15.10.2020 - SOLEMNE PONTIFICAL RTCYL - Fiesta de Santa Teresa de Jesus, Catedral de Ávila
Catolico En Vivo
15 de octubre de 2020. - (Catolico En Vivo)
8 TV ha trasmitido el Solemne Pontifical de la Fiesta de Santa Teresa de Jesús desde Ávila. Presidió Monseñor Jose María Gil Tamayo,
Obispo de Ávila.
Inicio de la Santa Misa
00:00
Monseñor Jose María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
(habla el Obispo)...de la Diócesis de Ávila, de su ciudad, a que el Papa nos visite. Visitar España, si las circunstancias lo permiten, sigue en pie la invitación a visitar la Ciudad de Santa Teresa de Jesús. Quiero que le haga llegar especialmente esta invitación, que me hago eco y creo que también de las Autoridades y de todo, el Pueblo de Ávila, no sólo de la Iglesia que aquí Peregrina. Quiero asegurarle también señor Nuncio, la Oración de la Vida Contemplativa, de los Monasterios de los que esta Diócesis es rica. Son 14 Monasterios de Vida Contemplativa que Rezan y vamos a Rezar de manera especial, por su Ministerio Apostólico en España.
00:46
Monseñor Jose María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
Gracias por su presencia, cuente con nuestra Oración y nuestro cariño.
01:09
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Hermanos para Celebrar dignamente
estos Sagrados Misterios
en esta Solemnidad
aquí en Avila de la Santa
reconozcamos nuestros pecados.
Monseñor Jose María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
(habla el Obispo)...de la Diócesis de Ávila, de su ciudad, a que el Papa nos visite. Visitar España, si las circunstancias lo permiten, sigue en pie la invitación a visitar la Ciudad de Santa Teresa de Jesús. Quiero que le haga llegar especialmente esta invitación, que me hago eco y creo que también de las Autoridades y de todo, el Pueblo de Ávila, no sólo de la Iglesia que aquí Peregrina. Quiero asegurarle también señor Nuncio, la Oración de la Vida Contemplativa, de los Monasterios de los que esta Diócesis es rica. Son 14 Monasterios de Vida Contemplativa que Rezan y vamos a Rezar de manera especial, por su Ministerio Apostólico en España.
00:46
Monseñor Jose María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
Gracias por su presencia, cuente con nuestra Oración y nuestro cariño.
01:09
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Hermanos para Celebrar dignamente
estos Sagrados Misterios
en esta Solemnidad
aquí en Avila de la Santa
reconozcamos nuestros pecados.
Confiteor Deo...
01:30
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Confiteor Deo omnipotenti et Vobis, fratres,
quia peccavi nimis
cogitatione, verbo, opere et omissione:
mea culpa, mea culpa, mea maxima culpa.
Ideo precor beatam Mariam semper Virginem,
omnes Angelos et Sanctos,
et vos, fratres, orare pro me
ad Dominum Deum nostrum.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Misereatur nostri omnipotens Deus
et, dimissis peccatis nostris,
perducat nos ad vitam æternam.
℟. Amen.
01:30
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Confiteor Deo omnipotenti et Vobis, fratres,
quia peccavi nimis
cogitatione, verbo, opere et omissione:
mea culpa, mea culpa, mea maxima culpa.
Ideo precor beatam Mariam semper Virginem,
omnes Angelos et Sanctos,
et vos, fratres, orare pro me
ad Dominum Deum nostrum.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Misereatur nostri omnipotens Deus
et, dimissis peccatis nostris,
perducat nos ad vitam æternam.
℟. Amen.
Yo Confieso...
01:30
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen.
01:30
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen.
02:10
Coro de la Basílica de Ávila:
℣. Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie eléison.
℣. Christe, Christe eléison.
℟. Christe, Christe eléison.
℣. Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie eléison.
Coro de la Basílica de Ávila:
℣. Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie eléison.
℣. Christe, Christe eléison.
℟. Christe, Christe eléison.
℣. Kýrie, Kýrie eléison.
℟. Kýrie, Kýrie eléison.
02:10
Coro de la Basílica de Ávila:
℣. Señor, Ten Piedad.
℟. Señor, Ten Piedad.
℣. Cristo, Ten Piedad.
℟. Cristo, Ten Piedad.
℣. Señor, Ten Piedad.
℟. Señor, Ten Piedad.
Coro de la Basílica de Ávila:
℣. Señor, Ten Piedad.
℟. Señor, Ten Piedad.
℣. Cristo, Ten Piedad.
℟. Cristo, Ten Piedad.
℣. Señor, Ten Piedad.
℟. Señor, Ten Piedad.
Gloria en Latín
03:00
Monseñor Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Glória in excélsis Deo.
Coro de la Basílica de Ávila:
Glória, Glória, in excélsis Deo.
Et in terra pax hominíbus bonae voluntátis.
Laudámus te,
Benedícimus te,
Adorámus te,
Glorificámus te,
Grátias ágimus tibi propter
magnam glóriam tuam,
Dómine Deus, Rex caeléstis,
Deus Pater omnípotens.
Dómine Fili unigénite, Iesu Christe,
Dómine Deus, Agnus Dei, Fílius Patris,
Qui tollis peccáta mundi, miserére nobis.
Qui tollis peccáta mundi,
súscipe deprecatiónem nostram.
Qui sedes ad déxteram Patris, miserére nobis.
Quóniam tu solus Sanctus.
Tu solus Dóminus,
Tu solus Altíssimus, Iesu Christe.
Cum Sancto Spíritu in glória Dei Patris.
℟. Amén.
03:00
Monseñor Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Glória in excélsis Deo.
Coro de la Basílica de Ávila:
Glória, Glória, in excélsis Deo.
Et in terra pax hominíbus bonae voluntátis.
Laudámus te,
Benedícimus te,
Adorámus te,
Glorificámus te,
Grátias ágimus tibi propter
magnam glóriam tuam,
Dómine Deus, Rex caeléstis,
Deus Pater omnípotens.
Dómine Fili unigénite, Iesu Christe,
Dómine Deus, Agnus Dei, Fílius Patris,
Qui tollis peccáta mundi, miserére nobis.
Qui tollis peccáta mundi,
súscipe deprecatiónem nostram.
Qui sedes ad déxteram Patris, miserére nobis.
Quóniam tu solus Sanctus.
Tu solus Dóminus,
Tu solus Altíssimus, Iesu Christe.
Cum Sancto Spíritu in glória Dei Patris.
℟. Amén.
Gloria en Español
03:00
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Gloria a Dios en el cielo
Coro de la Basílica de Ávila:
Gloria, Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tu que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros.
Porque sólo tú eres Santo,
sólo tu Señor,
Sólo tú Altísimo Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
℟. Amén.
03:00
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Gloria a Dios en el cielo
Coro de la Basílica de Ávila:
Gloria, Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tu que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros.
Porque sólo tú eres Santo,
sólo tu Señor,
Sólo tú Altísimo Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre.
℟. Amén.
05:30
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Oremos.
Oh Dios que por Tu Espíritu
ha suscitado
la Santa Teresa de Jesús
para mostrar a la Iglesia
el Camino de la Perfección
concédenos alimentarnos
siempre de Su Celestial Doctrina
enciende en nosotros
el deseo de la verdadera Santidad.
Por Nuestro Señor Jesucristo, Tu Hijo
que Vive y Reina Contigo
en la Unidad del Espíritu Santo, y es Dios
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
LITURGÍA DE LA PALABRA
06:15
Primera Lectura:
Lectura del libro del Eclesiástico 15, 1-6 1ª lectura: Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia.
Así obra el que teme al Señor, el que observa la ley alcanza la sabiduría.
Ella le sale al encuentro como una madre y lo acoge como una joven esposa. Lo alimenta con pan de inteligencia y le da a beber agua de sabiduría.
Si se apoya en ella, no vacilará, si se aferra a ella, no quedará defraudado.
Ella lo ensalzará sobre sus compañeros y en medio de la asamblea le abrirá la boca.
Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia y lo revestirá con un vestido de gloria. Encontrará gozo y corona de júbilo, y un nombre eterno recibirá en herencia.
℣. Palabra de Dios - Verbum Dómini.
℟. Te Alabamos Señor - Deo grátias.
07:06
Lectura de los Salmos:
Salmo: Sal 88, 2-3. 6-7. 8-9. 16-17. 18-19 Cantaré eternamente las misericordias del Señor.
07:16
Lectura de los Salmos:
℣. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor.
℟. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor.
℣. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor,
anunciaré Tu fidelidad
por todas las edades.
Porque dijiste: «La misericordia
es un edificio eterno»,
más que el cielo
has afianzado Tu fidelidad. ℟.
℣. El cielo proclama tus maravillas,
Señor, y Tu fidelidad,
en la asamblea de los Santos.
¿Quién sobre las nubes
se compara a Dios?
¿Quién como el Señor
entre los seres divinos? ℟.
℣. Dios es temible
en el consejo de los Santos,
es grande y terrible
para toda Su Corte.
Señor del Universo,
¿quién como Tú?
El poder y la fidelidad
te rodean. ℟.
℣. Dichoso el pueblo
que sabe aclamarte:
caminará, oh Señor,
a la luz de Tu Rostro;
Tu Nombre es su gozo cada día,
Tu Justicia es su orgullo. ℟.
℣. Porque Tú eres su honor
y su fuerza, y con Tu favor
realzas nuestro poder.
Porque el Señor es nuestro escudo,
y el Santo de Israel nuestro Rey. ℟.
10:38
Segunda Lectura:
Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Romanos 2ª lectura: xxx
10:43
Segunda Lectura:
Hermanos, cuantos se dejan llevar por el Espíritu de Dios esos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido un espíritu de esclavitud para recaer en el temor. Sino que habéis recibido un Espíritu de hijos de adopción, en el que clamamos «Abba, Padre». Ese mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos, herederos de Dios y coherederos con Cristo. De modo, que si sufrimos con Él seremos también glorificados con Él. El Espíritu acude en ayuda de nuestra debilidad, pues nosotros no sabemos pedir como conviene.
11:39
Segunda Lectura:
Pero el Espíritu mismo, intercede por nosotros con gemidos inefables. Y el que escruta los corazones, sabe cuál es el deseo del Espíritu y que su Intercesión por los Santos es según Dios.
℣. Palabra de Dios - Verbum Dómini.
℟. Te Alabamos Señor - Deo grátias.
12:02
Aclamación del Evangelio
Aleluya Eclo 39, 10 Las naciones hablarán de su sabiduría, y la asamblea proclamará su alabanza.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Las naciones hablarán
de su sabiduría, y la asamblea
proclamará su alabanza.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
13:32
Lectura del Santo Evangelio:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Mateo 11, 25-30 Evangelio: Soy manso y humilde de corazón.
13:32
Lectura del Santo Evangelio:
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateo.
℟. Gloria a ti, Señor.
14:06
Lectura del Santo Evangelio
En aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús.
HOMILIA
15:50
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Excelencia Reverendísima Monseñor Jose María Gil Tamayo, Obispo de Ávila, Excelencia Reverendísima Monseñor Jesús García Burillo, Obispo Emérito de Ávila y Administrador Apostólico de Ciudad Rodrigo. Queridos Sacerdotes Concelebrantes, queridas Excelentísimas Autoridades, hermanos todos en Cristo. Con ocasión de mi llegada a España ya pronto hará un año, Monseñor Jose María, al expresarme su bienvenida, en nombre propio y de todos los Fieles, de esta querida y mundialmente famosísima Diócesis de Ávila. Me invitó ya a esta Celebración de Santa Teresa de Jesús. Gracias Don José María por ofrecerme esta ocasión, también para manifestar el aprecio que el Santo Padre, como el nuestro Obispo acaba de decir. El Papa Francisco tiene un gran amor por Santa Teresa de Jesús.
17:12
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Como también lo muestra, no solamente ayer, también en su Carta al Obispo de Ávila Monseñor Jesús en aquel tiempo, con ocasión de 500 Aniversario de su Nacimiento. Reconociendo que Teresa encendió en Ávila una ardiente luz renovadora, para el bien de toda la Iglesia en el mundo. En este día tan especial de Ávila, en circunstancias, podemos decir ¡que lástima!, en circunstancias muy difíciles, a causa de la Pandemia de la Covid-19. Quiero hacer llegar a todos, a todos los que están aquí presentes. A todos que participan a través la Televisión, de todos los Medios de Comunicación Social, les digo a todos, les expreso a todos, la cercanía del Santo Padre, es su bendición.
18:19
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Particularmente a cuando más sufren este mal, que acosa a todos, como a nuestro querido Obispo de Ávila. A cuantos han fallecido y a cuánto sufren la separación de sus seres queridos, por esta causa. Les tenemos presentes en esta Santa Misa, en honor de la grande Santa. Santa Teresa nos ayuda con su exhortación, hecha, como todo en ella, desde su experiencia. La tenemos en la memoria, en la memoria de casi todos en el mundo, lo que nos dice Santa Teresa:
Nada te turbe
nada te espante
todo se pasa
Dios no se muda
la paciencia
todo lo alcanza
quien a Dios tiene
nada le falta
solo Dios basta.
19:16
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Es verdaderamente un pensamiento espiritual también, que hace muy bien, a todos nosotros, en esas circunstancias tan difíciles. Teresa de Jesús es una preclara hija esta ciudad, esta es su tierra, esta es su ciudad. Pero es sobre todo hija de otra ciudad, la Nueva Jerusalén, la Esposa del Cordero, Morada de Dios entre los hombres. A está el apocalipsis la describe amurallada, casi como Ávila, translúcida, también como Ávila, transitada de la Gloria de Dios, supongo. Teresa empezó aquí, en la Pila Bautismal, que guarda la Parroquia de San Juan Bautista. La Ciudadanía del Cielo, así le llama San Pablo a los Bautizados, Ciudadanos del Cielo, Fiel a la Gracia de Cristo, no perdió esta Ciudadanía.
20:25
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Sino que Teresa, poniendo su esperanza en Cristo, en todo, en todas las cosas, el mismo Señor realizó en su corazón una transformación interior. Fiel pues a la Gracia de Cristo, con profunda Humildad, Conocimiento propio, Agradecimiento y con Confianza puesta en Cristo, recibido el Viático en la cercanía de la muerte. Teresa decía muchas veces: «¡en fin Señor!, soy hija de la Iglesia, soy hija de la Iglesia». La Iglesia, este Misterio de Comunión, que Dios quiere establecer con nosotros. Dios responde al ansia infinita de Comunión, característica del ser humano. Con frecuencia encadenado en su propia soledad, pues Dios nos ha creado, para introducirnos juntos, en el Seno de Su Vida Trinitaria en la Iglesia.
21:36
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Andres Legubá, el famoso teólogo, también el Concilio Vaticano II dice que hay una familia de Dios: «es la única sociedad completamente abierta. Es ella la única que se ajusta a nuestra íntima aspiración. En la que nosotros podemos alcanzar, por fin todas nuestras dimensiones. Tal es la Iglesia, Pueblo de Dios, Pueblo reunido a imagen de la Trinidad. Se cumplen este año los 50 de la Declaración del Santo Papa Pablo VI, reconociendo a Teresa de Jesús, como Doctora de la Iglesia, ha sido la primera mujer en serlo. San Pablo VI, se fijaba particularmente en la Enseñanza de la Santa sobre la Oración.
22:41
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
En plena consonancia de ..ización, los más prestigiosos Terecianistas, nos señalan que la Tesis central de Teresa se halla en concreto en Las Moradas o Castillo Interior. Allí defiende ella, que por la Encarnación del Verbo, la Transcendencia dejó de ser un problema de distancia. Y por consiguiente, en este destierro, es posible comunicarse un tan Gran Dios con nosotros. Es posible Amar, a una Bondad tan buena y una Misericordia tan sin tacha... «Tengo por cierto» -dice ella-, «que a quienes hiciere daño entender, que es posible hacer Dios está merced, en ese destierro, que estará muy falto de humildad, el del amor al prójimo».
23:38
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
A Dios pues, le es posible Comunicarse, gracias a la Encarnación de Nuestro Señor Jesucristo y a nosotros con Él y entre nosotros por Él. La perfección en camino en este mundo, el deseo de perfección por parte de cada uno de nosotros, debe colaborar en el mayor y mejor logro y perfección del otro. Particularmente a través de la Oración, pues Nuestro Señor Jesucristo, no quiere estar de tal modo en particular, que no esté también en común. Teresa es ejemplo de lo importante, que es la aportación de cada uno de nosotros, que nos ofrecemos a esta comunión.
24:26
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Hemos nacido para la eternidad y debemos tener la mirada puesta en este último objetivo, que es la vida con Él, Nuestro Dios. Pero en orden a ese destino definitivo, cada uno de nosotros, que vive en el tiempo, con libertad generosa y corazón transformado por Cristo. Debe favorecer el Misterio de esta Comunión, entre nosotros y entre nosotros con el Señor. Con lo poco que podemos hacer, en el actual momento histórico. Así hizo Teresa en su tiempo, ante el acoso a la Comunión y Unidad en la Iglesia en su tiempo, determinó poner lo poquito que hay en mí, -decía-, de forma que junto a sus hermanas, todas ocupadas en Oración ayudácemos en lo que pudiécemos, a este Señor mío.
25:31
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Decía ó escribía, en Camino de Perfección. Sin embargo entre los sabios del mundo, este mensaje de Amor es difícil aceptarlo. Desde una postura propiamente técnica, materialista. Imaginan a la transcendencia como un problema de distancia insalvable, entre Dios y su criatura. Esta distancia, muchos la aprovechan para vivir como buenamente entienden. Sin otra referencia honesta, a lo sumo que a un mundo ético. Para nosotros sin embargo, esa distancia, ha sido salvada bajo el Signo del Amor, bajo el Signo, la Realidad de la Encarnación de Nuestro Señor.
26:26
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
De cómo mantener viva y fuerte la Relación y la Amistad con el Señor. Teresa tiene una palabra, «Oración», la vida presente transcurre en un acoger, en el Camino de la Perfección, como ella dice: «Palabra Divina, las Inspiraciones de la Gracia, tratando de Amistad, con quien sabemos nos Ama». Así define Santa Teresa la Oración: «la Oración pues, es una expresión, es una práctica de Amistad con el Señor. La Oración no es sólo hablar con Dios, esto es, no es un monólogo de peticiones de nuestra parte. Eso es también verdad, por encima de todo, es un Diálogo, un Coloquio Amoroso en el que Dios ilumina Su Voluntad sobre nuestra vida.
27:31
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Este Coloquio, se caracteriza por tres pasos, en Santa Teresa, se trata, nos enseña la Santa en primer lugar de una Conversación Amistosa. A semejanza de la que podemos tener, con el mejor amigo nuestro. A Él le abrimos confiado, planes y secretos, le participamos nuestras preocupaciones y también le invitamos a alegrarse, pues queremos compartir con Él, los momentos de gozo, en nuestra vida. Eso es el primer paso, es, una Conversación Amistosa. En segundo lugar, debe ser una Conversación frecuente, Oremos entonces con frecuencia, tan a menudo como sea posible.
28:29
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Porque después de todo, si realmente Amas a alguien, te encantaría hablar con él o ella, tan a menudo como puedas. No le digas a tu madre o a tu padre, hablamos el año que viene. Decimos a nuestra madre, a nuestro padre, hasta muy pronto, entonces eso es también la Oración. El Diálogo con el Señor hay que ser frecuente. En tercer lugar ese Diálogo es Personal, no necesitas manuales para conversar con el Señor. No puedes excusarte, de que no puedes Orar porque olvidaste tu Libro de Oraciones en alguna parte. O que olvidaste tu Ordenador, tu Ipad, tu Iphone como se dice hoy.
29:28
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Para Santa Teresa, la Oración como diálogo con Dios es directa y procede del corazón. Por supuesto, la Iglesia también tiene Oraciones en común, en cuanto que la Iglesia, es una Comunidad, un Pueblo de Dios. Entonces podemos también como Comunidad, como Pueblo de Dios, pero la Oración también es personal. Entonces no necesitamos formularios, para Orar, una conversación de corazón a corazón, nos enseña la Santa. Amable, franca, confiada y abandonada en Él. Al mismo tiempo, como enseña la experiencia suya, la Oración de forma cada vez más profunda y convencida nos enamora más de Dios.
30:24
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Entonces cuando una hora más, Ama más también el Señor y Amas Orar mas. Porque, más queremos, más que conocemos, la presencia de un Dios en nuestra vida. Y una vez que podemos establecer esta conversación amistosa, frecuente, personal, no podemos dejar de Amar a Dios. Cada vez más, y desear estar siempre con Él, hasta inquietarse, sin pasar ese rato, sabroso y lleno con Él. Que como exclamó San Agustín: «nos hiciste Señor para Ti, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti».
31:06
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Hermanos queridos, elevamos nuestro ojos a María, aquí tenemos la imagen Santa María de la Caridad. Teresa Oraba ante esta imagen, durante el funeral de su madre. Pidiendo a María se mostrase en su vida como Madre, al faltarle, la de la tierra. Y María se ocupó dirigirla hasta la cumbre de la perfección Cristiana. Llevando la Vida Carmelitana o Carmelita, que quiere vivir el espíritu de María. Como Teresa ponemos en manos de la Virgen de la Caridad, lo poco y lo mucho que Dios ha puesto en nosotros.
31:53
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Es nuestra aportación, para este Ministerio Comunión, que llamamos y llamamos la Iglesia. Sea siempre para nosotros, una imagen, una figura de la Jerusalén Celestial. Donde Dios lo será todo en todos y donde sólo Dios basta, así sea.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Oremos.
Oh Dios que por Tu Espíritu
ha suscitado
la Santa Teresa de Jesús
para mostrar a la Iglesia
el Camino de la Perfección
concédenos alimentarnos
siempre de Su Celestial Doctrina
enciende en nosotros
el deseo de la verdadera Santidad.
Por Nuestro Señor Jesucristo, Tu Hijo
que Vive y Reina Contigo
en la Unidad del Espíritu Santo, y es Dios
por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
LITURGÍA DE LA PALABRA
06:15
Primera Lectura:
Lectura del libro del Eclesiástico 15, 1-6 1ª lectura: Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia.
Así obra el que teme al Señor, el que observa la ley alcanza la sabiduría.
Ella le sale al encuentro como una madre y lo acoge como una joven esposa. Lo alimenta con pan de inteligencia y le da a beber agua de sabiduría.
Si se apoya en ella, no vacilará, si se aferra a ella, no quedará defraudado.
Ella lo ensalzará sobre sus compañeros y en medio de la asamblea le abrirá la boca.
Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia y lo revestirá con un vestido de gloria. Encontrará gozo y corona de júbilo, y un nombre eterno recibirá en herencia.
℣. Palabra de Dios - Verbum Dómini.
℟. Te Alabamos Señor - Deo grátias.
07:06
Lectura de los Salmos:
Salmo: Sal 88, 2-3. 6-7. 8-9. 16-17. 18-19 Cantaré eternamente las misericordias del Señor.
07:16
Lectura de los Salmos:
℣. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor.
℟. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor.
℣. Cantaré eternamente
las misericordias del Señor,
anunciaré Tu fidelidad
por todas las edades.
Porque dijiste: «La misericordia
es un edificio eterno»,
más que el cielo
has afianzado Tu fidelidad. ℟.
℣. El cielo proclama tus maravillas,
Señor, y Tu fidelidad,
en la asamblea de los Santos.
¿Quién sobre las nubes
se compara a Dios?
¿Quién como el Señor
entre los seres divinos? ℟.
℣. Dios es temible
en el consejo de los Santos,
es grande y terrible
para toda Su Corte.
Señor del Universo,
¿quién como Tú?
El poder y la fidelidad
te rodean. ℟.
℣. Dichoso el pueblo
que sabe aclamarte:
caminará, oh Señor,
a la luz de Tu Rostro;
Tu Nombre es su gozo cada día,
Tu Justicia es su orgullo. ℟.
℣. Porque Tú eres su honor
y su fuerza, y con Tu favor
realzas nuestro poder.
Porque el Señor es nuestro escudo,
y el Santo de Israel nuestro Rey. ℟.
10:38
Segunda Lectura:
Lectura de la Carta del Apóstol San Pablo a los Romanos 2ª lectura: xxx
10:43
Segunda Lectura:
Hermanos, cuantos se dejan llevar por el Espíritu de Dios esos son hijos de Dios. Pues no habéis recibido un espíritu de esclavitud para recaer en el temor. Sino que habéis recibido un Espíritu de hijos de adopción, en el que clamamos «Abba, Padre». Ese mismo Espíritu da testimonio a nuestro espíritu de que somos hijos de Dios. Y si hijos, también herederos, herederos de Dios y coherederos con Cristo. De modo, que si sufrimos con Él seremos también glorificados con Él. El Espíritu acude en ayuda de nuestra debilidad, pues nosotros no sabemos pedir como conviene.
11:39
Segunda Lectura:
Pero el Espíritu mismo, intercede por nosotros con gemidos inefables. Y el que escruta los corazones, sabe cuál es el deseo del Espíritu y que su Intercesión por los Santos es según Dios.
℣. Palabra de Dios - Verbum Dómini.
℟. Te Alabamos Señor - Deo grátias.
12:02
Aclamación del Evangelio
Aleluya Eclo 39, 10 Las naciones hablarán de su sabiduría, y la asamblea proclamará su alabanza.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
℣. Las naciones hablarán
de su sabiduría, y la asamblea
proclamará su alabanza.
℟. Aleluya, aleluya, aleluya.
13:32
Lectura del Santo Evangelio:
✠ Lectura del santo Evangelio según san Mateo 11, 25-30 Evangelio: Soy manso y humilde de corazón.
13:32
Lectura del Santo Evangelio:
℣. El Señor esté con Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateo.
℟. Gloria a ti, Señor.
14:06
Lectura del Santo Evangelio
En aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús.
HOMILIA
15:50
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Excelencia Reverendísima Monseñor Jose María Gil Tamayo, Obispo de Ávila, Excelencia Reverendísima Monseñor Jesús García Burillo, Obispo Emérito de Ávila y Administrador Apostólico de Ciudad Rodrigo. Queridos Sacerdotes Concelebrantes, queridas Excelentísimas Autoridades, hermanos todos en Cristo. Con ocasión de mi llegada a España ya pronto hará un año, Monseñor Jose María, al expresarme su bienvenida, en nombre propio y de todos los Fieles, de esta querida y mundialmente famosísima Diócesis de Ávila. Me invitó ya a esta Celebración de Santa Teresa de Jesús. Gracias Don José María por ofrecerme esta ocasión, también para manifestar el aprecio que el Santo Padre, como el nuestro Obispo acaba de decir. El Papa Francisco tiene un gran amor por Santa Teresa de Jesús.
17:12
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Como también lo muestra, no solamente ayer, también en su Carta al Obispo de Ávila Monseñor Jesús en aquel tiempo, con ocasión de 500 Aniversario de su Nacimiento. Reconociendo que Teresa encendió en Ávila una ardiente luz renovadora, para el bien de toda la Iglesia en el mundo. En este día tan especial de Ávila, en circunstancias, podemos decir ¡que lástima!, en circunstancias muy difíciles, a causa de la Pandemia de la Covid-19. Quiero hacer llegar a todos, a todos los que están aquí presentes. A todos que participan a través la Televisión, de todos los Medios de Comunicación Social, les digo a todos, les expreso a todos, la cercanía del Santo Padre, es su bendición.
18:19
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Particularmente a cuando más sufren este mal, que acosa a todos, como a nuestro querido Obispo de Ávila. A cuantos han fallecido y a cuánto sufren la separación de sus seres queridos, por esta causa. Les tenemos presentes en esta Santa Misa, en honor de la grande Santa. Santa Teresa nos ayuda con su exhortación, hecha, como todo en ella, desde su experiencia. La tenemos en la memoria, en la memoria de casi todos en el mundo, lo que nos dice Santa Teresa:
Nada te turbe
nada te espante
todo se pasa
Dios no se muda
la paciencia
todo lo alcanza
quien a Dios tiene
nada le falta
solo Dios basta.
19:16
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Es verdaderamente un pensamiento espiritual también, que hace muy bien, a todos nosotros, en esas circunstancias tan difíciles. Teresa de Jesús es una preclara hija esta ciudad, esta es su tierra, esta es su ciudad. Pero es sobre todo hija de otra ciudad, la Nueva Jerusalén, la Esposa del Cordero, Morada de Dios entre los hombres. A está el apocalipsis la describe amurallada, casi como Ávila, translúcida, también como Ávila, transitada de la Gloria de Dios, supongo. Teresa empezó aquí, en la Pila Bautismal, que guarda la Parroquia de San Juan Bautista. La Ciudadanía del Cielo, así le llama San Pablo a los Bautizados, Ciudadanos del Cielo, Fiel a la Gracia de Cristo, no perdió esta Ciudadanía.
20:25
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Sino que Teresa, poniendo su esperanza en Cristo, en todo, en todas las cosas, el mismo Señor realizó en su corazón una transformación interior. Fiel pues a la Gracia de Cristo, con profunda Humildad, Conocimiento propio, Agradecimiento y con Confianza puesta en Cristo, recibido el Viático en la cercanía de la muerte. Teresa decía muchas veces: «¡en fin Señor!, soy hija de la Iglesia, soy hija de la Iglesia». La Iglesia, este Misterio de Comunión, que Dios quiere establecer con nosotros. Dios responde al ansia infinita de Comunión, característica del ser humano. Con frecuencia encadenado en su propia soledad, pues Dios nos ha creado, para introducirnos juntos, en el Seno de Su Vida Trinitaria en la Iglesia.
21:36
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Andres Legubá, el famoso teólogo, también el Concilio Vaticano II dice que hay una familia de Dios: «es la única sociedad completamente abierta. Es ella la única que se ajusta a nuestra íntima aspiración. En la que nosotros podemos alcanzar, por fin todas nuestras dimensiones. Tal es la Iglesia, Pueblo de Dios, Pueblo reunido a imagen de la Trinidad. Se cumplen este año los 50 de la Declaración del Santo Papa Pablo VI, reconociendo a Teresa de Jesús, como Doctora de la Iglesia, ha sido la primera mujer en serlo. San Pablo VI, se fijaba particularmente en la Enseñanza de la Santa sobre la Oración.
22:41
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
En plena consonancia de ..ización, los más prestigiosos Terecianistas, nos señalan que la Tesis central de Teresa se halla en concreto en Las Moradas o Castillo Interior. Allí defiende ella, que por la Encarnación del Verbo, la Transcendencia dejó de ser un problema de distancia. Y por consiguiente, en este destierro, es posible comunicarse un tan Gran Dios con nosotros. Es posible Amar, a una Bondad tan buena y una Misericordia tan sin tacha... «Tengo por cierto» -dice ella-, «que a quienes hiciere daño entender, que es posible hacer Dios está merced, en ese destierro, que estará muy falto de humildad, el del amor al prójimo».
23:38
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
A Dios pues, le es posible Comunicarse, gracias a la Encarnación de Nuestro Señor Jesucristo y a nosotros con Él y entre nosotros por Él. La perfección en camino en este mundo, el deseo de perfección por parte de cada uno de nosotros, debe colaborar en el mayor y mejor logro y perfección del otro. Particularmente a través de la Oración, pues Nuestro Señor Jesucristo, no quiere estar de tal modo en particular, que no esté también en común. Teresa es ejemplo de lo importante, que es la aportación de cada uno de nosotros, que nos ofrecemos a esta comunión.
24:26
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Hemos nacido para la eternidad y debemos tener la mirada puesta en este último objetivo, que es la vida con Él, Nuestro Dios. Pero en orden a ese destino definitivo, cada uno de nosotros, que vive en el tiempo, con libertad generosa y corazón transformado por Cristo. Debe favorecer el Misterio de esta Comunión, entre nosotros y entre nosotros con el Señor. Con lo poco que podemos hacer, en el actual momento histórico. Así hizo Teresa en su tiempo, ante el acoso a la Comunión y Unidad en la Iglesia en su tiempo, determinó poner lo poquito que hay en mí, -decía-, de forma que junto a sus hermanas, todas ocupadas en Oración ayudácemos en lo que pudiécemos, a este Señor mío.
25:31
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Decía ó escribía, en Camino de Perfección. Sin embargo entre los sabios del mundo, este mensaje de Amor es difícil aceptarlo. Desde una postura propiamente técnica, materialista. Imaginan a la transcendencia como un problema de distancia insalvable, entre Dios y su criatura. Esta distancia, muchos la aprovechan para vivir como buenamente entienden. Sin otra referencia honesta, a lo sumo que a un mundo ético. Para nosotros sin embargo, esa distancia, ha sido salvada bajo el Signo del Amor, bajo el Signo, la Realidad de la Encarnación de Nuestro Señor.
26:26
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
De cómo mantener viva y fuerte la Relación y la Amistad con el Señor. Teresa tiene una palabra, «Oración», la vida presente transcurre en un acoger, en el Camino de la Perfección, como ella dice: «Palabra Divina, las Inspiraciones de la Gracia, tratando de Amistad, con quien sabemos nos Ama». Así define Santa Teresa la Oración: «la Oración pues, es una expresión, es una práctica de Amistad con el Señor. La Oración no es sólo hablar con Dios, esto es, no es un monólogo de peticiones de nuestra parte. Eso es también verdad, por encima de todo, es un Diálogo, un Coloquio Amoroso en el que Dios ilumina Su Voluntad sobre nuestra vida.
27:31
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Este Coloquio, se caracteriza por tres pasos, en Santa Teresa, se trata, nos enseña la Santa en primer lugar de una Conversación Amistosa. A semejanza de la que podemos tener, con el mejor amigo nuestro. A Él le abrimos confiado, planes y secretos, le participamos nuestras preocupaciones y también le invitamos a alegrarse, pues queremos compartir con Él, los momentos de gozo, en nuestra vida. Eso es el primer paso, es, una Conversación Amistosa. En segundo lugar, debe ser una Conversación frecuente, Oremos entonces con frecuencia, tan a menudo como sea posible.
28:29
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Porque después de todo, si realmente Amas a alguien, te encantaría hablar con él o ella, tan a menudo como puedas. No le digas a tu madre o a tu padre, hablamos el año que viene. Decimos a nuestra madre, a nuestro padre, hasta muy pronto, entonces eso es también la Oración. El Diálogo con el Señor hay que ser frecuente. En tercer lugar ese Diálogo es Personal, no necesitas manuales para conversar con el Señor. No puedes excusarte, de que no puedes Orar porque olvidaste tu Libro de Oraciones en alguna parte. O que olvidaste tu Ordenador, tu Ipad, tu Iphone como se dice hoy.
29:28
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Para Santa Teresa, la Oración como diálogo con Dios es directa y procede del corazón. Por supuesto, la Iglesia también tiene Oraciones en común, en cuanto que la Iglesia, es una Comunidad, un Pueblo de Dios. Entonces podemos también como Comunidad, como Pueblo de Dios, pero la Oración también es personal. Entonces no necesitamos formularios, para Orar, una conversación de corazón a corazón, nos enseña la Santa. Amable, franca, confiada y abandonada en Él. Al mismo tiempo, como enseña la experiencia suya, la Oración de forma cada vez más profunda y convencida nos enamora más de Dios.
30:24
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Entonces cuando una hora más, Ama más también el Señor y Amas Orar mas. Porque, más queremos, más que conocemos, la presencia de un Dios en nuestra vida. Y una vez que podemos establecer esta conversación amistosa, frecuente, personal, no podemos dejar de Amar a Dios. Cada vez más, y desear estar siempre con Él, hasta inquietarse, sin pasar ese rato, sabroso y lleno con Él. Que como exclamó San Agustín: «nos hiciste Señor para Ti, y nuestro corazón está inquieto hasta que descanse en Ti».
31:06
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Hermanos queridos, elevamos nuestro ojos a María, aquí tenemos la imagen Santa María de la Caridad. Teresa Oraba ante esta imagen, durante el funeral de su madre. Pidiendo a María se mostrase en su vida como Madre, al faltarle, la de la tierra. Y María se ocupó dirigirla hasta la cumbre de la perfección Cristiana. Llevando la Vida Carmelitana o Carmelita, que quiere vivir el espíritu de María. Como Teresa ponemos en manos de la Virgen de la Caridad, lo poco y lo mucho que Dios ha puesto en nosotros.
31:53
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Es nuestra aportación, para este Ministerio Comunión, que llamamos y llamamos la Iglesia. Sea siempre para nosotros, una imagen, una figura de la Jerusalén Celestial. Donde Dios lo será todo en todos y donde sólo Dios basta, así sea.
CREDO (Symbolum Apostolorum)
32:57
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Credo in Deum
Patrem omnipotentem,
Creatorem cæli et terræ.
Et in Iesum Christum,
Filium eius unicum,
Dominum nostrum,
qui conceptus est de Spiritu Sancto,
natus ex Maria Virgine,
passus sub Pontio Pilato,
crucifixus, mortuus,
et sepultus,
descendit ad inferos,
tertia die resurrexit a mortuis,
ascendit ad cælos,
sedet ad dexteram
Dei Patris omnipotentis, inde
venturus est iudicare
vivos et mortuos.
Credo in Spiritum Sanctum,
sanctam Ecclesiam catholicam,
sanctorum communionem, remissionem
peccatorum, carnis resurrectionem,
vitam æternam.
℟. Amén.
32:57
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Credo in Deum
Patrem omnipotentem,
Creatorem cæli et terræ.
Et in Iesum Christum,
Filium eius unicum,
Dominum nostrum,
qui conceptus est de Spiritu Sancto,
natus ex Maria Virgine,
passus sub Pontio Pilato,
crucifixus, mortuus,
et sepultus,
descendit ad inferos,
tertia die resurrexit a mortuis,
ascendit ad cælos,
sedet ad dexteram
Dei Patris omnipotentis, inde
venturus est iudicare
vivos et mortuos.
Credo in Spiritum Sanctum,
sanctam Ecclesiam catholicam,
sanctorum communionem, remissionem
peccatorum, carnis resurrectionem,
vitam æternam.
℟. Amén.
CREDO (Símbolo Apostólico)
32:57
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Creo en Dios,
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo su único hijo
nuestro Señor
que fue concebido por obra
y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto
y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó
de entre los muertos,
subió a los cielos
y está sentado a la derecha
de Dios Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir
a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo,
la Santa Iglesia Católica,
la Comunión de los Santos,
el perdón de los pecados,
la Resurrección de la carne
y la Vida Eterna.
℟. Amén.
32:57
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Creo en Dios,
Padre Todopoderoso,
Creador del cielo y de la tierra.
Creo en Jesucristo su único hijo
nuestro Señor
que fue concebido por obra
y gracia del Espíritu Santo,
nació de Santa María Virgen,
padeció bajo el poder de Poncio Pilato,
fue crucificado, muerto
y sepultado,
descendió a los infiernos,
al tercer día resucitó
de entre los muertos,
subió a los cielos
y está sentado a la derecha
de Dios Padre todopoderoso.
Desde allí ha de venir
a juzgar a vivos y muertos.
Creo en el Espíritu Santo,
la Santa Iglesia Católica,
la Comunión de los Santos,
el perdón de los pecados,
la Resurrección de la carne
y la Vida Eterna.
℟. Amén.
Oración Universal
u Oración de los Fieles
34:32
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Con el ejemplo de Santa Teresa
Maestra y Modelo de Oración
presentemos a Dios
nuestras súplicas.
34:42
PETICIONES:
℣. Por toda la Iglesia
enviada por el mismo Señor
a Anunciar la Buena Noticia
para que Alentada
por el Espíritu Santo
continúe mostrando
a los hombres de hoy que Cristo
es el camino de la salvación.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por nuestro Santo Padre
el Papa Francisco
por nuestro Obispo José María
por el Nuncio Apostólico
que hoy Preside esta Celebración
y por todo el Colegio Episcopal
para que el Señor conserve
en ellos la gracia
del Espíritu Santo
sirvan con fidelidad
a la Iglesia y cuiden
con solicitud Pastoral
al pueblo de Dios.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Religiosos y Religiosas
particularmente
por la Familia del Carmelo
para que siguiendo el ejemplo
de Santa Teresa, vivan
con gozo los consejos Evangélicos
y sean testigos del Amor de Dios
en medio del mundo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los que dirigen
los Gobiernos de las Naciones
para que busquen con sinceridad
y lealtad el Bien Común
de sus pueblos buscando
soluciones que mitiguen
los efectos de la Pandemia
que nos afecta y protegiendo
a los más vulnerables.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por todos los que sufren
por cualquier causa
especialmente por los enfermos
del Coronavirus
para que con la ayuda
de la Comunidad Cristiana
puedan mitigar su sufrimiento
y al mismo tiempo descubran
que en la cruz de Cristo
está la vida y el consuelo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por todos nosotros reunidos
para Celebrar la Festividad
de Santa Teresa
para que perseveremos
en la verdadera Fe
crezcamos en la Caridad
y seamos dóciles
a los impulsos del Espíritu.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
36:38
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Padre bueno fuente de la vida
el amor y la verdad
que nos llama a vivir
continuamente en Comunión contigo
concédenos aquello que te hemos
pedido, y llenos de confianza
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
41:37
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Orad, hermanos
para que este sacrificio
mío y vuestro sea agradable
a Dios Padre Todopoderoso.
℟. El Señor reciba de Tus manos
este Sacrificio para alabanza
y gloria de tu nombre
y para nuestro bien y el de toda
Su Santa Iglesia.
℟. Amén.
41:55
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Sean aceptables a Tu Majestad
Nuestros Dones Señor
a quien tanto agradó
Santa Teresa de Jesús
con la ofrenda de sí misma
por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
42:10
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos Gracias al Señor, Nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
42:21
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre
y en todo lugar Señor Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
porque Celebramos la Providencia
admirable, en los Santos
que se entregaron a Cristo
por el Reino de los Cielos
por ella llamas de nuevo
a la humanidad a la santidad primera
que de Tí había recibido
y la conduces a gustar los dones
que espera recibir en el cielo
por eso con los Santos
y todos los Ángeles te Alabamos
proclamándo sin cesar:
34:32
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Con el ejemplo de Santa Teresa
Maestra y Modelo de Oración
presentemos a Dios
nuestras súplicas.
34:42
PETICIONES:
℣. Por toda la Iglesia
enviada por el mismo Señor
a Anunciar la Buena Noticia
para que Alentada
por el Espíritu Santo
continúe mostrando
a los hombres de hoy que Cristo
es el camino de la salvación.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por nuestro Santo Padre
el Papa Francisco
por nuestro Obispo José María
por el Nuncio Apostólico
que hoy Preside esta Celebración
y por todo el Colegio Episcopal
para que el Señor conserve
en ellos la gracia
del Espíritu Santo
sirvan con fidelidad
a la Iglesia y cuiden
con solicitud Pastoral
al pueblo de Dios.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los Religiosos y Religiosas
particularmente
por la Familia del Carmelo
para que siguiendo el ejemplo
de Santa Teresa, vivan
con gozo los consejos Evangélicos
y sean testigos del Amor de Dios
en medio del mundo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por los que dirigen
los Gobiernos de las Naciones
para que busquen con sinceridad
y lealtad el Bien Común
de sus pueblos buscando
soluciones que mitiguen
los efectos de la Pandemia
que nos afecta y protegiendo
a los más vulnerables.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por todos los que sufren
por cualquier causa
especialmente por los enfermos
del Coronavirus
para que con la ayuda
de la Comunidad Cristiana
puedan mitigar su sufrimiento
y al mismo tiempo descubran
que en la cruz de Cristo
está la vida y el consuelo.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
℣. Por todos nosotros reunidos
para Celebrar la Festividad
de Santa Teresa
para que perseveremos
en la verdadera Fe
crezcamos en la Caridad
y seamos dóciles
a los impulsos del Espíritu.
℣. Roguemos al Señor.
℟. Te Rogamos, Óyenos.
36:38
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Padre bueno fuente de la vida
el amor y la verdad
que nos llama a vivir
continuamente en Comunión contigo
concédenos aquello que te hemos
pedido, y llenos de confianza
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
41:37
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Orad, hermanos
para que este sacrificio
mío y vuestro sea agradable
a Dios Padre Todopoderoso.
℟. El Señor reciba de Tus manos
este Sacrificio para alabanza
y gloria de tu nombre
y para nuestro bien y el de toda
Su Santa Iglesia.
℟. Amén.
41:55
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Sean aceptables a Tu Majestad
Nuestros Dones Señor
a quien tanto agradó
Santa Teresa de Jesús
con la ofrenda de sí misma
por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
42:10
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos Gracias al Señor, Nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
42:21
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre
y en todo lugar Señor Padre Santo
Dios Todopoderoso y Eterno
porque Celebramos la Providencia
admirable, en los Santos
que se entregaron a Cristo
por el Reino de los Cielos
por ella llamas de nuevo
a la humanidad a la santidad primera
que de Tí había recibido
y la conduces a gustar los dones
que espera recibir en el cielo
por eso con los Santos
y todos los Ángeles te Alabamos
proclamándo sin cesar:
42:59
Coro de la Basílica de Ávila:
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Dominus Deus, Sabaoth.
Pleni sunt coeli et terra gloria tua.
Hosanna in excelsis.
Benedictus qui venit in nomine Domini
Hosanna in excelsis.
Sanctus, Sanctus, Sanctus,
Dominus Deus, Sabaoth.
Pleni sunt coeli et terra gloria tua.
Hosanna in excelsis.
Benedictus qui venit in nomine Domini
Hosanna in excelsis.
Santo, Santo, Santo,
Santo, Santo, Santo,
Señor Dios de los Ejércitos.
El cielo y la tierra están
llenos de tu gloria.
¡Hosanna! en las Alturas.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosanna! en las Alturas.
Santo, Santo, Santo,
Señor Dios de los Ejércitos.
El cielo y la tierra están
llenos de tu gloria.
¡Hosanna! en las Alturas.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
¡Hosanna! en las Alturas.
45:00
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Santo eres en verdad Padre
y con razón te alaban
todas tus criaturas
ya que por Jesucristo,
Tu Hijo Señor Nuestro
con la Fuerza
del Espíritu Santo
das Vida y Santifica todo
y congregas a Tu pueblos
sin cesar para que ofrezca
en Tu Honor, un sacrificio
sin mancha desde donde sale
el sol hasta el ocaso
por eso Padre te suplicamos
que Santifiques
por el mismo Espíritu
estos Dones que hemos
separado para Tí
de manera que se conviertan
en el Cuerpo y la Sangre
de Jesucristo Hijo Tuyo
y Señor Nuestro
que nos mandó Celebrar
estos Misterios
porque Él mismo, la noche
en que iba a ser entregado
tomó Pan y dando gracias
te bendijo lo partió
y lo dio a sus discípulos
diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
46:13
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el Caliz dando gracias
te bendijo y lo pasó a sus Discípulos
diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
46:56
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Éste es el Misterio de la Fe:
℟. Anunciamos tu muerte,
proclamamos tu resurrección.
!Ven, Señor Jesús!
47:05
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Así pues Padre al Celebrar
ahora el Memorial de la Pasión
Salvadora de Tu Hijo
de su admirable Resurrección
y Ascensión al Cielo
mientras esperábamos su Venida
gloriosa te ofrecemos
en esta Acción de Gracias
el Sacrificio Vivo y Santo
dirige Tu Mirada
sobre la Ofrenda de tu Iglesia
y reconoce en ella
la víctima por cuya
inmolación quisistes
devolvernos Tu Amistad
para que fortalecidos
con el Cuerpo y la Sangre
de Tu Hijo y llenos
de su Espíritu Santo
formemos en Cristo
un solo Cuerpo
y un solo Espíritu.
47:43
Excel. Rev. Monseñor José María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
℣. Que Él nos transforme
en ofrenda permanente
para que gocemos de Tu heredad
junto con Tus Elegidos
con María la Virgen
Madre de Dios
su esposo San José
los Apóstoles y los Mártires
Santa Teresa de Jesús
y todos los Santos
por cuya intercesión confiamos
obtener siempre tu ayuda.
48:05
Excel. Rev. Monseñor Jesús García Burillo:
Obispo Emérito de Ávila
℣. Te pedimos Padre
que esta víctima de reconciliación
traiga la paz y la salvación
al mundo entero
confirma en la Fe y en la caridad
a Tu Iglesia peregrina en la Tierra
a tu servidor el Papa Francisco
a nuestro Obispo Jose María
al Nuncio de Su Santidad en España
Bernardito, a mí indigno
siervo tuyo, al Orden Episcopal,
a los Presbíteros y Diáconos
y a todo el pueblo redimido
por Tí, atiende los deseos
y súplicas de esta familia
que has congregado
en Tu Presencia
reúne en torno a Tí
Padre Misericordioso
a todos tus hijos dispersos
por el mundo a nuestros
hermanos difuntos
y a cuantos murieron
en Tu Amistad recíbelos
en Tu Reino donde esperamos
gozar todos juntos
de la plenitud eterna
de Tu Gloria por Cristo
Señor Nuestro, por quien
concede al mundo
todos los bienes.
49:15
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Por Cristo, con Él y en Él,
a Tí, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo Honor y toda Gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
49:44
Rvrndo.: que Preside la Santa Misa:
Fieles a la Recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza nos atrevemos a decir:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
50:20
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Tuyo es el reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.
50:42
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Señor Jesucristo, que dijiste
a tus Apóstoles: "La paz
os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta
nuestros pecados,
sino la Fe de tu Iglesia
y, conforme a Tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
51:00
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. La Paz del Señor esté siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Con un signo de cabeza nos podemos dar la Paz.
℟. La Paz esté contigo.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Santo eres en verdad Padre
y con razón te alaban
todas tus criaturas
ya que por Jesucristo,
Tu Hijo Señor Nuestro
con la Fuerza
del Espíritu Santo
das Vida y Santifica todo
y congregas a Tu pueblos
sin cesar para que ofrezca
en Tu Honor, un sacrificio
sin mancha desde donde sale
el sol hasta el ocaso
por eso Padre te suplicamos
que Santifiques
por el mismo Espíritu
estos Dones que hemos
separado para Tí
de manera que se conviertan
en el Cuerpo y la Sangre
de Jesucristo Hijo Tuyo
y Señor Nuestro
que nos mandó Celebrar
estos Misterios
porque Él mismo, la noche
en que iba a ser entregado
tomó Pan y dando gracias
te bendijo lo partió
y lo dio a sus discípulos
diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE ÉL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
46:13
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el Caliz dando gracias
te bendijo y lo pasó a sus Discípulos
diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
46:56
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Éste es el Misterio de la Fe:
℟. Anunciamos tu muerte,
proclamamos tu resurrección.
!Ven, Señor Jesús!
47:05
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Así pues Padre al Celebrar
ahora el Memorial de la Pasión
Salvadora de Tu Hijo
de su admirable Resurrección
y Ascensión al Cielo
mientras esperábamos su Venida
gloriosa te ofrecemos
en esta Acción de Gracias
el Sacrificio Vivo y Santo
dirige Tu Mirada
sobre la Ofrenda de tu Iglesia
y reconoce en ella
la víctima por cuya
inmolación quisistes
devolvernos Tu Amistad
para que fortalecidos
con el Cuerpo y la Sangre
de Tu Hijo y llenos
de su Espíritu Santo
formemos en Cristo
un solo Cuerpo
y un solo Espíritu.
47:43
Excel. Rev. Monseñor José María Gil Tamayo:
Obispo de Ávila
℣. Que Él nos transforme
en ofrenda permanente
para que gocemos de Tu heredad
junto con Tus Elegidos
con María la Virgen
Madre de Dios
su esposo San José
los Apóstoles y los Mártires
Santa Teresa de Jesús
y todos los Santos
por cuya intercesión confiamos
obtener siempre tu ayuda.
48:05
Excel. Rev. Monseñor Jesús García Burillo:
Obispo Emérito de Ávila
℣. Te pedimos Padre
que esta víctima de reconciliación
traiga la paz y la salvación
al mundo entero
confirma en la Fe y en la caridad
a Tu Iglesia peregrina en la Tierra
a tu servidor el Papa Francisco
a nuestro Obispo Jose María
al Nuncio de Su Santidad en España
Bernardito, a mí indigno
siervo tuyo, al Orden Episcopal,
a los Presbíteros y Diáconos
y a todo el pueblo redimido
por Tí, atiende los deseos
y súplicas de esta familia
que has congregado
en Tu Presencia
reúne en torno a Tí
Padre Misericordioso
a todos tus hijos dispersos
por el mundo a nuestros
hermanos difuntos
y a cuantos murieron
en Tu Amistad recíbelos
en Tu Reino donde esperamos
gozar todos juntos
de la plenitud eterna
de Tu Gloria por Cristo
Señor Nuestro, por quien
concede al mundo
todos los bienes.
49:15
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Por Cristo, con Él y en Él,
a Tí, Dios Padre omnipotente,
en la unidad del Espíritu Santo,
todo Honor y toda Gloria
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
49:44
Rvrndo.: que Preside la Santa Misa:
Fieles a la Recomendación del Salvador y siguiendo su divina enseñanza nos atrevemos a decir:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro, que estás en el cielo,
santificado sea tu Nombre;
venga a nosotros tu reino;
hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo.
Danos hoy nuestro pan de cada día;
perdona nuestras ofensas,
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden;
no nos dejes caer en la tentación,
y líbranos del mal.
50:20
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Líbranos de todos los males, Señor,
y concédenos la paz en nuestros días,
para que, ayudados por tu misericordia,
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación,
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro Salvador Jesucristo.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Tuyo es el reino, tuyo el poder
y la gloria, por siempre, Señor.
50:42
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Señor Jesucristo, que dijiste
a tus Apóstoles: "La paz
os dejo, mi paz os doy";
no tengas en cuenta
nuestros pecados,
sino la Fe de tu Iglesia
y, conforme a Tu palabra,
concédele la paz y la unidad.
Tú que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
51:00
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. La Paz del Señor esté siempre con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Con un signo de cabeza nos podemos dar la Paz.
℟. La Paz esté contigo.
51:11
Coro de la Basílica de Ávila:
AGNUS DEI
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Miserere nobis.
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Miserere nobis.
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Dona nobis pacem.
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Miserere nobis.
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Miserere nobis.
℣. Agnus Dei, Qui tollis peccata mundi,
℟. Dona nobis pacem.
CORDERO DE DIOS
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. danos la paz
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. danos la paz
52:45
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados
a la Cena del Señor.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
℣. «El Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo os guarde para la Vida Eterna».
℟. Amen.
53:22
Monitor de la Basílica de Ávila:
Recordamos que para la Comunión, serán los Sacerdotes los que pasarán por los diversos lugares. Repartiendo el Cuerpo de Cristo, quien desee Comulgar permanece de pie y el resto pueden sentarse.
Nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada la falta
nada te turbe
nada te espante
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta.
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
la paciencia
todo lo alcanza
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta
01:02:09
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Oremos.
Señor Dios nuestro
haz que Tu Familia Consagrada
a Tí, a la que has alimentado
con el Pan del Cielo se alegre
cantando eternamente
Tus Misericordias
a ejemplo de Santa Teresa Jesús.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
01:02:41
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Dios Nuestro Padre
que nos ha Congregado
para el Celebrar la Fiesta
de Santa Teresa de Jesús
os bendiga, os proteja,
y os confirme en su paz.
℟. Amén.
℣. Cristo el Señor que ha manifestado
en Santa Teresa de Jesús
la Fuerza Renovadora
del Misterio Pascual,
os haga auténticos Testigos
de su Evangelio.
℟. Amén.
℣. El Espíritu Santo
que en Santa Teresa de Jesús
nos ha ofrecido un ejemplo
de Caridad Evangélica
os conceda la Gracia
de acrecentar en la Iglesia
la Verdadera Comunión
de Fe y de Amor.
℟. Amén.
℣. Y la Bendición de Dios Todopoderoso ✠ Padre, ✠ Hijo y ✠ Espíritu Santo descienda sobre vosotros y os acompañe siempre.
℟. Amén.
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. Éste es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo.
Dichosos los invitados
a la Cena del Señor.
℟. Señor, no soy digno de que entres en mi casa, pero una palabra tuya bastará para sanarme.
℣. «El Cuerpo de Cristo y la Sangre de Cristo os guarde para la Vida Eterna».
℟. Amen.
53:22
Monitor de la Basílica de Ávila:
Recordamos que para la Comunión, serán los Sacerdotes los que pasarán por los diversos lugares. Repartiendo el Cuerpo de Cristo, quien desee Comulgar permanece de pie y el resto pueden sentarse.
Nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada la falta
nada te turbe
nada te espante
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta.
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
la paciencia
todo lo alcanza
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta
nada te turbe
nada te espante
quien a Dios tiene
nada le falta
nada te turbe
nada te espante
solo Dios basta
01:02:09
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
Oremos.
Señor Dios nuestro
haz que Tu Familia Consagrada
a Tí, a la que has alimentado
con el Pan del Cielo se alegre
cantando eternamente
Tus Misericordias
a ejemplo de Santa Teresa Jesús.
Por Jesucristo Nuestro Señor.
℟. Amén.
01:02:41
Monseñor Bernardito Auza:
Nuncio Apostólico de Su Santidad
℣. El Señor esté con vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
℣. Dios Nuestro Padre
que nos ha Congregado
para el Celebrar la Fiesta
de Santa Teresa de Jesús
os bendiga, os proteja,
y os confirme en su paz.
℟. Amén.
℣. Cristo el Señor que ha manifestado
en Santa Teresa de Jesús
la Fuerza Renovadora
del Misterio Pascual,
os haga auténticos Testigos
de su Evangelio.
℟. Amén.
℣. El Espíritu Santo
que en Santa Teresa de Jesús
nos ha ofrecido un ejemplo
de Caridad Evangélica
os conceda la Gracia
de acrecentar en la Iglesia
la Verdadera Comunión
de Fe y de Amor.
℟. Amén.
℣. Y la Bendición de Dios Todopoderoso ✠ Padre, ✠ Hijo y ✠ Espíritu Santo descienda sobre vosotros y os acompañe siempre.
℟. Amén.
Salve Regina
Salve, Regina, Mater misericordiae,
Vita, dulcedo, et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules filii Hevae,
Ad te suspiramus, gementes et flentes
In hac lacrimarum valle.
Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos
Misericordes oculos ad nos converte;
Et Jesum, benedictum fructum ventris tui,
Nobis post hoc exilium ostende
O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria.
℣. Ora pro nobis sancta Dei Genetrix.
℟. Ut digni efficiamur promissionibus Christi.
℟. Amén.
Salve, Regina, Mater misericordiae,
Vita, dulcedo, et spes nostra, salve.
Ad te clamamus, exsules filii Hevae,
Ad te suspiramus, gementes et flentes
In hac lacrimarum valle.
Eia, ergo, advocata nostra, illos tuos
Misericordes oculos ad nos converte;
Et Jesum, benedictum fructum ventris tui,
Nobis post hoc exilium ostende
O clemens, O pia, O dulcis Virgo Maria.
℣. Ora pro nobis sancta Dei Genetrix.
℟. Ut digni efficiamur promissionibus Christi.
℟. Amén.
Salve Regina
Dios te salve Reina y Madre de misericordia
vida dulzura y esperanza nuestra Dios te salve
a ti llamamos los desterrados hijos de Eva
a ti suspiramos gimiendo y llorando
en este valle de lágrimas
ea pues Señora abogada nuestra
vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos
y después de este destierro muéstranos a Jesús
fruto bendito de tu vientre
o clementísima o piadosa
o dulce siempre Virgen María
ruega por nosotros Santa madre de Dios
para que seamos dignos de alcanzar las promesas
y las gracias de nuestro Señor Jesucristo.
℟. Amén.
Dios te salve Reina y Madre de misericordia
vida dulzura y esperanza nuestra Dios te salve
a ti llamamos los desterrados hijos de Eva
a ti suspiramos gimiendo y llorando
en este valle de lágrimas
ea pues Señora abogada nuestra
vuelve a nosotros esos tus ojos misericordiosos
y después de este destierro muéstranos a Jesús
fruto bendito de tu vientre
o clementísima o piadosa
o dulce siempre Virgen María
ruega por nosotros Santa madre de Dios
para que seamos dignos de alcanzar las promesas
y las gracias de nuestro Señor Jesucristo.
℟. Amén.
℣. Podeis ir en Paz.
℟. Demos gracias a Dios.
℟. Demos gracias a Dios.
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