Palabra de Vida 4/12/18:
«Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo»
Por P. Jesús Higueras
«Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo»
Por P. Jesús Higueras
Camino Católico
Publicado el 04 dic. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Espacio "Palabra de Vida" de 13 TV del 4 diciembre de 2018, martes de la 1ª semana de Adviento, presentado por el padre Jesús Higueras, en el cual se comenta el Evangelio del día.
Evangelio: San Lucas 10, 21-24:
En aquella hora Jesús se lleno de alegría en el Espíritu Santo y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así te ha parecido bien.
Todo me lo ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar».
Y volviéndose a sus discípulos, les dijo aparte:
«¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron».
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así te ha parecido bien.
Todo me lo ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar».
Y volviéndose a sus discípulos, les dijo aparte:
«¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron».
Padre Don: Jesús Higueras Esteban
00:08
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo». Porque tenemos esperanza, porque el Espíritu Santo nos dice: «que el final pertenece a Dios». Porque el Espíritu Santo nos dice: «que a pesar que nos equivocamos, que somos débiles, que hemos metido la pata, que nuestra vida ha sido pues muy pobre». El Espíritu Santo nos dice: «pero en verdad no importa, tu eres amado de Dios tal y como eres ahora. Dios te quiere y te está esperando en la eternidad, para abrazarte, para besarte, para que estés con tus seres queridos.
00:31
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Si el Cristianismo es puro futuro, el Cristiano es alguien que mira hacia adelante. No miramos atrás, miramos adelante, no miramos nuestros errores, miramos el Amor de Dios. Que es el Espíritu Santo, por eso Jesucristo se llenaba de Alegría en el Espíritu Santo. Si miramos el mundo sin Fe, si miramos nuestra sociedad sin Fe, si miramos incluso nuestras familias sin Fe. Pues es para, para, para, para echarse a llorar. Porque las cosas están tan mal, tan mal, pero bueno, esto que es. Ahora, si el Espíritu Santo nos visita nos dice: «no te desanimes, esas personas que tanto quieres y que están tan alejadas, esas personas que están tan equivocadas, también son amadas de Dios.
01:05
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y algún día conocerán, seguro que sí, aunque sea en el momento de la muerte, conocerán el Amor de Dios. Y podrán si quieren elegirlo y por tanto creo que es tarea del Cristiano y sobre todo en este tiempo de Adviento quitarnos la tristeza. Quitarnos la tristeza, porque la tristeza es como la aliada del enemigo. La tristeza es el instrumento que utiliza el demonio para desanimarnos. El demonio es el padre de la mentira, sí. Pero es el padre de la tristeza y muchas veces el demonio se sirve del desánimo, del desaliento, del que mal está todo.
01:33
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Del pesimismo para para que no hagamos nada, para que nos quedemos bloqueado. No, para que voy a Rezar, para que voy.., si no sirve para nada. Por eso Jesucristo estaba lleno de la Alegría de Espíritu Santo y nos pide a nosotros que dejemos que esa alegría que nos da el Espíritu Santo suceda nosotros. ¿Que es la alegría?, la contemplación del bien, el gozo contemplando el bien. No tanto el bien que hay en la tierra, en cuanto el bien que Dios ha hecho por nosotros.
01:56
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y el que nos promete la vida eterna. Y por eso vamos a pedirle al Espíritu Santo que en nuestra penitencia de Adviento sea una penitencia de ser alegres y de llevar la alegría a los demás.
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo». Porque tenemos esperanza, porque el Espíritu Santo nos dice: «que el final pertenece a Dios». Porque el Espíritu Santo nos dice: «que a pesar que nos equivocamos, que somos débiles, que hemos metido la pata, que nuestra vida ha sido pues muy pobre». El Espíritu Santo nos dice: «pero en verdad no importa, tu eres amado de Dios tal y como eres ahora. Dios te quiere y te está esperando en la eternidad, para abrazarte, para besarte, para que estés con tus seres queridos.
00:31
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Si el Cristianismo es puro futuro, el Cristiano es alguien que mira hacia adelante. No miramos atrás, miramos adelante, no miramos nuestros errores, miramos el Amor de Dios. Que es el Espíritu Santo, por eso Jesucristo se llenaba de Alegría en el Espíritu Santo. Si miramos el mundo sin Fe, si miramos nuestra sociedad sin Fe, si miramos incluso nuestras familias sin Fe. Pues es para, para, para, para echarse a llorar. Porque las cosas están tan mal, tan mal, pero bueno, esto que es. Ahora, si el Espíritu Santo nos visita nos dice: «no te desanimes, esas personas que tanto quieres y que están tan alejadas, esas personas que están tan equivocadas, también son amadas de Dios.
01:05
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y algún día conocerán, seguro que sí, aunque sea en el momento de la muerte, conocerán el Amor de Dios. Y podrán si quieren elegirlo y por tanto creo que es tarea del Cristiano y sobre todo en este tiempo de Adviento quitarnos la tristeza. Quitarnos la tristeza, porque la tristeza es como la aliada del enemigo. La tristeza es el instrumento que utiliza el demonio para desanimarnos. El demonio es el padre de la mentira, sí. Pero es el padre de la tristeza y muchas veces el demonio se sirve del desánimo, del desaliento, del que mal está todo.
01:33
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Del pesimismo para para que no hagamos nada, para que nos quedemos bloqueado. No, para que voy a Rezar, para que voy.., si no sirve para nada. Por eso Jesucristo estaba lleno de la Alegría de Espíritu Santo y nos pide a nosotros que dejemos que esa alegría que nos da el Espíritu Santo suceda nosotros. ¿Que es la alegría?, la contemplación del bien, el gozo contemplando el bien. No tanto el bien que hay en la tierra, en cuanto el bien que Dios ha hecho por nosotros.
01:56
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Y el que nos promete la vida eterna. Y por eso vamos a pedirle al Espíritu Santo que en nuestra penitencia de Adviento sea una penitencia de ser alegres y de llevar la alegría a los demás.
Santa Misa de hoy martes 4 de diciembre de 2018, 1ª semana de Adviento
Camino Católico
Publicado el 04 dic. 2018 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Celebración de la Santa Misa de hoy martes de la 1ª semana de Adviento, presidida por el P. José Blanco, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Inicio de la Santa Misa y Dedicación
00:31
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
00:37
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
00:48
Rvrndo.: D. José Blanco:
Hermanos buenos días sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la «1ª Semana de Adviento». Estamos en Tiempo de Espera en tiempo de Esperanza. También hoy día «04 de diciembre es la Fiesta de San Juan Damasceno». Bueno Damascenos porque había nacido en Damasco. Fue un Monje del siglo VII segunda mitad del siglo VIII y primera mitad del siglo VIII. Fue un Monje en aquellos tiempos se extendió mucho, le llamaban la «Herejía Iconoclasta». Es decir, que destruían todas las imágenes, porque decían que eso era como alabar a seres humanos, en vez de a Dios.
01:42
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y bueno pues se extendió por todo Oriente, porque estamos hablando de un hombre de origen Oriental. Y él todo lo contrario, él defendió el culto también a las imágenes. Y fue declarado, no por esto, sino porque ... y explicó la Teología, Doctor de la Iglesia. Por tanto Pastor y Doctor de la Iglesia. Vamos por lo tanto a Celebrar por una parte la Palabra de Dios que nos habla de este tiempo de Adviento. Y también de este Monje que fue capaz de llevar la Palabra de Dios desde su propio Monasterio a toda la Iglesia Oriental. Comenzamos estos Sagrados Misterios pidiendo perdón al Señor por nuestros pecados.
02:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Tú que viniste al mundo
para salvarnos.
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que nos visitas continuamente
con la gracia de tu Espíritu.
℣. Cristo, Ten Piedad
℟. Cristo, Ten Piedad
℣. Tú que vendrás un día a
juzgar nuestras Obras.
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
03:14
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna
℟. Amen.
03:25
Rvrndo.: D. José Blanco:
Oremos.
Te rogamos Señor que nos ayude
en las Oraciones del Presbítero
San Juan Damasceno para que la
Fe verdadera que tan admirablemente
enseñó sea siempre nuestra luz
y nuestra fuerza
Por Nuestro Señor Jesucristo
Tu Hijo, que Vive y Reina Contigo
en la Unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los Siglos de los Siglos
℟. Amen.
04:01
Lectora de la Primera Lectura:
Lectura del libro de Isaías 11, 1-10 1ª lectura: Sobre él se posará el espíritu del Señor.
04:03
Lectora de la Primera Lectura: - Aquel día, brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago.
Sobre él se posará el espíritu del Señor: espíritu de sabiduría y entendimiento, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor del Señor.
Lo inspirará el temor del Señor.
No juzgará por apariencias ni sentenciará de oídas; juzgará a los pobres con justicia, sentenciará con rectitud a los sencillos de la tierra; pero golpeará al violento con la vara de su boca, y y con el soplo de sus labios hará morir al malvado.
La justicia será ceñidor de sus caderas, y la lealtad, cinturón de sus caderas.
04:51
Lectora de la Primera Lectura: - Habitará el lobo con el cordero, el leopardo se tumbará con el cabrito, el ternero y el león pacerán juntos: un muchacho será su pastor.
La vaca pastará con el oso, sus crías se tumbarán juntas; el león como el buey comerá paja.
El niño de pecho retoza junto al escondrijo de la serpiente, y el recién destetado extiende la mano hacia la madriguera del áspid.
Nadie causará daño ni estrago por todo mi monte santo: porque está lleno el país del conocimiento del Señor, como las aguas colman el mar.
Aquel día, la raíz de Jesé será elevada como enseña de los pueblos: se volverán hacia ella las naciones y será gloriosa su morada.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
05:44
Lectora de los Salmos:
Salmo: Sal 84, 2-4. 5-6. 7-8 En sus días florezca la justicia y la paz abunde eternamente.
05:52
Lectora de los Salmos:
℣. En sus días florezca la justicia
y la paz abunde eternamente.
℟. En sus días florezca la justicia
y la paz abunde eternamente.
℣. Dios mío confía tu juicio al rey
tu justicia al hijo de reyes
para que riga a tu pueblo con
justicia a tus humildes con
rectitud. ℟.
℣. En sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna
domine de mar a mar del gran
río al confín de la tierra. ℟.
℣. Él librará al pobre que clamaba
al afligido que no tenía protector
Él se apiadará del pobre y del
indigente y salvará la vida
de los pobres. ℟.
℣. Que su nombre sea eterno
y su fama dure como el sol, Él sea
la bendición de todos los pueblos
y lo proclamen dichoso todas las
razas de la tierra. ℟.
07:02
Rvrndo.: D. José Blanco:
Aleluya xxx Mirad, el Señor llega con su poder e iluminará los ojos de sus siervos.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Mirad, el Señor llega con su poder
e iluminará los ojos de sus siervos. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
07:42
Rvrndo.: D. José Blanco:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Lucas 10, 21-24 Evangelio: Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo.
07:41
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Lucas
℟. Gloria a ti, Señor
07:52
Rvrndo.: D. José Blanco: - En aquella hora Jesús se lleno de alegría en el Espíritu Santo y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así te ha parecido bien.
Todo me lo ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar».
Y volviéndose a sus discípulos, les dijo aparte:
«¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús
HOMILIA
08:57
Rvrndo.: D. José Blanco:
Sentaos, en estos días de Adviento, estamos escuchando como 1ª Lectura al Profeta Isaías. El Profeta Isaías que como con una gran sensibilidad, quiere transmitir y poético además. Quiere transmitir, a los Lectores, a los oyentes, que llegará ese Tiempo Mesiánico. Ahora estamos en un mundo distinto, diferente, difícil. Pero llegará el Tiempo del Mesías y será un Tiempo Nuevo. Es cuando florecerá la justicia, porque Él nos la traerá. Y es cuando como un nuevo Paraíso, una Nueva Creación volverá a ser una realidad entre nosotros.
09:57
Rvrndo.: D. José Blanco:
La Primera parte de la Lectura de hoy brotará un renuevo del tronco de Jesé. Como sabéis Jesé, es el padre de David y el Mesías es el hijo de David. De su raíz florecerá un vástago, sobre Él se posará el Espíritu del Señor. Es importante que sepamos que en la era Mesiánica, en la época Mesiánica ese Mesías poseerá el Espíritu del Señor. Y por eso precisamente nos traerá la justicia. Sobre Él se posará el Espíritu del Señor, Espíritu de Sabiduría y Entendimiento, de Consejo y Fortaleza, de Ciencia y Temor del Señor.
10:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Es lo que hará, ese Mesías no juzgará por apariencias, ni sentenciara de oídas. Juzgará a los pobres con justicia. Esa es la era que el Profeta Isaías esperaba cuando llegara el Mesías. Nosotros ya hemos conocido el tiempo del Mesías. Nosotros ya hemos vivido y estamos viviendo ese tiempo que nos ha traído el Mesías, que es tiempo de justicia. Y le pide también a su Iglesia, que somos nosotros, que también Obremos y Vivamos en la justicia. El Profeta como os decía hace un momento nos habla como de una Nueva Creación, de un nuevo Paraíso.
11:41
Rvrndo.: D. José Blanco:
Habitará el lobo con el cordero, el leopardo se tumbara con el cabrito, el ternero y el león pasarán juntos un muchacho será su Pastor. Y otro cuarteto a continuación nos viene a decir lo mismo, la vaca pastará con el oso, etcétera. Pero termina esos dos cuartetos hablándonos de ese nuevo Paraíso. Termina diciendo eso, que un muchacho los Pastoreará. Y aquí también nos dice lo mismo, está lleno el país del conocimiento del Señor. Aquel día la raíz de Hesse será elevada como enseña de los pueblos, como bandera de los pueblos. Ese será el Mesías, la bandera de los pueblos, que nos habla de justicia, nos habla de paz.
12:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Se volverán hacia ella, hacia esa figura, las naciones y será gloriosa su morada. Qué palabras tan bonitas, del Profeta Isaías para hablarnos del Tiempo de Jesús, del Tiempo del Mesías. Y es que es verdad, Él nos trae como esa Nueva Creación como ese hombre nuevo. Que nos ofrece Él siempre fruto del amor, de la justicia y de la paz. Y hermosas también son las palabras del Evangelista San Lucas, que hoy hemos leído. Porque empieza diciendo: «Jesús se llenó de alegría en el Espíritu Santo». Él posee el Espíritu Santo y eso le da esa alegría de transmitir y de comunicar la Voluntad del Padre.
13:45
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y esa alegría se convierte en una Acción de Gracias. «Te doy gracias Padre, Señor del Cielo y de la Tierra porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y las ha revelado a los pequeños». Es que Jesús hace una opción clara, por los pequeños, por los sencillos y nos invita a nosotros, también a ser sencillos. No los sabios y entendidos, que son generalmente autosuficientes, que creen que lo saben todo. El habla de los sencillos como aquellos que abren su corazón al Misterio de Dios.
14:36
Rvrndo.: D. José Blanco:
Que se reconocen pequeños, indigentes, necesitados y por lo tanto abren su corazón a Dios al Misterio de Dios diciendo: «en tus manos me pongo, yo no sé, no tengo fuerzas suficientes dame tu gracia y ofréceme tu salvación». Y por eso termina el Evangelio de hoy diciendo a los Discípulos: «bienaventurados los ojos que ven, lo que vosotros veis. Porque os digo que muchos Profetas y Reyes», estamos hablando o hace referencia al Antiguo Testamento, Profetas y Reyes que hablaban de la Venida del Mesías pero que no llegaron a conocer la Venida del Mesías.
15:29
Rvrndo.: D. José Blanco:
Hasta el propio Profeta Isaías que hemos leído hoy, nos habla de un tiempo futuro. Él no conoció al Mesías, sin embargo, el Mesías que está aquí en medio de vosotros. Dice muchos Profetas y Reyes quisieron ver lo que vosotros veis y no lo vieron. Oír lo que vosotros oís y no lo oyeron. Pero vosotros sí, vosotros tenéis en medio de vosotros al Hijo del Hombre, al Mesías. El que os trae la salvación, el que es el constructor de la paz y de la justicia. Y a nosotros nos deja, ese legado. Nos deja ese Testamento, de vosotros, mi Iglesia, mis Discípulos.
16:18
Rvrndo.: D. José Blanco:
También sepáis vivir según la justicia, según la paz y con la ley del amor sobre todo. De esta manera, nosotros también podemos ver lo que nuestros antepasados no vieron y oír lo que nuestros antepasados no oyeron. Nosotros sí lo hemos visto, nosotros sí lo hemos oído. El Mesías, el Señor está aquí en medio de nosotros. Y Él se queda, para que al Celebrar como cada día lo hacemos, la Eucaristía. Él siga presente en medio de nosotros y nos invite, nos invita cada día a la sencillez. A vivir de la justicia, de la paz y del amor y a transmitirlo al mundo en que vivimos.
17:08
Rvrndo.: D. José Blanco:
Un mundo necesitado cada vez más, precisamente de eso, de amor, de justicia, de paz. Que nosotros seamos capaces de vivirlo en la Eucaristía y de transmitirlo luego en la calle. En la Familia, en las Relaciones Humanas, donde estemos, transmitir ese amor que Jesús nos ha traído. Pues vamos a pedírselo así al Señor y que en este Tiempo de Adviento donde vamos a actualizar una vez más, su Nacimiento, su Llegada. Que sea para nosotros como un aliciente, un aliento para ser Testigos de su Amor, en el mundo en que vivimos. Vamos a pedírselo así al Señor.
17:53
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Levantemos hermanos nuestra alma
al Señor confiemosle nuestras peticiones
pues los que esperan en Él
no quedan nunca defraudados.
PETICIONES
18:19
PETICIONES DE LOS FIELES:
℣. Para que la Venida de Cristo
sea siempre el único fundamento
de la esperanza de la Iglesia.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que todos los hombres
superen la tentación de creer
que con sus solas fuerzas
pueden encontrar el sentido
de la propia vida.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los que tienen dificultades
en caer, en crecer, creer, encuentran
en la fe de los Cristianos un
camino que les prepare a
la Venida del Señor.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los enfermos, sus parientes
y cuidadores para que el Señor
les colme de paz, bendiciones
y cure sus heridas.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que todos nosotros nos
convenzamos de que tenemos
necesidad de una conversión
continua.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
19:09
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Oh Dios Todopoderoso y Eterno
que nos manda a preparar el
camino a Cristo el Señor escucha
nuestras Oraciones y haz que
recibamos dignamente a Tu hijo
que contigo vive y reina
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
20:24
Rvrndo.: D. José Blanco:
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este pan, fruto de la tierra
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros pan de vida.
Bendito seas por siempre, Señor.
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este vino, fruto de la vid
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros bebida de salvación.
Bendito seas por siempre, Señor.
21:09
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Oremos, hermanos,
para que este sacrificio, mío y vuestro,
sea agradable a Dios, Padre todopoderoso.
℟. El Señor reciba de tus manos este sacrificio,
para alabanza y gloria de su nombre,
para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.
℟. Amen.
21:25
Rvrndo.: D. José Blanco:
Que los ruegos y ofrendas de
nuestra pobreza te conmuevan
Señor y al vernos desvalidos
y sin méritos propios acude
compasivo en nuestra ayuda
por Jesucristo nuestro Señor.
℟. Amen.
21:40
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
21:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracia siempre
y en todo lugar Señor Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
por Cristo Señor nuestro quien
al venir por vez primera en la
humildad de nuestra carne realizó
el plan de redención trazado
desde antiguo y nos abrió el
camino de la salvación eterna
para que cuando venga de nuevo
en la Majestad de Su Gloria
revelando así la plenitud de Su
Obra podamos recibir los bienes
prometidos que ahora en vigilante
espera confiamos a alcanzar por
eso con los Ángeles y Arcángeles
Tronos y Dominaciones y con todos
los Coros Celestiales cantamos
sin cesar el Himno de tu Gloria:
22:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del Universo.
Llenos están el cielo
y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene
en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.
23:07
Rvrndo.: D. José Blanco:
Santo eres en verdad, Señor,
fuente de toda santidad;
por eso te pedimos
que santifiques estos dones
con la efusión de tu Espíritu,
de manera que se conviertan
para nosotros en el Cuerpo y en
la Sangre de Jesucristo,
nuestro Señor.
El cual, cuando iba
a ser entregado a su Pasión,
voluntariamente aceptada,
tomó pan; dando gracias, lo
bendijo lo partió y lo dio a
sus discípulos diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE EL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
24:07
Rvrndo.: D. José Blanco:
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el caliz, y, dándote gracias de nuevo,
lo pasó a sus discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
24:54
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Y éste es el Sacramento de nuestra Fe:
℟. Anunciamos tu muerte,
proclamamos tu resurrección.
!Ven, Señor Jesús!
25:00
Rvrndo.: D. José Blanco:
Así, pues, Padre,
al celebrar ahora el memorial
de la muerte y resurrección de Tu Hijo,
te ofrecemos el pan de vida
y el cáliz de salvación,
y te damos gracias porque nos haces dignos
de estar aquí en tu presencia.
Celebrando esta Eucarístia.
Te pedimos, humildemente,
que el Espíritu Santo congregue en la unidad
a cuantos participamos
del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
25:31
Rvrndo.: D. José Blanco:
Acuérdate, Señor, de tu Iglesia
extendida por toda la tierra;
y con el Papa Francisco,
con nuestro Obispo Carlos
y todos los pastores
que cuidan de tu pueblo,
llévala a su perfección
por la caridad.
Acuérdate también de nuestros hermanos
que durmieron
en la esperanza de la resurrección,
recordamos especialmente
en esta Eucaristia a nuestros hermanos
.. y .. a ellos y a cuantos murieron
en tu misericordia;
admítelos a contemplar la luz de tu rostro.
Ten misericordia de todos nosotros,
y así, con María, la Virgen, Madre de Dios,
su esposo San José
los Apostoles, San Juan Damascenos,
y cuantos vivieron
en tu amistad a través de los
tiempos, merezcamos, por tu
Hijo Jesucristo, compartir la vida eterna
y cantar tus alabanzas.
26:39
Rvrndo.: D. José Blanco:
Por Cristo, con Él y en Él,
a ti, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
26:55
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y ahora todos juntos como hermanos, con sencillez como nos decía el Evangelio. Nos ponemos en manos de Dios para agradecerle todo lo que nos está dando continuamente. Y sobre todo por la Persona de Jesucristo, que nos ha traído la salvación. Vamos a hacerlo con las Palabras que el propio Jesús nos enseñó:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
27:50
Rvrndo.: D. José Blanco:
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
Tuyo es el reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.
28:15
Rvrndo.: D. José Blanco:
Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles:
"La paz os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta nuestros pecados,
sino la fe de tu Iglesia
y, conforme a tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
28:36
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. La paz del Señor sea siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Demonos la paz como hermanos
℟. La Paz esté contigo
28:56
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. ten piedad de nosotros.
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. ten piedad de nosotros.
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. danos la paz.
29:27
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Éste es Jesucristo Nuestro Señor,
el Cordero de Dios que quita
el pecado del mundo.
Dichosos los invitados a esta cena.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
El Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo.
℟. Amen.
32:03
Rvrndo.: D. José Blanco:
Oremos.
hemos recibido Señor
los Sacramentos del Cielo
Celebrando la memoria de Tu
Santo San Juan damasceno
concédenos gozar en la
Eternidad de lo que hemos
Celebrado ya en este mundo
por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amen.
32:29
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor Esté Con Vosotros
℟. y Con Tu Espíritu
℣. La Bendición de Dios Todopoderoso
Padre, Hijo y Espíritu Santo
descienda sobre vosotros
32:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Podéis ir en Paz.
℟. Demos Gracias al Señor.
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. En el Nombre del Padre y del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen.
00:37
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. La Gracia de Nuestro Señor Jesucristo,
el Amor del Padre y la Comunión
del Espíritu Santo,
estén con Todos Vosotros.
00:48
Rvrndo.: D. José Blanco:
Hermanos buenos días sed bienvenidos a la Celebración de la Eucaristía de este martes de la «1ª Semana de Adviento». Estamos en Tiempo de Espera en tiempo de Esperanza. También hoy día «04 de diciembre es la Fiesta de San Juan Damasceno». Bueno Damascenos porque había nacido en Damasco. Fue un Monje del siglo VII segunda mitad del siglo VIII y primera mitad del siglo VIII. Fue un Monje en aquellos tiempos se extendió mucho, le llamaban la «Herejía Iconoclasta». Es decir, que destruían todas las imágenes, porque decían que eso era como alabar a seres humanos, en vez de a Dios.
01:42
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y bueno pues se extendió por todo Oriente, porque estamos hablando de un hombre de origen Oriental. Y él todo lo contrario, él defendió el culto también a las imágenes. Y fue declarado, no por esto, sino porque ... y explicó la Teología, Doctor de la Iglesia. Por tanto Pastor y Doctor de la Iglesia. Vamos por lo tanto a Celebrar por una parte la Palabra de Dios que nos habla de este tiempo de Adviento. Y también de este Monje que fue capaz de llevar la Palabra de Dios desde su propio Monasterio a toda la Iglesia Oriental. Comenzamos estos Sagrados Misterios pidiendo perdón al Señor por nuestros pecados.
02:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Tú que viniste al mundo
para salvarnos.
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
℣. Tú que nos visitas continuamente
con la gracia de tu Espíritu.
℣. Cristo, Ten Piedad
℟. Cristo, Ten Piedad
℣. Tú que vendrás un día a
juzgar nuestras Obras.
℣. Señor, Ten Piedad
℟. Señor, Ten Piedad
03:14
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Dios todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la Vida Eterna
℟. Amen.
03:25
Rvrndo.: D. José Blanco:
Oremos.
Te rogamos Señor que nos ayude
en las Oraciones del Presbítero
San Juan Damasceno para que la
Fe verdadera que tan admirablemente
enseñó sea siempre nuestra luz
y nuestra fuerza
Por Nuestro Señor Jesucristo
Tu Hijo, que Vive y Reina Contigo
en la Unidad del Espíritu Santo
y es Dios por los Siglos de los Siglos
℟. Amen.
04:01
Lectora de la Primera Lectura:
Lectura del libro de Isaías 11, 1-10 1ª lectura: Sobre él se posará el espíritu del Señor.
04:03
Lectora de la Primera Lectura: - Aquel día, brotará un renuevo del tronco de Jesé, y de su raíz florecerá un vástago.
Sobre él se posará el espíritu del Señor: espíritu de sabiduría y entendimiento, espíritu de consejo y fortaleza, espíritu de ciencia y temor del Señor.
Lo inspirará el temor del Señor.
No juzgará por apariencias ni sentenciará de oídas; juzgará a los pobres con justicia, sentenciará con rectitud a los sencillos de la tierra; pero golpeará al violento con la vara de su boca, y y con el soplo de sus labios hará morir al malvado.
La justicia será ceñidor de sus caderas, y la lealtad, cinturón de sus caderas.
04:51
Lectora de la Primera Lectura: - Habitará el lobo con el cordero, el leopardo se tumbará con el cabrito, el ternero y el león pacerán juntos: un muchacho será su pastor.
La vaca pastará con el oso, sus crías se tumbarán juntas; el león como el buey comerá paja.
El niño de pecho retoza junto al escondrijo de la serpiente, y el recién destetado extiende la mano hacia la madriguera del áspid.
Nadie causará daño ni estrago por todo mi monte santo: porque está lleno el país del conocimiento del Señor, como las aguas colman el mar.
Aquel día, la raíz de Jesé será elevada como enseña de los pueblos: se volverán hacia ella las naciones y será gloriosa su morada.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
05:44
Lectora de los Salmos:
Salmo: Sal 84, 2-4. 5-6. 7-8 En sus días florezca la justicia y la paz abunde eternamente.
05:52
Lectora de los Salmos:
℣. En sus días florezca la justicia
y la paz abunde eternamente.
℟. En sus días florezca la justicia
y la paz abunde eternamente.
℣. Dios mío confía tu juicio al rey
tu justicia al hijo de reyes
para que riga a tu pueblo con
justicia a tus humildes con
rectitud. ℟.
℣. En sus días florezca la justicia
y la paz hasta que falte la luna
domine de mar a mar del gran
río al confín de la tierra. ℟.
℣. Él librará al pobre que clamaba
al afligido que no tenía protector
Él se apiadará del pobre y del
indigente y salvará la vida
de los pobres. ℟.
℣. Que su nombre sea eterno
y su fama dure como el sol, Él sea
la bendición de todos los pueblos
y lo proclamen dichoso todas las
razas de la tierra. ℟.
07:02
Rvrndo.: D. José Blanco:
Aleluya xxx Mirad, el Señor llega con su poder e iluminará los ojos de sus siervos.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Mirad, el Señor llega con su poder
e iluminará los ojos de sus siervos. ℟.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
07:42
Rvrndo.: D. José Blanco:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Lucas 10, 21-24 Evangelio: Jesús, lleno de la alegría en el Espíritu Santo.
07:41
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros
℟. y con tu espíritu
℣. Evangelio de nuestro Señor Jesucristo según San Lucas
℟. Gloria a ti, Señor
07:52
Rvrndo.: D. José Blanco: - En aquella hora Jesús se lleno de alegría en el Espíritu Santo y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor del cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos, y las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, porque así te ha parecido bien.
Todo me lo ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce quién es el Hijo sino el Padre; ni quién es el Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiere revelar».
Y volviéndose a sus discípulos, les dijo aparte:
«¡Bienaventurados los ojos que ven lo que vosotros veis! Porque os digo que muchos profetas y reyes quisieron ver lo que vosotros veis, y no lo vieron; y oír lo que vosotros oís, y no lo oyeron».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús
HOMILIA
08:57
Rvrndo.: D. José Blanco:
Sentaos, en estos días de Adviento, estamos escuchando como 1ª Lectura al Profeta Isaías. El Profeta Isaías que como con una gran sensibilidad, quiere transmitir y poético además. Quiere transmitir, a los Lectores, a los oyentes, que llegará ese Tiempo Mesiánico. Ahora estamos en un mundo distinto, diferente, difícil. Pero llegará el Tiempo del Mesías y será un Tiempo Nuevo. Es cuando florecerá la justicia, porque Él nos la traerá. Y es cuando como un nuevo Paraíso, una Nueva Creación volverá a ser una realidad entre nosotros.
09:57
Rvrndo.: D. José Blanco:
La Primera parte de la Lectura de hoy brotará un renuevo del tronco de Jesé. Como sabéis Jesé, es el padre de David y el Mesías es el hijo de David. De su raíz florecerá un vástago, sobre Él se posará el Espíritu del Señor. Es importante que sepamos que en la era Mesiánica, en la época Mesiánica ese Mesías poseerá el Espíritu del Señor. Y por eso precisamente nos traerá la justicia. Sobre Él se posará el Espíritu del Señor, Espíritu de Sabiduría y Entendimiento, de Consejo y Fortaleza, de Ciencia y Temor del Señor.
10:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Es lo que hará, ese Mesías no juzgará por apariencias, ni sentenciara de oídas. Juzgará a los pobres con justicia. Esa es la era que el Profeta Isaías esperaba cuando llegara el Mesías. Nosotros ya hemos conocido el tiempo del Mesías. Nosotros ya hemos vivido y estamos viviendo ese tiempo que nos ha traído el Mesías, que es tiempo de justicia. Y le pide también a su Iglesia, que somos nosotros, que también Obremos y Vivamos en la justicia. El Profeta como os decía hace un momento nos habla como de una Nueva Creación, de un nuevo Paraíso.
11:41
Rvrndo.: D. José Blanco:
Habitará el lobo con el cordero, el leopardo se tumbara con el cabrito, el ternero y el león pasarán juntos un muchacho será su Pastor. Y otro cuarteto a continuación nos viene a decir lo mismo, la vaca pastará con el oso, etcétera. Pero termina esos dos cuartetos hablándonos de ese nuevo Paraíso. Termina diciendo eso, que un muchacho los Pastoreará. Y aquí también nos dice lo mismo, está lleno el país del conocimiento del Señor. Aquel día la raíz de Hesse será elevada como enseña de los pueblos, como bandera de los pueblos. Ese será el Mesías, la bandera de los pueblos, que nos habla de justicia, nos habla de paz.
12:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Se volverán hacia ella, hacia esa figura, las naciones y será gloriosa su morada. Qué palabras tan bonitas, del Profeta Isaías para hablarnos del Tiempo de Jesús, del Tiempo del Mesías. Y es que es verdad, Él nos trae como esa Nueva Creación como ese hombre nuevo. Que nos ofrece Él siempre fruto del amor, de la justicia y de la paz. Y hermosas también son las palabras del Evangelista San Lucas, que hoy hemos leído. Porque empieza diciendo: «Jesús se llenó de alegría en el Espíritu Santo». Él posee el Espíritu Santo y eso le da esa alegría de transmitir y de comunicar la Voluntad del Padre.
13:45
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y esa alegría se convierte en una Acción de Gracias. «Te doy gracias Padre, Señor del Cielo y de la Tierra porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y las ha revelado a los pequeños». Es que Jesús hace una opción clara, por los pequeños, por los sencillos y nos invita a nosotros, también a ser sencillos. No los sabios y entendidos, que son generalmente autosuficientes, que creen que lo saben todo. El habla de los sencillos como aquellos que abren su corazón al Misterio de Dios.
14:36
Rvrndo.: D. José Blanco:
Que se reconocen pequeños, indigentes, necesitados y por lo tanto abren su corazón a Dios al Misterio de Dios diciendo: «en tus manos me pongo, yo no sé, no tengo fuerzas suficientes dame tu gracia y ofréceme tu salvación». Y por eso termina el Evangelio de hoy diciendo a los Discípulos: «bienaventurados los ojos que ven, lo que vosotros veis. Porque os digo que muchos Profetas y Reyes», estamos hablando o hace referencia al Antiguo Testamento, Profetas y Reyes que hablaban de la Venida del Mesías pero que no llegaron a conocer la Venida del Mesías.
15:29
Rvrndo.: D. José Blanco:
Hasta el propio Profeta Isaías que hemos leído hoy, nos habla de un tiempo futuro. Él no conoció al Mesías, sin embargo, el Mesías que está aquí en medio de vosotros. Dice muchos Profetas y Reyes quisieron ver lo que vosotros veis y no lo vieron. Oír lo que vosotros oís y no lo oyeron. Pero vosotros sí, vosotros tenéis en medio de vosotros al Hijo del Hombre, al Mesías. El que os trae la salvación, el que es el constructor de la paz y de la justicia. Y a nosotros nos deja, ese legado. Nos deja ese Testamento, de vosotros, mi Iglesia, mis Discípulos.
16:18
Rvrndo.: D. José Blanco:
También sepáis vivir según la justicia, según la paz y con la ley del amor sobre todo. De esta manera, nosotros también podemos ver lo que nuestros antepasados no vieron y oír lo que nuestros antepasados no oyeron. Nosotros sí lo hemos visto, nosotros sí lo hemos oído. El Mesías, el Señor está aquí en medio de nosotros. Y Él se queda, para que al Celebrar como cada día lo hacemos, la Eucaristía. Él siga presente en medio de nosotros y nos invite, nos invita cada día a la sencillez. A vivir de la justicia, de la paz y del amor y a transmitirlo al mundo en que vivimos.
17:08
Rvrndo.: D. José Blanco:
Un mundo necesitado cada vez más, precisamente de eso, de amor, de justicia, de paz. Que nosotros seamos capaces de vivirlo en la Eucaristía y de transmitirlo luego en la calle. En la Familia, en las Relaciones Humanas, donde estemos, transmitir ese amor que Jesús nos ha traído. Pues vamos a pedírselo así al Señor y que en este Tiempo de Adviento donde vamos a actualizar una vez más, su Nacimiento, su Llegada. Que sea para nosotros como un aliciente, un aliento para ser Testigos de su Amor, en el mundo en que vivimos. Vamos a pedírselo así al Señor.
17:53
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Levantemos hermanos nuestra alma
al Señor confiemosle nuestras peticiones
pues los que esperan en Él
no quedan nunca defraudados.
PETICIONES
18:19
PETICIONES DE LOS FIELES:
℣. Para que la Venida de Cristo
sea siempre el único fundamento
de la esperanza de la Iglesia.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que todos los hombres
superen la tentación de creer
que con sus solas fuerzas
pueden encontrar el sentido
de la propia vida.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los que tienen dificultades
en caer, en crecer, creer, encuentran
en la fe de los Cristianos un
camino que les prepare a
la Venida del Señor.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Por los enfermos, sus parientes
y cuidadores para que el Señor
les colme de paz, bendiciones
y cure sus heridas.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
℣. Para que todos nosotros nos
convenzamos de que tenemos
necesidad de una conversión
continua.
℣. Rogemos al Señor
℟. Te Rogamos Oyenos.
19:09
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Oh Dios Todopoderoso y Eterno
que nos manda a preparar el
camino a Cristo el Señor escucha
nuestras Oraciones y haz que
recibamos dignamente a Tu hijo
que contigo vive y reina
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
20:24
Rvrndo.: D. José Blanco:
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este pan, fruto de la tierra
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros pan de vida.
Bendito seas por siempre, Señor.
Bendito seas, Señor,
Dios del universo,
por este vino, fruto de la vid
y del trabajo del hombre,
que recibimos de tu generosidad
y ahora te presentamos;
él será para nosotros bebida de salvación.
Bendito seas por siempre, Señor.
21:09
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Oremos, hermanos,
para que este sacrificio, mío y vuestro,
sea agradable a Dios, Padre todopoderoso.
℟. El Señor reciba de tus manos este sacrificio,
para alabanza y gloria de su nombre,
para nuestro bien y el de toda su santa Iglesia.
℟. Amen.
21:25
Rvrndo.: D. José Blanco:
Que los ruegos y ofrendas de
nuestra pobreza te conmuevan
Señor y al vernos desvalidos
y sin méritos propios acude
compasivo en nuestra ayuda
por Jesucristo nuestro Señor.
℟. Amen.
21:40
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor, nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
21:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracia siempre
y en todo lugar Señor Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
por Cristo Señor nuestro quien
al venir por vez primera en la
humildad de nuestra carne realizó
el plan de redención trazado
desde antiguo y nos abrió el
camino de la salvación eterna
para que cuando venga de nuevo
en la Majestad de Su Gloria
revelando así la plenitud de Su
Obra podamos recibir los bienes
prometidos que ahora en vigilante
espera confiamos a alcanzar por
eso con los Ángeles y Arcángeles
Tronos y Dominaciones y con todos
los Coros Celestiales cantamos
sin cesar el Himno de tu Gloria:
22:52
Rvrndo.: D. José Blanco:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del Universo.
Llenos están el cielo
y la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene
en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.
23:07
Rvrndo.: D. José Blanco:
Santo eres en verdad, Señor,
fuente de toda santidad;
por eso te pedimos
que santifiques estos dones
con la efusión de tu Espíritu,
de manera que se conviertan
para nosotros en el Cuerpo y en
la Sangre de Jesucristo,
nuestro Señor.
El cual, cuando iba
a ser entregado a su Pasión,
voluntariamente aceptada,
tomó pan; dando gracias, lo
bendijo lo partió y lo dio a
sus discípulos diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE EL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
24:07
Rvrndo.: D. José Blanco:
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el caliz, y, dándote gracias de nuevo,
lo pasó a sus discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
24:54
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Y éste es el Sacramento de nuestra Fe:
℟. Anunciamos tu muerte,
proclamamos tu resurrección.
!Ven, Señor Jesús!
25:00
Rvrndo.: D. José Blanco:
Así, pues, Padre,
al celebrar ahora el memorial
de la muerte y resurrección de Tu Hijo,
te ofrecemos el pan de vida
y el cáliz de salvación,
y te damos gracias porque nos haces dignos
de estar aquí en tu presencia.
Celebrando esta Eucarístia.
Te pedimos, humildemente,
que el Espíritu Santo congregue en la unidad
a cuantos participamos
del Cuerpo y la Sangre de Cristo.
25:31
Rvrndo.: D. José Blanco:
Acuérdate, Señor, de tu Iglesia
extendida por toda la tierra;
y con el Papa Francisco,
con nuestro Obispo Carlos
y todos los pastores
que cuidan de tu pueblo,
llévala a su perfección
por la caridad.
Acuérdate también de nuestros hermanos
que durmieron
en la esperanza de la resurrección,
recordamos especialmente
en esta Eucaristia a nuestros hermanos
.. y .. a ellos y a cuantos murieron
en tu misericordia;
admítelos a contemplar la luz de tu rostro.
Ten misericordia de todos nosotros,
y así, con María, la Virgen, Madre de Dios,
su esposo San José
los Apostoles, San Juan Damascenos,
y cuantos vivieron
en tu amistad a través de los
tiempos, merezcamos, por tu
Hijo Jesucristo, compartir la vida eterna
y cantar tus alabanzas.
26:39
Rvrndo.: D. José Blanco:
Por Cristo, con Él y en Él,
a ti, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
26:55
Rvrndo.: D. José Blanco:
Y ahora todos juntos como hermanos, con sencillez como nos decía el Evangelio. Nos ponemos en manos de Dios para agradecerle todo lo que nos está dando continuamente. Y sobre todo por la Persona de Jesucristo, que nos ha traído la salvación. Vamos a hacerlo con las Palabras que el propio Jesús nos enseñó:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
27:50
Rvrndo.: D. José Blanco:
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
Tuyo es el reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.
28:15
Rvrndo.: D. José Blanco:
Señor Jesucristo, que dijiste a tus apóstoles:
"La paz os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta nuestros pecados,
sino la fe de tu Iglesia
y, conforme a tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
28:36
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. La paz del Señor sea siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Demonos la paz como hermanos
℟. La Paz esté contigo
28:56
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. ten piedad de nosotros.
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. ten piedad de nosotros.
℣. Cordero de Dios, que quitas
el pecado del mundo,
℟. danos la paz.
29:27
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. Éste es Jesucristo Nuestro Señor,
el Cordero de Dios que quita
el pecado del mundo.
Dichosos los invitados a esta cena.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
El Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo.
℟. Amen.
32:03
Rvrndo.: D. José Blanco:
Oremos.
hemos recibido Señor
los Sacramentos del Cielo
Celebrando la memoria de Tu
Santo San Juan damasceno
concédenos gozar en la
Eternidad de lo que hemos
Celebrado ya en este mundo
por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amen.
32:29
Rvrndo.: D. José Blanco:
℣. El Señor Esté Con Vosotros
℟. y Con Tu Espíritu
℣. La Bendición de Dios Todopoderoso
Padre, Hijo y Espíritu Santo
descienda sobre vosotros
32:44
Rvrndo.: D. José Blanco:
Podéis ir en Paz.
℟. Demos Gracias al Señor.
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