgia, se invita a los Fieles a fijar su mirada en Jesús, el Crucificado. Cristo murió en la Cruz, para llevar a cabo la Misión de Salvación, que el Padre le había confiado: «he aquí el cordero de Dios, que quita los pecados del mundo».

03:32
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Jesús pagó con su vida, el precio más alto, por nuestra desobediencia y lo hizo con amor y por amor. A la sombra del viernes Santo a cada uno de nosotros puede ponerse ante la cruz y confrontarse con el Señor Jesús sobre sus propios problemas. Sus dramas, sus propios sufrimientos, todas las cuestiones de la vida, están iluminadas por la Cruz. Hasta el punto de que podríamos decir realmente, que el corazón tiene razones, que la razón no entiende. Hay que seguir al Señor Jesús, en el amor, hasta el final, como Él nos ha amado. El Pontífice está en estos momentos, entrando ya en la Basílica Vaticana.

04:34
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Un momento de reflexión, de los presentes, en silencio. Hoy Viernes Santo toda la Iglesia, se une en Duelo y Espíritu Penitencial para Conmemorar la Pasión y Muerte del Seño.

05:17
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

La Liturgia se divide en tres partes, el relato es rico en Simbología donde cada pequeño detalle tiene sentido. El silencio y la austeridad, de la Iglesia hoy nos ayudan a vivir, en un clima de Oración. Podemos apreciar a Cristo cubierto, en un ambiente de luto.

06:29
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Un momento de reflexión, de silencio, en toda la Asamblea. Mientras está por iniciar la Celebración.

06:43
El Santo Padre - El Papa Francisco

℣.  Acuérdate Señor
de tu gran misericordia
y santifica a tus siervos
con tu constante protección

ya que por ellos Cristo
Tu Hijo derramado su Sangre
instituyó el Misterio Pascual
Él que vive y reina.
Por los siglos de los siglos.

℟.  Amén.

07:20
Primera Lectura:


Lectura del Libro del Profeta Isaías, 52, 13 – 53, 12 1ª lectura: Él fue traspasado por nuestros pecados. (Cuarto canto del Siervo del Señor).

07:22
Primera Lectura:

He aquí que mi siervo prosperará, será engrandecido y exaltado, será puesto en alto. Muchos se horrorizaron al verlo, porque estaba desfigurado su semblante, que no tenía ya aspecto de hombre. Pero muchos pueblos se llenaron de asombro, ante él los reyes cerrarán la boca. Porque verán lo que nunca se les había contado y comprenderán lo que nunca se habían imaginado. ¿Quién habrá de creer, lo que hemos anunciado?, ¿A quién se le revelará el poder del Señor? Creció en su presencia, como planta débil, como una raíz en el desierto. No tenía gracia, ni belleza, no vimos en él ningún aspecto atrayente.

08:40
Primera Lectura:

Despreciado y rechazado por los hombres, varón de dolores, habituado al sufrimiento, como uno del cual se aparta la mirada, despreciado y desestimado. Él soportó nuestro sufrimiento y aguantó nuestros dolores, nosotros lo tuvimos por leproso, herido por Dios y humillado. Traspasado por nuestras rebeliones, triturado por nuestros crímenes, él soportó el castigo que nos trae la paz. Por sus llagas, hemos sido curados. Todos andábamos errantes, como ovejas, cada uno siguiendo su camino. Y el Señor cargó sobre él todos nuestros crímenes. Cuando lo maltrataban, se humillaba y no habría la boca. Como un cordero llevado a degollar, como oveja ante el esquilador, enmudecía y no abría la boca.

10:14
Primera Lectura:

Inicuamente y contra toda justicia, se lo llevaron. ¿Quién se preocupó de su suerte? Lo arrancaron de la tierra de los vivos, lo hirieron de muerte por los pecados de mi pueblo. Le dieron sepultura con los malhechores, a la hora de su muerte. Aunque no había cometido crímenes, ni hubo engaño en su boca. El Señor quiso triturarlo con el sufrimiento, cuando entregue su vida, como expiación, verá a sus descendientes. Prolongará sus años y por medio de él, prosperan a los designios del Señor. Por las fatigas de su alma verá la luz y se saciará. Con sus sufrimientos justificará mi siervo a muchos, cargando con los crímenes de ellos.

11:30
Primera Lectura:

Por eso le daré una parte entre los grandes y con los fuertes repartirán despojos. Ya que indefensos se entregó a la muerte y fue contado entre los malhechores. Cuando tomó sobre sí las culpas de todos, e intercedió por los pecadores.

℣.  Palabra de Dios
℟.  Te Alabamos Señor.

12:15
Lectura de los Salmos:


Salmo: Sal 88 Padre en tus manos, encomiendo mi espíritu.

12:15
Lectura de los Salmos:

℣.  Padre en tus manos,
encomiendo mi espíritu.

℟.  Padre en tus manos,
encomiendo mi espíritu.

1.  A ti Señor me acojo
que no quede yo nunca defraudado
en tus manos encomiendo mi espíritu
y tú mi Dios leal me librarás.  ℟.

2.  Se burlan de mí mis enemigos
mis vecinos y parientes
de mis se espantan
los que me ven pasar huyen de mí
estoy en el olvido como un muerto
como un objeto tirado en la basura.  ℟.

3.  Pero yo Señor en ti confío
Tú eres mi Dios
y en tus manos está mi destino
líbrame de los enemigos
que me persiguen.  ℟.

4.  Vuelve Señor tus ojos a tu siervo
y sálvame por tu misericordia
sean fuertes y valientes de corazón
ustedes los que esperan en el Señor.  ℟.


Lectura de las Cartas a los Hebreos, 4, 14-16; 5, 7-9. 2ª lectura: Cristo aprendió la obediencia y se convirtió en la causa de salvación para todos los que le obedecían.

16:08
Segunda Lectura:

Hermanos, Jesús el hijo de Dios, es nuestro sumo sacerdote, que ha entrado en el cielo. Mantengámonos firmes en la profesión de nuestra fe. En efecto no tenemos un sumo sacerdote, que no sea capaz de compadecerse de nuestros sufrimientos. Puesto que él mismo ha pasado por las mismas pruebas que nosotros, excepto el pecado. Acerquémonos por lo tanto, con plena confianza al Trono de la gracia, para recibir misericordia, hallar la gracia y obtener ayuda en el momento oportuno. Precisamente por eso, Cristo, durante su vida mortal, ofreció oraciones y súplicas, con fuertes voces y lágrimas, a aquel que podía librarlo de la muerte. Y fue escuchado por su piedad, a pesar de que era el hijo, aprendió a obedecer padeciendo y llegado a su perfección, se convirtió en la causa de la salvación eterna, para todos los que lo obedecen.

℣.  Palabra de Dios.
℟.  Te alabamos, Señor.

GRADUAL

18:20
Canto al Evangelio:


Cristo se hizo obediente hasta la muerte y una muerte de Cruz Por eso Dios lo elevó sobre todo nombre.

18:20
Canto al Evangelio:

℣.  Cristo se humilló a sí mismo
haciéndose obediente hasta la muerte,
y muerte de cruz.

Y por eso Dios lo exaltó
y le otorgó el nombre
que está sobre todo nombre.

19:47
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Dentro de unos instantes, tendremos la Lectura del Evangelio, de la Pasión según San Juan. Mientras estamos escuchando, la Aclamación antes del Evangelio. «Honor y Gloria a ti Señor Jesús, Cristo se humilló por nosotros y por obediencia aceptó incluso la muerte y una muerte de Cruz. Por eso Dios lo exaltó sobre todas las cosas y le otorgó el nombre que está sobre todo nombre».

21:08
Lectura del Santo Evangelio


  Lectura del Santo Evangelio según San Juan 18, 1-19, 42 Evangelio: La Pasión de Nuestro Señor Jesucristo, según San Juan.


Pasión de Nuestro Señor Jesucristo según San Juan


21:15
CRONISTA

En aquel tiempo, Jesús fue con sus discípulos, al otro lado del torrente Cedrón. Donde había un huerto y entraron ahí, él y sus discípulos. Judas el traidor, conocía también el sitio, porque Jesús se reunía a menudo allí, con sus discípulos. Entonces Judas, tomó un batallón de soldados y guardias de los Sumos Sacerdotes y de los fariseos. Y entró en el huerto con linternas, antorchas y armas. Jesús sabiendo todo lo que iba a suceder, se adelantó y les dijo:

22:35
CRISTO

«¿A quién buscan?»

22:48
CRONISTA

Le contestaron:

22:54
BATALLÓN DE JUDAS

«A Jesús, el nazareno».

23:07
CRONISTA

Les dijo Jesús:

23:12
CRISTO

«Yo soy».

23:20
CRONISTA

Estaba también con ellos Judas el traidor, al decirles «Yo soy», retrocedieron y cayeron a tierra. Jesús les volvió a preguntar.

23:49
CRISTO

«¿A quién buscan?».

23:55
CRONISTA

Le contestaron:

24:01
BATALLÓN DE JUDAS

«A Jesús, el nazareno.

24:15
CRONISTA

Les dijo Jesús:

24:20
CRISTO

«Yo Soy, les he dicho que soy yo, si me buscan a mi, dejen que estos se vayan».

24:40
CRONISTA

Así se cumplió, lo que Jesús había dicho, «no he perdido a ninguno de los que me diste». Entonces Simón Pedro, que llevaba una espada, la sacó e hirió al criado del sumo sacerdote, y le cortó la oreja derecha, este criado, se llamaba Malco. Dijo entonces Jesús a Pedro.

25:25
CRISTO

«Mete la espada en la vaina. No voy a beber el cáliz, que me ha dado mi Padre».

25:46
CRONISTA

El batallón, su comandante y los criados de los Judíos apresaron a Jesús. Lo ataron y lo llevaron primero ante Anás, porque era suegro de Caifás, sumo sacerdote aquel año. Caifás, era el que había dado a los Judíos este consejo: «conviene que muera un solo hombre por el pueblo. Simón Pedro y otro discípulo iban siguiendo a Jesús, este discípulo, era conocido del sumo sacerdote. Y entró con Jesús, en el palacio del sumo sacerdote. Mientras Pedro, se quedaba afuera, junto a la puerta. Salió el otro discípulo, el conocido del sumo sacerdote, habló con la portera e hizo entrar a Pedro. La portera, dijo entonces a Pedro:

27:30
Criada Portera

«¿No eres tú también uno de los discípulos, de ese hombre?».

27:36
CRONISTA

Él dijo:

27:47
APÓSTOL PEDRO

«No lo soy».

27:51
CRONISTA

Los criados y los guardias habían encendido un brasero, porque hacía frío y se calentaban. También Pedro estaba con ellos de pie, calentándose. El sumo sacerdote interrogó a Jesús acerca de sus discípulos y de su doctrina. Jesús le contestó:

28:36
CRISTO

«Yo he hablado abiertamente al mundo, y he enseñado continuamente en la sinagoga y en el templo. Donde se reúnen todos los Judíos, y no he dicho nada a escondidas, ¿por qué me interrogas a mí? Interroga a los que me han oído, ¿sobre lo que les he hablado? Ellos saben lo que he dicho.

29:24
CRONISTA

Apenas dijo esto, uno de los guardias, le dio una bofetada a Jesús diciendo:

29:37
SOLDADO

«¿Así contestas al Sumos Sacerdotes?»

29:43
CRONISTA

Jesús respondió:

29:49
CRISTO

«Si he faltado al hablar, demuestren ¿en qué he faltado? Pero si he hablado como se debe, ¿por qué me pegas?».

30:12
CRONISTA

Entonces Anás lo envío atado a Caifás, el sumo sacerdote. Simón Pedro estaba de pie calentándose y le dijeron:

30:37
SIRVIENTES CALENTÁNDOSE

«¿No eres tú, también uno de sus discípulos?».

30:39
CRONISTA

Él lo negó diciendo:

30:41
EL APÓSTOL PEDRO

«No lo soy».

30:56
CRONISTA

Uno de los criados del sumo sacerdote, variante de aquel a quien Pedro le había cortado la oreja, le dijo:

31:20
Uno de los Criados

«¿No te ví con él en el huerto?»

31:29
CRONISTA

Pedro volvió a negarlo y en seguida cantó un gallo. Llevaron a Jesús de casa de Caifás al pretorio. Era muy de mañana y ellos no entraron en el pretorio, para no incurrir en impureza y poder así, comer la cena de Pascua. Salió entonces Pilato a donde estaban ellos y les dijo:

32:17
PONCIO PILATO

«¿De qué acusan a este hombre?».

32:29
CRONISTA

Le contestaron:

32:36
El Pueblo y los Sumos Sacerdotes

«Si éste no fuera un malhechor, no te lo hubieramos traido».

32:59
CRONISTA

Pilato les dijo:

33:04
PONCIO PILATO

«Llévenselo y juzgénlo según la ley».

33:15
CRONISTA

Los Judíos le respondieron:

33:21
El Pueblo y los Sumos Sacerdotes

«No estamos autorizados para dar muerte a nadie».

33:39
CRONISTA

Y así se cumplió lo que había dicho Jesús, indicando de qué muerte iba a morir. Entró otra vez Pilato en el pretorio, llamó a Jesús y le dijo:

34:07
PONCIO PILATO

«¿Eres tú el Rey de los Judíos?».

34:14
CRONISTA

Jesús le contestó:

34:19
CRISTO

«¿Eso lo preguntas por tu cuenta o te lo han dicho otros?».

34:32
CRONISTA

Pilato le respondió:

34:36
PONCIO PILATO

«Acaso soy yo judío. Tu Pueblo y los Sumos Sacerdotes te han entregado a mí. ¿Qué es lo que has hecho?».

34:56
CRONISTA

Jesús le contestó:

35:00
CRISTO

«Mi reino no es de este mundo, sí mi reino fuera de este mundo, mis servidores habrían luchado para que no cayera yo en manos de los Judíos. Pero mi reino no es de aquí».

35:39
CRONISTA

Pilato le dijo:

35:45
PONCIO PILATO

«Con que, ¿tú eres rey?».

35:51
CRONISTA

Jesús le contestó:

35:57
CRISTO

«Tú lo has dicho, soy rey. Yo nací, y vine al mundo, para ser testigo de la verdad. Todo el que es de la verdad, escucha mi voz».

36:40
CRONISTA

Pilato le dijo:

36:46
PONCIO PILATO

«¿Y qué es la verdad?»

36:52
CRONISTA

Dicho esto, salió otra vez, adónde estaban los Judíos y les dijo:

37:05
PONCIO PILATO

«Yo no encuentro en él ninguna culpa. Entre ustedes es costumbre, que por Pascua ponga en libertad a un preso. ¿Quieren que les suelte al rey de los Judíos».

37:32
CRONISTA

Pero todos ellos gritaron:

37:38
El Pueblo y los Sumos Sacerdotes

«¡No a ese no, a Barrabás!»

37:55
CRONISTA

El tal Barrabás, era un bandido. Entonces Pilado tomó a Jesús y lo mandó azotar. Los soldados trenzaron una corona de espinas, se la pusieron en la cabeza. Le echaron por encima, un manto color púrpura. Y acercándose a él, le decían:

38:37
El Pueblo y los Sumos Sacerdotes

«¡Viva, el rey de los Judíos!»

39:03
CRONISTA

Y le daban de bofetadas, Pilato salió otra vez afuera y les dijo:

39:17
PONCIO PILATO

«Aquí lo traigo, para que sepan que no encuentro en él ninguna culpa».

39:32
CRONISTA

Salió pues Jesús, llevando la corona de espinas y el manto color púrpura. Pilato les dijo:

39:50
PONCIO PILATO

«¡Aquí está el hombre!».

39:57
CRONISTA

Cuando lo vieron, los Sumos Sacerdotes y sus servidores, gritaron:

40:08
Los Sumos Sacerdotes y los Guardias

«¡Crucifícalo, Crucifícalo!».

40:32
CRONISTA

Pilato les dijo:

40:37
PONCIO PILATO

«Llevenselo ustedes, y crucifiquenlo, porque yo no encuentro culpa alguna».

40:50
CRONISTA

Los Judíos le contestaron:

40:56
Los Judios

«Nosotros tenemos una ley y según esa ley, tiene que morir, por qué se ha declarado hijo de Dios».

41:28
CRONISTA

Cuando Pilato oyó estas palabras, se asustó aún más. Y entrando otra vez en el pretorio dijo a Jesús:

41:47
PONCIO PILATO

«¿De dónde eres tú?»

41:52
CRONISTA

Pero Jesús no le respondió. Pilato le dijo entonces:

42:06
PONCIO PILATO

«¿A mí no me hablas?, no sabes que tengo autoridad para soltarte y autoridad para crucificarte».

42:25
CRONISTA

Jesús le contestó:

42:31
CRISTO

«No tendrías ninguna autoridad sobre mí, si no te la hubieran dado de lo alto. Por eso el que me ha entregado a ti, tiene un pecado mayor».

43:00
CRONISTA

Desde ese momento, Pilato trataba de soltarlo, pero los Judíos gritaban:

43:17
LOS JUDIOS

«Si sueltas a ese, no eres amigo del César».

43:47
CRONISTA

Al oír estas palabras, Pilato sacó a Jesús y lo sentó en el tribunal. En el sitio que llaman «el enlosado», o en hebreo «Gabbatha». Era el día de la Preparación de la Pascua, hacia el mediodía. Y dijo Pilato a los Judíos:

44:25
PONCIO PILATO

«Aquí tienen a su Rey».

44:31
CRONISTA

Ellos gritaron:

44:37
LOS JUDIOS

«¡Fuera!, ¡fuera!, ¡Crucifícalo!».

45:01
CRONISTA

Pilato les dijo:

45:05
PONCIO PILATO

«¿A su Rey voy a crucificar?».

45:11
CRONISTA

Contestaron los Sumos Sacerdotes:

45:19
LOS SUMOS SACERDOTES

«No tenemos más Rey, que el César».

45:41
CRONISTA

Entonces, se lo entregó para que lo crucificaran. Tomaron a Jesús y Él cargando con la Cruz. Se dirigió al sitio llamado la «Calavera» que en hebreo se dice «Gólgota», donde lo Crucificaron. Y con Él a otros dos, uno de cada lado y en medio Jesús. Pilato mandó escribir en un letrero y ponerlo encima de la Cruz. En él estaba escrito, «Jesús el Nazareno, el Rey de los Judíos». Leyeron el letrero muchos Judíos, porque estaba cerca el lugar donde Crucificaron a Jesús. Y estaba escrito en hebreo, latín y griego, entonces los Sumos Sacerdotes de los Judíos le dijeron a Pilatos:

47:20
LOS SUMOS SACERDOTES

«No escribas «el Rey de los Judíos». Sino este ha dicho «soy el Rey de los Judíos».

47:52
CRONISTA

Pilato les contestó:

47:53
PONCIO PILATO

«¡Lo escrito, escrito está!».

47:59
CRONISTA

Cuando Crucificaron a Jesús, los soldados cogieron su ropa, e hicieron cuatro partes. Una para cada soldado y apartaron la túnica. Era una túnica sin costura, tejida todas de una pieza, de arriba a abajo. Por eso se dijeron:

48:34
SOLDADOS

«No la rasguemos, si no echemosla a suerte, a ver a quien le toca».

48:56
CRONISTA

Así se cumplió lo que dice la Escritura, se repartieron mis ropas, y echaron a suerte mi túnica, y eso hicieron los soldados. Junto a la Cruz de Jesús estaban su madre, la hermana de su madre, María, la de Cleofás y María la Magdalena. Al ver a su madre y junto a ella al discípulo que tanto quería, Jesús dijo a su madre:

49:51
CRISTO

«Mujer ahí está tu hijo».

50:08
CRONISTA

Luego dijo al discípulo:

50:13
CRISTO

«Ahí está tu madre».

50:22
CRONISTA

Y desde aquella hora, el discípulo se la llevó a vivir con él. Después de esto, sabiendo Jesús que todo había llegado a su término, para que se cumpliera la Escritura dijo:

50:45
CRISTO

«Tengo sed».

50:51
CRONISTA

Había allí un jarro, lleno de vinagre, los soldados sujetaron una esponja empapada en vinagre, a una caña de hisopo y se la acercaron a la boca. Jesús probó el vinagre y dijo:

51:19
CRISTO

«Todo está cumplido».

51:28
CRONISTA

He inclinando la cabeza, entregó el espíritu.

Todos se arrodillan

52:12
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Es un momento de pausa, de reflexión, del dolor que ha sufrido nuestro Señor Jesús.

52:35
CRONISTA

Entonces los Judíos, como era el Día de la Preparación de la Pascua, para que los cuerpos de los ajusticiados, no se quedaran en la Cruz el sábado. Porque aquel sábado, era un día muy solemne, pidieron a Pilato que les quebraron las piernas y que los quitaran de la Cruz. Fueron los soldados, le quebraron las piernas, a uno y luego al otro, de los que habían Crucificado con Él. Pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las piernas. Sino que uno de los soldados, le traspasó el costado con una lanza, e inmediatamente salió sangre y agua.

53:47
CRONISTA

El que vió, da testimonio de esto y su testimonio es verdadero. Y él sabe que dice la verdad, para que también ustedes crean. Esto sucedió para que se cumpliera lo que dice la Escritura. No le quebraran ningún hueso y en otro lugar la Escritura dice: «mirarán al que traspasaron». Después de esto José de Arimatea que era discípulo de Jesús, pero oculto, por miedo a los Judíos. Pidió a Pilato que lo dejara llevarse el cuerpo de Jesús y Pilato lo autorizó. Él fue entonces y se llevó el cuerpo. Llegó también Nicodemos, el que había ido a verlo de noche y trajo unas 100 libras de una mezcla de mirra y aloe.

55:26
CRONISTA

Tomaron el cuerpo de Jesús y lo envolvieron en lienzos, con esos aromas. Según se acostumbra a enterrar entre los Judíos. Había un huerto en el sitio donde lo Crucificaron, y en el huerto un sepulcro nuevo, donde nadie había sido enterrado todavía. Y como para los Judíos era el Día de la Preparación de la Pascua, y el sepulcro estaba cerca, allí pusieron a Jesús.

℣.  Palabra del Señor
℟.  Gloria a Ti Señor, Jesucristo.

56:49
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

A continuación como es tradición el Predicador de la Casa Pontificia, el Cardenal Ramiro Cantalamessa, hará la Homilía.



HOMILIA


57:17
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Desde hace 2000 años la Iglesia Anuncia y Celebra en este día, la Muerte del Hijo de Dios, en la Cruz. En cada Misa después de la Consagración repetimos «Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. Ven Señor Jesús». Otra muerte de Dios, sin embargo, ha sido proclamada durante más de un siglo, en nuestro mundo occidental, descristinianizado. Cuando en el ámbito de la cultura, se habla de la muerte de Dios, es esta otra muerte de Dios, ideológica y no histórica que se entiende. Algunos teólogos para no quedarse atrás, se apresuraron a construir sobre ella, una teología, la teología de la muerte de Dios.

58:35
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

No podemos desconocer la existencia, de esta narrativa diferente, sin dejar presa de la sospecha a muchos creyentes. Esta muerte diferente de Dios ha encontrado su perfecta expresión, en la conocida proclama que Nietzsche, el filósofo, pone en boca del hombre loco, que llega sin aliento a la plaza de la ciudad. «¿A dónde se ha ido Dios?», gritó. Te lo diré yo: «Fuimos nosotros quienes lo matamos, tú y yo. Nunca hubo acción más grande. Todos los que vengan después de nosotros, en virtud de esta acción, pertenecerán a una historia más alta, que cualquier historia que haya existido, hasta ahora».

59:42
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

En la lógica de estas palabras y creo en las expectativas del autor, estaba que después de él, la historia no se dividiera más, en antes de Cristo y después de Cristo. Más bien, en antes de Nietzsche y después de Nietzsche. Aparentemente no es la nada la que se pone en el lugar de Dios, sino el hombre. Y más precisamente, el súper hombre o el más allá del hombre. De este hombre nuevo, hay que exclamar ahora, con un sentimiento de satisfacción y de orgullo, no ya de compasión, «eche homo«», aquí está el verdadero hombre. Sin embargo, no tardaremos mucho en darnos cuenta, de que dejado a sí mismo, el hombre no es nada.

01:00:42
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

¿Qué hicimos desatando a esta tierra, de la cadena de su sol?, sigue el hombre loco. ¿Hacia dónde se mueve ahora?, ¿a dónde caminamos?, lejos de todo sol. No es la nuestra, una caída eterna y hacia atrás, hacia los lados, hacia adelante, de todos lados, hay todavía un arriba y un abajo. No estamos vagando como por una nada infinita. La respuesta tácita y consoladora del hombre loco, a estas preguntas suyas, es ¡no! No vagaremos en una nada infinita, porque el hombre cumplirá la tarea encomendada hasta ahora a Dios. En cambio nuestra respuesta como creyentes, es sí y eso es exactamente lo que sucedió y está sucediendo.

01:01:53
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Vagamos espiritualmente como por una nada infinita. Es significativo que precisamente en la estela del autor, de esta proclama, algunos hayan llegado a definir la existencia humana, como un ser para la muerte. Y a considerar todas las supuestas posibilidades del hombre, como nulidades desde el principio. Más allá del bien y del mal, fue otro grito de batalla del autor, pero más allá del bien y del mal, solo hay voluntad de poder. Y sabemos a donde ella nos lleva, dónde nos está llevando, conduciendo. No se nos permite juzgar el corazón de un hombre, que solo Dios conoce. Incluso el autor de ese anuncio, ha tenido su parte de sufrimiento en la vida y el sufrimiento une a Cristo, quizás más de lo que lo separan de él, las víctimas.

01:03:11
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

La Oración de Jesús en la Cruz: «Padre, perdónalos, porque no saben lo que hacen», no fue dicho solo para los que estaban presentes en el Calvario, ese día. Me viene la mente una imagen, que a veces se ha observado en vivo y que espero se haya hecho realidad, mentras tanto, para el autor de aquella proclama. Un niño enfadado, intenta golpear con sus manos y rascar la cara del padre, hasta que agotado cae llorando en sus brazos, quien lo calma y lo estrecha contra su pecho. No juzgamos, repito la persona que solo Dios conoce, los frutos sin embargo, que su proclamación produjo, los podemos y debemos juzgar.

01:04:19
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Ella ha sido declinada de las más diversas maneras y con los más diversos nombres, hasta convertirse en una moda. En un aire que se respira, en los círculos intelectuales, del occidente posmoderno. El denominador común, de todas estas diferentes declinaciones, es el relativismo total, en todos los campos, ética, lenguaje, filosofía, arte y por supuesto religión. Nada más es sólido, todo es líquido, o incluso vaporoso. En la época del romanticismo, la gente se deleitaba en la melancolía, hoy en el nihilismo. Como creyentes, es nuestro deber, mostrar lo que hay detrás o debajo de esa proclamación.

01:05:25
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Está el brillo de una llama antigua, la repentina erupción de un volcán activo, desde el principio del mundo. El drama humano, también tuvo su prólogo en el cielo, en ese espíritu de negación, que no aceptaba existir en la gracia de otro. Desde entonces, ha estado reclutando seguidores para su causa. Empezando por los ingenuos, Adán y Eva. «Seréis como Dioses conocedores del bien y del mal». Para el hombre moderno, todo esto no parece más que un mito etiológico, para explicar la existencia del mal, en el mundo. Y en el sentido positivo que se le da hoy al mito, así es en realidad. Pero la historia, la literatura y nuestra propia experiencia personal, nos dicen que detrás de este mito, hay una verdad trascendente que ninguna narración histórica o razonamiento filosófico podría transmitirnos.

01:06:55
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Dios conoce nuestro orgullo y ha venido a nuestro encuentro, Él se ha aniquilado primero, delante de nuestros ojos. «De hecho Cristo Jesús, siendo de condición divina, no retuvo ávidamente el ser igual a Dios, al contrario. Se despojó de sí mismo, tomando la condición de esclavo, hecho semejante a los hombres. Y así reconocido como hombre, por su presencia, se humilló a sí mismo, hecho obediente hasta la muerte y una muerte de Cruz». Dios, fuimos nosotros quienes lo matamos, tú y yo, grita el hombre loco. Esta cosa terrible, en realidad, sucedió una vez en la historia humana.

01:08:01
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Pero un sentido muy diferente de lo que él entendía, porque es verdad, hermanos y hermanas. Fuimos nosotros, ustedes y yo, quienes matamos a Jesús de Nazaret. Él murió por nuestros pecados y por los del mundo entero (Jn 2,2). Pero su resurrección, nos asegura que este camino no conduce a la derrota, sino que gracias a nuestro arrepentimiento conduce a esa apoteosis de la vida, buscada en vano por otros caminos. ¿Por qué hablar de todo esto en una liturgia de Viernes Santo? No para convencer a los ateos, de que Dios no está muerto. Los más famosos entre ellos, lo descubrieron por su cuenta en el momento en que cerraron los ojos a la luz, de hecho a la oscuridad de este mundo.

01:09:11
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

En cuanto a aquellos que todavía están entre nosotros, se necesitan otros medios que las palabras de un pobre Predicador. Medios que el Señor no fallará otorgar a los que tienen el corazón abierto a la verdad. Como le pediremos a Dios en la Oración Universal, que va a seguir en nuestra Liturgia, no. El verdadero motivo, es otro, es para evitar que los creyentes, quién sabe, tal vez, solo unos pocos, estudiantes universitarios, sean arrastrados a ese vórtice de nihilismo, que es el verdadero agujero negro, del universo espiritual. El intento es de hacer resonar entre nosotros, la exhortación siempre actual, de Dante Alighieri: «Sed, oh cristianos, en moveros más graves. No seáis como pluma a todo viento y no penséis que cada agua os lave”».

01:10:27
El Cardenal Mons. Rainiero Cantalamessa
Predicador de la Casa Pontificia

Sigamos pues venerados padres, hermanos y hermanas, repitiendo agradecidos y más convencidos que nunca las palabras que proclamamos en cada Misa. «Anunciamos tu muerte, proclamamos tu resurrección. Ven Señor Jesús».

01:11:09
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Momento de Reflexiona, de la Homilía dicha por el Cardenal Cantalamessa, antes de pasar a la Oración Universal.

01:11:36
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

La Liturgia de hoy, en su riqueza, nos ha deparado momentos intensos, en los que podremos profundizar en el Misterio del Sacrificio de Cristo.

01:12:26
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Nosotros los Fieles, debemos responder guardando silencio externo e interno, o fomentando el espíritu reflexivo. Debemos unirnos al duelo por la Muerte de Jesucristo.


ORACIÓN UNIVERSAL


01:12:58
I. Por la Santa Iglesia

El Diácono

℣.  Oremos Queridos hermanos
por la Santa Iglesia de Dios
para que nuestro Dios y Señor

le conceda la paz y la unidad
se digne protegerla
en toda la Tierra

y nos conceda glorificarlo
como Dios Padre Omnipotente
con una vida pacífica y serena.

Se reza en silencio

01:13:42
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que en Cristo revelaste
tu Gloria a todas las naciones

conserva la obra de tu misericordia
para que tu Iglesia
extendida por toda la Tierra

preserve con Fe inquebrantable
en la confesión de tu Nombre.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:14:02
II. Por el Santo Padre

El Diácono

℣.  Oremos También
por nuestro Santo Padre
el Papa Francisco
para que Dios Nuestro Señor

que lo escogió
para el Orden de los Obispos
lo conserve a salvo y sin daño

para bien de su Santa Iglesia
a fin de que pueda gobernar
al Pueblo Santo de Dios.

Se reza en silencio

01:14:39
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
cuya sabiduría gobierna el universo
atiende favorablemente nuestras súplicas

y protege con tu amor al Papa
que nos distes
para que el Pueblo Cristiano

que tú mismo pastoreas
progresa bajo su cuidado
en la firmeza de su Fe.
Por Jesucristo nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:15:03
III. Por todos los Fieles de todo Orden y Grado

El Diácono

℣.  Oremos también
por todos los Obispos
Presbíteros y Diáconos de la Iglesia
y por todo el Pueblo Santo de Dios.

Se reza en silencio

01:15:23
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que con tu Espíritu
Santificas y Gobiernas

a toda la Iglesia
escucha nuestras súplicas
por tus Ministros

para que con la ayuda de tu Gracia
te sirvan con Fidelidad.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:15:43
IV. Por los Catecúmenos

El Diácono

℣.  Oremos también
por los Catecúmenos
para que Dios Nuestro Señor

abra los oídos de sus corazones
y les manifieste su misericordia
y para que mediante el Bautismo

se les perdonen todos sus pecados
y queden incorporados
a Cristo Nuestro Señor.

Se reza en silencio

01:16:27
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que sin cesar concedes
a nuevos hijos a tu Iglesia
acrecienta la Fe y el Conocimiento

a los Catecúmenos para que renacidos
en la Fuente Bautismal los cuentes
entre tus hijos de adopción.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:16:47
V. Por la Unidad de los Cristianos

El Diácono

℣.  Oremos también
por todos los hermanos
que creen en Cristo
para que Dios Nuestro Señor

se digne congregar y custodiar
en la Única Iglesia
a quienes procuran vivir en la verdad.

Se reza en silencio

01:17:21
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que reúnes a los que están dispersos
y los mantienes en la unidad

mira benignamente la Grey de tu Hijo
para que a cuantos están Consagrados
por el único Bautismo

también los una la integridad de la Fe
y los asocie el vínculo de la Caridad.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:17:44
VI. Por los Judios

El Diácono

℣.  Oremos también por los Judíos
para que quienes Dios Nuestro Señor
habló primero les conceda

progresar continuamente en el amor
de su Nombre y en la fidelidad
a su Alianza.

Se reza en silencio

01:18:13
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que confiaste tus promesas
a Abraham y a su descendencia

escucha compasivo
los ruegos de tu iglesia
para que el pueblo que adquiriste

primero como tuyo, merezca llegar
a la plenitud de La redención.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:18:34
VII. Por los que no creen en Cristo

El Diácono

℣.  Oremos también
por los que no creen en Cristo
para que iluminados por el Espíritu Santo
puedan ellos encontrar
el Camino de la Salvación.

Se reza en silencio

01:19:00
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
concede a quienes no creen en Cristo
que caminando en tu presencia
con sinceridad de corazón

encuentren la verdad
y a nosotros concédenos crecer
en el amor mutuo y en el deseo

de comprender mejor
los misterios de tu vida
a fin de que seamos testigos

cada vez más auténticos
de tu amor en el mundo.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:19:27
VIII. Por los que no conocen a Dios

El Diácono

℣.  Oremos también
por los que no conocen a Dios
para que buscando con sinceridad
lo que es recto
merezcan llegar a Él.

Se reza en silencio

01:19:50
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
que has puesto en los corazones
de todos los hombres
para que deseándote te busquen

y para que al encontrarte descansen en ti
concédenos que en medio
de sus dificultades de este mundo
al ver los signo de tu amor

y el testimonio de las buenas obras
de los creyentes
todos los hombres se alegren

al confesarte como único Dios verdadero
y Padre de todos.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:20:22
IX. Por los Gobernantes de las Naciones

El Diácono

℣.  Oremos también
por los Gobernantes de las Naciones
para que Dios Nuestro Señor
guíe sus mentes y corazones

según su voluntad providente
hacia la paz verdadera
y la libertad de todos.

Se reza en silencio

01:20:51
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
en cuyas manos están los corazones
de los hombres y los derechos
de las Naciones, mira con bondad

a nuestros Gobernantes
para que con tu ayuda se afiance
en toda la tierra
un auténtico progreso social

una paz duradera y una verdadera
libertad religiosa.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:21:15
X. Por los que sufren las atrocidades de la guerra

El Diácono

℣.  Oremos por los pueblos desgarrados
por las atrocidades de la guerra
que sus lágrimas y la sangre de sus víctimas

no se derramen en vano
sino que apresuren una era de paz
que brote de las gloriosas
llagas de Cristo.

Se reza en silencio

01:21:50
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Fuerte
que aniquilas las guerras
y abates a los soberbios
destierra cuanto antes de la humanidad

los horrores y las lágrimas
para que todos podamos ser llamados
tus verdaderos hijos.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:22:10
X. Por los Atribulados

El Diácono

℣.  Oremos Hermanos muy queridos
a Dios Padre Todopoderoso
para que libre al mundo de todos sus errores
aleje las enfermedades

alimente a los que tienen hambre
libere a los encarcelados
y haga justicia a los oprimidos
conceda seguridad a los que viajan

un buen retorno
a los que se hayan lejos del hogar
la salud a los enfermos
y la salvación a los moribundos.

Se reza en silencio

01:23:02
El Santo Padre - El Papa Francisco

Dios Todopoderoso y Eterno
consuelo de los afligidos
y fortaleza de los que sufren
escucha a los que te invocan

en su tribulación, para que todos experimenten
en sus necesidades la ayuda
de tu misericordia.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:23:29
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Es el momento de la Adoración de la Santa Cruz. La Adoración de la Santa Cruz, se presenta solamente a la Comunidad cantando tres veces la aclamación:


Pars secunda:

ADORATIO SANCTÆ CRUCIS

Ostensio sanctæ Crucis

Un diacono porta processionalmente la Croce non velata attraverso la Basilica, facendo tre soste.

A ogni ostensione della Croce, il diacono canta:

Ecce lignum Crucis, in quo salus
mundi pependit.


La schola e l’assemblea:

Venite, adoremus.
Segunda Parte:

ADORACIÓN DE LA SANTA CRUZ

Ostensio sanctæ Crucis

Un diácono lleva la Cruz descubierta en procesión a través de la Basílica, haciendo tres paradas.

En cada exposición de la Cruz, el Diácono Canta:

Mirad el Árbol de la Cruz
donde estuvo clavada
la Salvación del mundo.

La Scola y la Asamblea:

Venid, adorémosle.


01:24:16
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

En el camino hacia el Altar se hacen tres Estaciones. La Primera, cerca de la Entrada, la Segunda en el medio de la Iglesia y la Tercera junto al Presbiterio. En cada una de ellas, el Diácono que lleva a la Cruz, se detiene, la eleva y canta. En estos momentos, se ponen todos de rodillas. Nos levantamos todos los presentes y ahora el Diacono se dirige a la Segunda Estación, en el medio de la Basílica y cantará: «Mirad el árbol de la Cruz, donde estuvo clavada la Salvación del Mundo» y todos responderán: «Venid a adorarlo».

01:26:02
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Un momento de recogimiento, en toda la Basílica, toda la Asamblea, siguiendo paso a paso, reflexionando dentro, en su interior, lo que significa este momento, para cada uno de nosotros.

01:28:03
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

La Tercera y última Estación, es en el Presbiterio.

01:30:35
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Se coloca ahora la Cruz, se la lleva al Presbiterio, con la posición adecuada, para que todos los Fieles, puedan acercarse, a adorarla, mediante una genuflexión o un beso. Es en estos momentos, a quienes nos están viendo y escuchando, por radio, ha sido entregada al Santo Padre. En la que él se dedica unos instantes a Adorar la Cruz y a Besar, la Santa Imagen de Nuestro Señor Jesucristo. Mientras se puede escuchar la Antífona

Tu Cruz Adoramos Señor y
Tu Santa Resurrección
Alabamos y Glorificamos

Por el Madero ha venido
la Alegría al mundo entero
que Dios tenga Piedad
y nos Bendiga

ilumine su Rostro
sobre nosotros
y tenga Piedad.

01:31:55
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Algunos Cardenales, se están acercando, para la Adoración de la Cruz.

01:33:29
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Comienza «El Lamento del Señor (Los Improperios)», mientras sigue la pequeña Asamblea, compuesta por Cardenales, que se acercan a la Cruz para adorarlo.

01:36:15
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

El pequeño grupo de la Asamblea, que está Adorando la Cruz, está también compuesto por algunos Embajadores y algunos Laicos y Religiosos.


Lamenti del Signore

Popolo mio che male ti
ho fatto? In che ti
ho provocato? Dammi risposta.

Santo Dio.
Santo forte.
Santo e immortale,
abbi pietà di noi.

Io per te ho flagellato l’Egitto
e i suoi primogeniti,
e tu mi hai consegnato
per esser flagellato.
Lamento del Señor (Improperios)

Pueblo mío, ¿qué te he hecho?
¿en qué te he ofendido?
respóndeme

Santo Dios.
Santo Fuerte.
Santo Inmortal,
Ten Piedad de Nosotros..

Yo por ti azoté a Egipto
y a sus primogénitos
tú me entregaste
para que me azotarán.


01:40:38
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Los Improperios, llamados así, porque en ellos, Jesús reprocha a su pueblo su ingratitud. Relata lo que ha hecho por su pueblo, lo sacó de Egipto, lo condujo a través del desierto, lo alimentó con el Maná. Hizo por él toda clase de portentos, en recompensa por todos esos favores, el pueblo lo trata con desprecio.

Pueblo mío ¿qué te he hecho?
¿en qué te he ofendido?
respóndeme

y el trisagio:

Santo Dios
Santo Fuerte
Santo Inmortal
Ten piedad de nosotros.

01:41:14
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Cristo nos reprocha a todos, no solo a los que lo Crucificaron. Pero lo hace de forma tan suave, que suscita nuestra compasión, más que nuestros sentimientos de culpabilidad. Lo que se cuestiona es nuestra ingratitud y dureza de corazón, la única respuesta a estas preguntas y reproches, es el beso silencioso, a los pies del Señor Crucificado.

01:42:39
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

El Altar está ahora, preparándose, para lo que será después, el momento de la Comunión.

01:42:49
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Mauro Gambetti
Vicario General de Su Santidad | Arcipreste de la Basílica de San Pedro | Presidente de la Fábrica de San Pedro

Obediente a la Palabra del Salvador y siguiendo su Divina Enseñanza, nos atrevemos a decir:


PADRE NUESTRO

Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu Reino;
hágase tu voluntad en la tierra
como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.

01:44:00
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Mauro Gambetti
Vicario General de Su Santidad | Arcipreste de la Basílica de San Pedro | Presidente de la Fábrica de San Pedro

Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la Paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.

La Asamblea:

Tuyo es el Reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.

01:44:50
Emmo. y Rvdmo. Sr. Don Mauro Gambetti
Vicario General de Su Santidad | Arcipreste de la Basílica de San Pedro | Presidente de la Fábrica de San Pedro

℣.  Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados
a la Cena del Señor.

01:45:00
La Asamblea:

℟.  Señor, no soy digno
de que entres en mi casa,
pero una palabra tuya
bastará para sanarme.

El Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo.
℟.  Amen.

01:45:30
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Es el momento de la Comunión, en lo que es este momento ya de la Tercera Parte de esta Liturgia, esta Oración de hoy.

01:45:56
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

La Eucaristía, es la participación en la muerte de Cristo, es decir, con Cristo en su estado de víctimas sacrificial. Recibir su Cuerpo y su Sangre es entrar en su disposición, de Total Entrega de sí mismo, el Padre. El Papa San León, nos lo explica maravillosamente en este pasaje: «lo que ocurre, cuando participamos del Cuerpo y la Sangre de Cristo, es que nos convertimos en lo que recibimos y en Cuerpo y Espíritu. Llevamos por todas partes, a Aquel en el cual y con el cual morimos, fuimos sepultados y volvimos a resucitar».

01:46:56
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Nuestra Comunión del Viernes Santo, proclama y da testimonio de la Pasión y Muerte del Señor. Nos capacita, para participar a nivel más profundo en el sacrificio de Cristo. Para asociarnos con él, además, nos hace partícipes de los frutos de este Sacrificio.

01:48:49
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Esta Celebración presenta, el Drama Inmenso de la Muerte de Cristo, en el Calvario. La Cruz erguida sobre el mundo, sigue en pie, como signo de salvación y de esperanza. Con la Pasión de Jesús se contempla el Misterio de la Cruz de Cristo, como una Solemne Liturgia. Jesús es Rey, es Sacerdote y Templo a la vez, con la túnica y con que los soldados echan a suertes. Es el dador del Espíritu, es el Cordero Inmaculado e Inmolado, al que no le rompen los huesos. La Madre estaba allí, junto a la Cruz, como Madre-Discípula que ha seguido en todo, la suerte de su Hijo. Es en esta Celebración, en la que conmemoramos los distintos momentos por los que tuvo que pasar, el Salvador, en las horas previas a su ejecución.

01:49:48
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Este itinerario de dolor, nos recuerda paso a paso, a través de cada parte de esta Ceremonia. La Lectura de la Palabra la Adoración de la Cruz y la Comunión Eucarística, Consagrada el día previo, Jueves Santo. Cristo no se guardó nada para sí, lo dio todo por nuestra salvación.

01:50:48
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Cristo flagelado, es la imagen del hombre herido, por el pecado. Cristo sufre por nosotros y muestra las consecuencias del pecado en nuestras vidas. Es el hombre que le causa semejante daño a Jesús, pero también es el hombre quien sufre. Jesús conoce el sufrimiento de cada hombre y toma sobre si todo el peso, todo el sufrimiento, solo por amor. Dios no es indiferente ante el dolor del hombre, el mismo desea sufrir, con nosotros y por nosotros. Sufrir por amor, muestra la grandeza y veracidad de su gran amor.

01:51:50
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Hoy es el Día de la Cruz Victoriosa, desde donde Jesús no dejó lo mejor de Él mismo. María como Madre, el Perdón, e incluso a sus Verdugos, la Confianza total en Dios Padre.

01:52:40
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Como decía en la Homilía del Cardenal Cantalamessa "fuimos nosotros los que matamos a Jesús de Nazaret. Éll murió por nuestro pecado y por lo del mundo entero. Pero su Resurrección, nos asegura que este camino, no conduce a la derrota, sino que gracias a nuestro arrepentimiento, conduce a esa apoteosis de la vida, buscada en vano por otros caminos.

01:55:01
El Santo Padre - El Papa Francisco

℣.  Oremos.
Dios Todopoderoso y Eterno
que nos has redimido
con la gloriosa muerte

y Resurrección de tu Hijo Jesucristo
prosigue en nosotros
la Obra de tu misericordia
para que me digan

de nuestra participación
en este Misterio
permanezcamos dedicados a tu Servicio.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:55:25
El Diácono:

Inclináos para recibir la Bendición.

01:55:26
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Se inclinan para la Bendición del Santo Padre.

01:55:30
El Santo Padre - El Papa Francisco

℣.  Envía Señor sobre este Pueblo tuyo
que ha conmemorado la muerte de tu Hijo
en espera de su Resurrección

la abundancia de tu Bendición
llege a él tu perdón
y reciba tu Consuelo

se acreciente su Fe Santa
y se consolide su eterna redención.
Por Jesucristo Nuestro Señor.

℟.  Amén.

01:56:32
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Así termina la Liturgia, en silencio, sin despedida, ni Canto Final. El Pontífice se está ya preparando para retirarse de la Basílica. El Altar queda desnudo, el Sagrario vacío, el Presbiterio sin flores, ni ornamentos de ninguna clase. Es el día en que la Iglesia presenta un aspecto austero completamente. Nada distrae nuestra atención del Altar y la Cruz. La Iglesia permanece vigilante, junto a la Cruz del Señor.

01:57:54
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Son momentos en los que, poco a poco, se están yendo ya, el Pontífice está ya por salir. Recordamos a nuestros oyentes, que esta noche a las 21:15 el Vía Crucis, se llevará a cabo en el Coliseo de Roma. En el Viacrucis voces de padres, de territorios heridos, por la guerra. Las Meditaciones de este año son testimonios dados al Papa por hombres y mujeres, de diversas regiones del mundo, que viven la violencia, la pobreza y la injusticia. El Papa seguirá esta noche el Vía Crucis, desde la Casa Santa Marta, debido al intenso frío de estos días, no estará presente y estará siguiéndolo de cerca. Y esta medida es para protegerlo un poco, del frío que ha estado haciendo, en estos días.

01:59:15
Comentarios: Dª Patricia Ynestrosa

Recordamos también que mañana, a las 19:30 de la noche, el Papa Francisco encabezará la Vigilia Pascual en la Noche Santa, de la Resurrección en la Basílica Vaticana. Hasta aquí nosotros amigos oyentes, nos despedimos, en reflexión, en silencio, en Adoración de esta Cruz de Nuestro Señor Jesucristo, que murió por nuestros pecados. Y este día en que la Iglesia total, se encuentra en luto, por el sufrimiento, del dolor que recibió Nuestro Señor Jesucristo, por nosotros por el amor que tiene, a cada uno de nosotros. Los hemos acompañado Patricia Ynestrosa, en esta transmisión, gracias por haber estado en nuestra sintonía «Laudetur Iesus Christus, Alabado sea Jesucristo».


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