Palabra de Vida 1/11/17:
«Vuestra recompensa será grande en el cielo»
Por Rvrdo. Don: Jesús Higueras Esteban
«Vuestra recompensa será grande en el cielo»
Por Rvrdo. Don: Jesús Higueras Esteban
Camino Católico
Publicado el 1 nov. 2017 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Espacio "Palabra de Vida" de 13 TV del 1 de noviembre de 2017, miércoles de la 30ª semana de Tiempo Ordinario, Solemnidad de Todos los Santos, presentado por el padre Jesús Higueras, en el cual se comenta el evangelio del día.
Evangelio: San Mateo 5, 1-12:
En aquel tiempo, viendo Jesús la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo:
«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos».
«Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos, porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados.
Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos.
Bienaventurados seréis cuando os injurien, y os persigan y digan con mentira toda clase de mal contra vosotros por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en los cielos».
Padre Don: Jesús Higueras Esteban
00:20
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Vuestra recompensa será grande en el cielo», hoy Celebramos la Solemnidad de todos los Santos. Una Fiesta Preciosa, es una Fiesta en la que no solamente celebramos y nos alegramos por la gloría de los mejores Hijos de la Iglesia. Aquellos que la Iglesia nos propone como Modelo de Vida, los Santos digamos con papeles: San Ignacio de Loyola, Santa Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz. Sino los millones de millones de personas, que en vidas anónimas, en vidas no publicadas en libros, no conocidas por mucha gente más que por sus familiares más cercanos.
00:52
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Son los que están contemplando en los otros, porque ¿quienes son los Santos? Primero sólo Dios es Santo, pero la Santidad única de Dios llega a todas las personas que quieren acoger su gracia. Los Santos propiamente son aquellos que ya han partido de este mundo y ahora mismo están ya en el cielo contemplando la belleza de Dios, la belleza de la Santísima Trinidad y además nos aman, nos conocen, por supuesto que nos quieren y entre ellos se quieren.
01:18
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Es pensar en el cielo, que es nuestra meta y ¿cuál es el camino para ir al cielo? Pues precisamente el Evangelio de hoy nos enseña que el Camino que Jesucristo propone para ir al cielo, no es el cumplimiento de la ley, no es la norma exacta, sino las Bienaventuranzas. "Bienaventurado los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos", Bienaventurados los que luchan por la paz, los limpios de corazón, los que sufren, es decir, cosas que nos pasan en la vida, que en la medida en que sepamos vivirlas, como las vivió el mismo Cristo sabemos que cada actividad, cada suceso de la tierra.
01:55
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Si nosotros lo vivimos con Fe, con Caridad, con Esperanza, tendrá una repercusión en la Vida Eterna. De hecho el Camino de las Bienaventuranzas, es el Camino seguro, el Camino cierto, para ir al cielo. Y por eso cuando veamos que el Espíritu de las Bienaventuranzas visita nuestra vida, las contrariedades, las persecuciones, el sufrimiento, las lágrimas, pues sabemos que es que el Señor nos está encaminando hacia esa meta que es el cielo.
02:22
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Qué bonito es saber qué nos espera un Dios, que quería Padre qué nos espera. Un Dios que nos ha llamado hermanos, un Dios que es Amor, que es el Espíritu Santo y que está con los brazos abiertos. Para acogernos eternamente y que allí nos encontraremos con toda la Asamblea Festiva de los Santos. Con nuestros familiares, con esas personas que hemos querido tanto en la tierra, que han marchado antes que nosotros y que nos están esperando con todo el cariño e intercediendo por nosotros en el cielo.
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - «Vuestra recompensa será grande en el cielo», hoy Celebramos la Solemnidad de todos los Santos. Una Fiesta Preciosa, es una Fiesta en la que no solamente celebramos y nos alegramos por la gloría de los mejores Hijos de la Iglesia. Aquellos que la Iglesia nos propone como Modelo de Vida, los Santos digamos con papeles: San Ignacio de Loyola, Santa Teresa de Jesús, San Juan de la Cruz. Sino los millones de millones de personas, que en vidas anónimas, en vidas no publicadas en libros, no conocidas por mucha gente más que por sus familiares más cercanos.
00:52
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Son los que están contemplando en los otros, porque ¿quienes son los Santos? Primero sólo Dios es Santo, pero la Santidad única de Dios llega a todas las personas que quieren acoger su gracia. Los Santos propiamente son aquellos que ya han partido de este mundo y ahora mismo están ya en el cielo contemplando la belleza de Dios, la belleza de la Santísima Trinidad y además nos aman, nos conocen, por supuesto que nos quieren y entre ellos se quieren.
01:18
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Es pensar en el cielo, que es nuestra meta y ¿cuál es el camino para ir al cielo? Pues precisamente el Evangelio de hoy nos enseña que el Camino que Jesucristo propone para ir al cielo, no es el cumplimiento de la ley, no es la norma exacta, sino las Bienaventuranzas. "Bienaventurado los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos", Bienaventurados los que luchan por la paz, los limpios de corazón, los que sufren, es decir, cosas que nos pasan en la vida, que en la medida en que sepamos vivirlas, como las vivió el mismo Cristo sabemos que cada actividad, cada suceso de la tierra.
01:55
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Si nosotros lo vivimos con Fe, con Caridad, con Esperanza, tendrá una repercusión en la Vida Eterna. De hecho el Camino de las Bienaventuranzas, es el Camino seguro, el Camino cierto, para ir al cielo. Y por eso cuando veamos que el Espíritu de las Bienaventuranzas visita nuestra vida, las contrariedades, las persecuciones, el sufrimiento, las lágrimas, pues sabemos que es que el Señor nos está encaminando hacia esa meta que es el cielo.
02:22
Padre Don: Jesús Higueras Esteban: - Qué bonito es saber qué nos espera un Dios, que quería Padre qué nos espera. Un Dios que nos ha llamado hermanos, un Dios que es Amor, que es el Espíritu Santo y que está con los brazos abiertos. Para acogernos eternamente y que allí nos encontraremos con toda la Asamblea Festiva de los Santos. Con nuestros familiares, con esas personas que hemos querido tanto en la tierra, que han marchado antes que nosotros y que nos están esperando con todo el cariño e intercediendo por nosotros en el cielo.
Santa Misa de la Solemnidad de Todos los Santos, 1 de noviembre de 2017
Camino Católico
Publicado el 1 nov. 2017 (13 TV / caminocatolico.org/home/) Celebración de la Santa Misa del miércoles de la 30ª semana de Tiempo Ordinario, Solemnidad de Todos los Santos, emitida por 13 TV desde la Basílica de la Concepción de Madrid.
Inicio de la Santa Misa y Dedicación
00:04
MUSICA de la BASÍLICA:
Somos un pueblo que camina
y juntos caminando podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas, ciudad de eternidad.
Somos un pueblo que camina
que marcha por el mundo
buscando otra ciudad.
Somos errantes peregrinos
en busca de un destino,
destino de unidad.
Siempre seremos caminantes,
pues solo caminando
podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Sufren los hombres mis hermanos
buscando entre las piedras
la parte de su pan.
Sufren los hombres oprimidos
Los hombres que no tienen
ni paz ni libertad.
Sufren los hombres,mis hermanos
mas tu vienes con ellos
y en ti encontrarán
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Danos valor para la lucha
valor en la tristeza
valor en nuestro afán
Danos la luz de tus palabras
que guíen nuestros pasos
en este caminar.
Marcha, Señor, junto a nosotros
pues sólo en tu presencia
podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Procedencia: Comunidad Parroquial de San Pedro
01:23
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen
℣. La gracia de nuestro Señor Jesucristo
el amor del padre
y la comunión del espíritu santo
estén con todos vosotros.
℟. y con tu espíritu
01:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Hermanos y es un día de gran alegría para la Iglesia del Cielo y para la Iglesia de la Tierra. Celebramos la belleza de Dios, viviendo las almas de sus hijos. Hoy es el día de Todos los Santos damos gracias a Dios por hacernos partícipes de su Santidad y pedimos que nos contemos también nosotros algún día entre la multitud inmensa de los santos.
02:03
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Comencemos reconociendo nuestras infidelidades a la Gracia, nuestros pecados, los obstáculos que hemos puesto a su Acción de Santificación.
02:20
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor
℣. Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen
02:56
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Señor ten Piedad
℟. Señor ten Piedad
℣. Cristo ten Piedad
℟. Cristo ten Piedad
℣. Señor ten Piedad
℟. Señor ten Piedad
MUSICA de la BASÍLICA:
Somos un pueblo que camina
y juntos caminando podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas, ciudad de eternidad.
Somos un pueblo que camina
que marcha por el mundo
buscando otra ciudad.
Somos errantes peregrinos
en busca de un destino,
destino de unidad.
Siempre seremos caminantes,
pues solo caminando
podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Sufren los hombres mis hermanos
buscando entre las piedras
la parte de su pan.
Sufren los hombres oprimidos
Los hombres que no tienen
ni paz ni libertad.
Sufren los hombres,mis hermanos
mas tu vienes con ellos
y en ti encontrarán
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Danos valor para la lucha
valor en la tristeza
valor en nuestro afán
Danos la luz de tus palabras
que guíen nuestros pasos
en este caminar.
Marcha, Señor, junto a nosotros
pues sólo en tu presencia
podremos alcanzar
otra ciudad que no se acaba
sin penas ni tristezas
ciudad de eternidad.
Procedencia: Comunidad Parroquial de San Pedro
01:23
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. En el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo
℟. Amen
℣. La gracia de nuestro Señor Jesucristo
el amor del padre
y la comunión del espíritu santo
estén con todos vosotros.
℟. y con tu espíritu
01:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Hermanos y es un día de gran alegría para la Iglesia del Cielo y para la Iglesia de la Tierra. Celebramos la belleza de Dios, viviendo las almas de sus hijos. Hoy es el día de Todos los Santos damos gracias a Dios por hacernos partícipes de su Santidad y pedimos que nos contemos también nosotros algún día entre la multitud inmensa de los santos.
02:03
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Comencemos reconociendo nuestras infidelidades a la Gracia, nuestros pecados, los obstáculos que hemos puesto a su Acción de Santificación.
02:20
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Yo confieso ante Dios Todopoderoso
y ante vosotros hermanos
que he pecado mucho
de pensamiento, palabra, obra y omisión
por mi culpa, por mi culpa, por mi gran culpa
por eso ruego a Santa María, siempre Virgen
a los Ángeles, a los Santos
y a vosotros hermanos
que intercedaís por mí ante Dios nuestro Señor
℣. Dios Todopoderoso
tenga misericordia de nosotros
perdone nuestros pecados
y nos lleve a la vida eterna.
℟. Amen
02:56
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Señor ten Piedad
℟. Señor ten Piedad
℣. Cristo ten Piedad
℟. Cristo ten Piedad
℣. Señor ten Piedad
℟. Señor ten Piedad
03:09
Coro de la Basílica de la Concepción:
GLORIA en Latín
Gloria in excelsis Deo,
et in terra pax hominibus bonae voluntatis.
Laudamus te,
Benedicimus te,
Adoramus te,
Glorificamus te,
Gratias agimus tibi propter
magnam gloriam tuam,
Domine Deus, Rex caelestis,
Deus Pater omnipotens.
Domine fili unigenite, Jesu Christe,
Domine Deus, Agnus Dei, Filius patris,
Qui tollis peccata mundi, miserere nobis.
Qui tollis peccata mundi,
suscipe deprecationem nostram.
Qui sedes ad dexteram Patris, miserere nobis.
Quoniam tu solus sanctus,
Tu solus Dominus,
Tu solus Altissimus, Jesu Christe,
Cum Sancto Spiritu in gloria Dei Patris. Amen.
GLORIA en Español
Gloria a Dios en el cielo
y en la tierra paz a los hombres
que ama el Señor.
Por tu inmensa gloria te alabamos,
te bendecimos,
te adoramos,
te glorificamos,
te damos gracias.
Señor Dios, Rey Celestial,
Dios Padre todopoderoso.
Señor, Hijo único, Jesucristo.
Señor Dios, Cordero de Dios, Hijo del Padre.
Tu que quitas el pecado del mundo,
ten piedad de nosotros;
tu que quitas el pecado del mundo,
atiende nuestras súplicas.
Tu que estás sentado a la derecha del Padre,
ten piedad de nosotros.
Porque sólo tú eres Santo,
sólo tu Señor,
Sólo tú Altísimo Jesucristo,
con el Espíritu Santo
en la gloria de Dios Padre. Amén
05:32
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Oremos
Dios todopoderoso y eterno
que nos ha otorgado
celebrar en una misma fiesta
los méritos de todos los santos
concédenos por esta multitud
de intercesores la deseada abundancia
de tu misericordia y tu perdón
por nuestro Señor Jesucristo
tu Hijo, que Vive y Reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Oremos
Dios todopoderoso y eterno
que nos ha otorgado
celebrar en una misma fiesta
los méritos de todos los santos
concédenos por esta multitud
de intercesores la deseada abundancia
de tu misericordia y tu perdón
por nuestro Señor Jesucristo
tu Hijo, que Vive y Reina contigo
en la unidad del Espíritu Santo
y es Dios, por los siglos de los siglos.
℟. Amén.
Lectura del libro del Apocalipsis 7,2-4. 9-14
Vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas
06:26
Lectora de la Primera Lectura: - Vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas
Yo, Juan, vi a otro ángel que subía del oriente llevando el sello del Dios vivo. Gritó con voz potente a los cuatro ángeles encargados de dañar a la tierra y al mar, diciéndoles:
«No dañéis a la tierra ni al mar ni a los árboles hasta que sellemos en la frente a los siervos de nuestro Dios».
06:58
Lectora de la Primera Lectura: - Oí también el número de los sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, de todas las tribus de Israel.
Después de esto vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas naciones, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. Y gritan con voz potente:
«¡La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!».
07:33
Lectora de la Primera Lectura: - Y todos los ángeles que estaban de pie alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro vivientes cayeron rostro a tierra ante el trono, y adoraron a Dios, diciendo:
«Amén. La alabanza y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y el honor y el poder y la fuerza son de nuestro Dios, por los siglos de los siglos. Amén».
Y uno de los ancianos me dijo:
«Estos que están vestidos con vestiduras blancas ¿quiénes son y de dónde han venido?».
Yo le respondí:
«Señor mío, tú lo sabrás».
Él me respondió.
«Estos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero».
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
08:19
Lectora Salmistas - CORO:
Salmo: Sal 23, 1-2. 3-4ab. 5-6
Esta es la generación que busca tu rostro, Señor.
℣. Esta es la generación
que busca tu rostro Señor.
℟. Esta es la generación
que busca tu rostro Señor.
Del Señor es la tierra
y cuánto la llena, el orbe
y todos sus habitantes
Él la fundó sobre los mares
Él la afianzó sobre los ríos. ℟.
¿Quién puede subir al monte del señor?
¿Quién puede estar en el Recinto Sacro?
el hombre de manos inocentes
y puro corazón
que no confía en los ídolos. ℟.
Ese recibirá la Bendición del Señor
le hará justicia el Dios de Salvación
esta es la generación
que busca al Señor
que busca Tu Rostro Dios de Jacob. ℟.
Lectora de la Primera Lectura: - Vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas las naciones, razas, pueblos y lenguas
Yo, Juan, vi a otro ángel que subía del oriente llevando el sello del Dios vivo. Gritó con voz potente a los cuatro ángeles encargados de dañar a la tierra y al mar, diciéndoles:
«No dañéis a la tierra ni al mar ni a los árboles hasta que sellemos en la frente a los siervos de nuestro Dios».
06:58
Lectora de la Primera Lectura: - Oí también el número de los sellados, ciento cuarenta y cuatro mil, de todas las tribus de Israel.
Después de esto vi una muchedumbre inmensa, que nadie podría contar, de todas naciones, razas, pueblos y lenguas, de pie delante del trono y delante del Cordero, vestidos con vestiduras blancas y con palmas en sus manos. Y gritan con voz potente:
«¡La victoria es de nuestro Dios, que está sentado en el trono, y del Cordero!».
07:33
Lectora de la Primera Lectura: - Y todos los ángeles que estaban de pie alrededor del trono y de los ancianos y de los cuatro vivientes cayeron rostro a tierra ante el trono, y adoraron a Dios, diciendo:
«Amén. La alabanza y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y el honor y el poder y la fuerza son de nuestro Dios, por los siglos de los siglos. Amén».
Y uno de los ancianos me dijo:
«Estos que están vestidos con vestiduras blancas ¿quiénes son y de dónde han venido?».
Yo le respondí:
«Señor mío, tú lo sabrás».
Él me respondió.
«Estos son los que vienen de la gran tribulación: han lavado y blanqueado sus vestiduras en la sangre del Cordero».
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
08:19
Lectora Salmistas - CORO:
Salmo: Sal 23, 1-2. 3-4ab. 5-6
Esta es la generación que busca tu rostro, Señor.
℣. Esta es la generación
que busca tu rostro Señor.
℟. Esta es la generación
que busca tu rostro Señor.
Del Señor es la tierra
y cuánto la llena, el orbe
y todos sus habitantes
Él la fundó sobre los mares
Él la afianzó sobre los ríos. ℟.
¿Quién puede subir al monte del señor?
¿Quién puede estar en el Recinto Sacro?
el hombre de manos inocentes
y puro corazón
que no confía en los ídolos. ℟.
Ese recibirá la Bendición del Señor
le hará justicia el Dios de Salvación
esta es la generación
que busca al Señor
que busca Tu Rostro Dios de Jacob. ℟.
Primera carta del Apóstol San Juan 3, 1-3
Veremos a Dios tal cual es
10:19
Lector de la Segunda Lectura: - Queridos hermanos:
Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no lo conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.
Todo el que tiene esperanza en él se purifica a si mismo, como él es puro.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
11:04
Coro de la Basílica de la Concepción:
℣. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℣. Si algunos me Ama guardará mi Palabra
y mi Padre lo Amará y Vendremos a él.
℣. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya
12:00
Lector del Santo Evangelio:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateo.
℟. Gloria a ti Señor Jesús
Lector de la Segunda Lectura: - Queridos hermanos:
Mirad qué amor nos ha tenido el Padre para llamarnos hijos de Dios, pues ¡lo somos! El mundo no nos conoce porque no lo conoció a él.
Queridos, ahora somos hijos de Dios y aún no se ha manifestado lo que seremos. Sabemos que, cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.
Todo el que tiene esperanza en él se purifica a si mismo, como él es puro.
℣. Palabra de Dios
℟. Te Alabamos Señor.
11:04
Coro de la Basílica de la Concepción:
℣. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℣. Si algunos me Ama guardará mi Palabra
y mi Padre lo Amará y Vendremos a él.
℣. Aleluya, Aleluya, Aleluya
℟. Aleluya, Aleluya, Aleluya
12:00
Lector del Santo Evangelio:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Lectura del Santo Evangelio según San Mateo.
℟. Gloria a ti Señor Jesús
Lectura del santo Evangelio según san Mateo 5, 1-12a
Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo
12:38
Lector del Santo Evangelio: - En aquel tiempo al ver Jesús el gentío subió al monte se sentó y se acercaron sus discípulos y abriendo su boca les enseñaba diciendo: «Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos, Bienaventurados los mansos porque ellos heredarán la tierra, Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados, Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados.
13:20
Lector del Santo Evangelio: - Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia, Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios, Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios, Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos, Bienaventurados vosotros, cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo.
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús.
HOMILIA
14:20
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Muy queridos todos, hoy es un día que nos invita a mirar a lo alto y mirar ahí, a todos los que han vivido como decía San Juan Pablo II, el alto grado de la Vida Cristiana, de la Vida Cristiana Ordinaria. El heroísmo de lo pequeño, la Perfección del Amor, en lo corriente, la Santidad. Han vivido ese Alto Grado y han alcanzado, conquistado su premio, Dios mismo. Dios Bienaventurado, Dios Bienaventuranza de todos los Santos, los que están ya con Él en el cielo y los que aún vamos de camino hacia Él, en la tierra.
15:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Porque también nosotros, podemos, debemos aspirar a ese Alto Grado de ser Santos. Basta con que queramos, preguntado una vez, el Gran Santo Tomás de Aquino por una de sus hermanas sobre ¿qué había que hacer para llegar a ser Santo? El deteniéndose serenamente respondió con concisión: «querer». Y Dios, ¿no tiene que querer?, también y sobre todo Dios. Es la Santidad un voluntarismo, pues no, lo que pasa es que Dios ya quiere. Lo que hace falta es que al querer de Dios, se una el querer del hombre, de cada hombre.
16:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Querer lo que Él quiere, Amar lo que Él Ama y por el contrario no Querer, lo que Él no quiere, no Amar, lo que Él no Ama. Esto es lo que hace Santo, al Santo, la unión de voluntades, la sumisión de nuestra voluntad, a Su Voluntad, de nuestro yo, a Su Yo. Dios quiere esto, ya lo hemos dicho, pero nosotros ¿lo queremos?, deseémoslo, querámoslo. ¿Quiénes han sido los Santos?, veremos después, los mejores miembros o hijos de la Iglesia.
17:04
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y ¿éstos mejores quienes han sido?, los Apóstoles pues sí, pero ¿sólo ellos?, pues no. También los Papas, San León Magno y otros muchos seguro que no están Canonizados, también los Obispos, San Antonio María Claret y otros muchos seguro que no están Canonizados. Y así los Sacerdotes, los religiosos y las religiosas, Santa Teresa, los Sabios Doctores, San Juan de la Cruz, los Grandes Fundadores, San Ignacio de Loyola.
17:49
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Los valerosos Mártires, San Pedro Poveda, varones, mujeres, reyes, San Fernando, Labriegos San Isidro, niños San Pelayo y otros muchos, como ellos, seguro que no están Canonizados. El Santoral es sólo la punta de un inmenso Iceberg, la parte oculta, oculta de ese Iceberg, conocida sólo de Dios es lo que celebramos, contemplamos hoy. La Santidad lo sabemos, no es exclusiva de ninguno de estos grupos y sin embargo es propia de todos ellos. Propia nuestra también, el Evangelio, el Evangelio de la Santidad, de las Bienaventuranzas es para nosotros también.
18:48
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Así dice, Bienaventurados los pobres en el espíritu, quién de nosotros no se ha sentido pobre, pequeño, una verdadera nada, en algún momento de su vida. Bienaventurados los Mansos, quién de nosotros no ha reparado, preparado al fijarse en alguna persona en la belleza, la excelencia, de la mansedumbre y la ha deseado para sí. Bienaventurados los que llora, ¿quién no ha llorado, no se ha lamentado?, si quiera en su interior, de no Amar a Dios, como debiera, o de verle tan mal, o tampoco Amado.
19:34
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, ¿quién no ha sentido alguna vez hambre y sed de justicia?, deseos de convertirse de verdad, de una vez para siempre y vivir en adelante sólo pendientes de Él. Bienaventurados los misericordiosos, ¿quien no ha experimentado en alguna ocasión, sentimientos de piedad o compasión?, o los ha agradecido cuando los ha recibido de otros. Bienaventurados los limpios de corazón, ¿quién no ha sentido alguna vez el latigazo de la carne, de la sensualidad?, y se ha encandilado con el ideal de una vida de pureza de limpio amor.
20:21
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados los que trabajan por la paz, ¿quien ha valorado la paz, sobre todo después de haberla perdido?, y ha tratado luego de recobrarla como ha podido. Bienaventurados finalmente los perseguidos por causa de la justicia, ¿quién de nosotros, no se ha visto en algún momento señalado por la burla, por la ironía, de los demás?, al manifestarse o ser descubierto como Cristiano. Como vemos la Santidad no está lejos de nosotros, la posibilidad de la Santidad, su germen está en nosotros, desde el instante en que por el Bautismo Dios puso en nosotros su Gracia Santificante.
21:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y nos hizo hijos Suyos, miembros de Cristo en su Iglesia, Templos del Espíritu Santo, Aposento de la Santa Trinidad. Frente a las Bienaventuranzas de Cristo, se yergue las malasventuranzas del mundo,
22:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Al final, ante cada vida humana, no se abre más que una alternativa insalvable, recogida sintéticamente en el título de esa magistral Obra del gran Cardenal Africano Robert Sarah: «Dios o nada». Es decir el Amor o el Vacío, Amor o el Abismo, la nada. Porque así como la Ley del Señor, se resume todo en el Amor, así también las Bienaventuranzas de Cristo se resumen todas en el Amor. Pues todas estas cosas, la pobreza de espíritu, la mansedumbre, el llanto, etcétera, no son acaso frutos del Amor.
23:29
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados, pues los que Aman a Dios y por Dios a su prójimo como a sí mismos. Los Santos, son los que han aprendido el Amor, los que han creído en el Amor, los que han esperado en el Amor, los que han Amado al Amor. El Amor, es el camino real de la Santidad y Jesús el Amor nos lo quiere enseñar. Por eso nos dice, no súplica: «venid a mí». Santo serán por tanto los que entre nosotros vayan a Él y aprendan de Él, el Amor y crean en el Amor y esperen en el Amor y Amen al Amor.
24:23
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y no sólo en algún momento de su vida, en alguna ocasión, sino día a día, perseverantemente, sin eludir la Cruz. Hasta alcanzar, conquistar, el fin, el alto grado de la Vida Cristiana, para gloria de Dios y gozo nuestro. Contemplamos esa multitud inmensa, entre la que se encuentran, por qué no, familiares, amigos, bienhechores. Gente que hemos conocido, de la que hemos tratado y en medio de esa muchedumbre, la pura joya del cielo, la mediadora entre Dios y los hombres.
25:09
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - El canal por el que fluye toda gracia, la estrella radiante que brilla sobre todas las almas, en el cielo y en la tierra. La toda Santa, más Santa que el Santo, más Santo, más Santa que el ángel más perfecto, más Santa que todos los Santos y todos los ángeles juntos. La Virgen Inmaculada, María Santísima, más que Ella, sólo Dios. Todos los Santos que han sido son y serán, coincidirán en más o menos cosas, pero una que de seguro, nunca ha faltado, ni falta, ni faltará, será el reconocimiento, la veneración hacia la Santa madre del Santo.
25:58
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Todo tiene más valor, cuando por sus manos se lo ofrecemos a Dios, hoy con audacia de hijos, por medio de ella le pedimos: «haznos Santos, hazme Santa, hazme Santo», y a Ella Señora, Madre Mía ayúdanos, ayúdame. Porque sin duda los tiempos calamitosos, para la humanidad pero no más calamitosos que otras épocas, si no echamos un vistazo a la historia. Pero en todas ellas, florecieron Santos maravillosos los que cada época necesitaba, porque Dios siempre vela y no abandona nunca a su Iglesia, ni por su Iglesia al mundo.
26:46
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Va a ser nuestra época una excepción, entre nosotros, entre esta generación que busca el rostro de Dios, han de florecer los Santos, que esta época necesita. Entre nosotros quiere Dios, hacerlo florecer, pero la eterna pregunta con la que Él siempre se topa: «¿queremos nosotros?». Terminamos como empezamos, hoy es un día que nos invita a mirar a lo alto, basta con empezar a levantar un poco más, los ojos de la cara, hacia el azul del cielo y los del corazón hacia la Grandeza, la Bondad y el Amor hacia Dios, vamos a hacerlo, pues sí, vamos a hacerlo.
28:03
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Profesemos la Fe que profesaron todos los Santos.
EL CREDO
Creo en un solo Dios
Padre Todopoderoso,
creador del cielo y de la tierra
Creo en Jesucristo
Su Único Hijo nuestro Señor
que fue concebido por obra y gracia
del Espíritu Santo
nació de Santa María Virgen
apareció bajo el poder
de Poncio Pilato
fue Crucificado, muerto y sepultado
descendió a los infiernos
al tercer día resucitó
de entre los muertos
subió a los cielos
y está sentado a la derecha
de Dios padre todopoderoso
desde allí ha de venir
a juzgar a vivos y muertos
creo en el Espíritu Santo
la Santa Iglesia Católica
la Comunión de los Santos
el perdón de los pecados
la Resurrección de la carne
y la Vida Eterna.
℟. Amen.
28:46
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
En comunión con tantos hermanos nuestros
que nos han precedido con la señal
de la Fe y gozan ya
de la claridad de Dios
oremos a Dios nuestro padre:
34:22
PETICIONES:
Por la Iglesia para que sean
a los ojos del mundo
imagen de la nueva humanidad
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por los que gobiernan las naciones
para que trabajen por la paz
fruto de la justicia
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por los pobres, los enfermos
los que tienen hambre, los perseguidos
para que puedan experimentar
el consuelo, la riqueza, la altura
y la recompensa de Dios
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por nuestra asamblea
para que el ejemplo de los Santos
cuya memoria celebramos
nos estimule a vivir
las Bienaventuranzas de Cristo
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Pedimos perdón al Señor
por los desmanes, torpezas, ofensas
e incluso ultrajes y sacrilegios
cometidos ayer en la noche de halloween
Señor Dios envía a los hombres tu luz
para reconocer el mal
y tu fuerza para apartarse de él
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
30:12
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Por el eterno descanso
de nuestros amados difuntos
especialmente en esta misa
por ... y ...
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por nuestras necesidades e intenciones
especialmente por aquellos entre nosotros
que más lo necesitan en este momento
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Escucha Señor nuestras súplicas
son la Oración de tu Iglesia
por Jesucristo nuestro Señor
℟. Amen.
30:45
MÚSICA de la BASÍLICA:
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
Bendito seas señor
Por este pan que nos diste
Fruto de la tierra
y del trabajo de los hombres
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
Bendito seas señor
El vino tú nos lo diste
Fruto de la tierra
y del trabajo de los hombres
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
32:26
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Orad hermanos,
para que este sacrificio mío y vuestro
sea agradable a Dios Padre Todopoderoso
℟. que el Señor reciba de Tus manos
este Sacrificio para alabanza
y gloria de tu nombre y por el bien
de toda Su Santa Iglesia
32:39
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Sean agradables a tus ojos Señor
los dones que te ofrecemos
en honor de todos los Santos
y haz que sintamos interceder
por nuestra salvación
a los que creemos ya seguros
en la vida eterna
por Jesucristo nuestro Señor
℟. Amen.
32:52
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
33:22
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre
y en todo lugar
Señor, Padre Santo
Dios todopoderoso y eterno
porque nos concede celebrar
a la ciudad Santa la jerusalén celeste
que es nuestra madre
donde eternamente ya te alaba
la corona de nuestros hermanos
hacia ella como peregrinos guiados
por la fe nos apresuramos jubilosos
compartiendo la alegría
por la glorificación de los mejores
miembros de la Iglesia
en la que nos concedes también ayuda
y ejemplo para nuestra debilidad
por eso con la muchedumbre de los Santos
y de los ángeles proclamamos tu grandeza
y te alabamos clamando a una sola:
34:11
CORO de la BASÍLICA:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del universo.
Llenos están el cielo y
la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.
35:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Santo eres en Verdad Señor
fuente de toda Santidad
por eso te pedimos que Santifiques
estos dones con la efusión
de tu espíritu de manera que se conviertan
para nosotros en el cuerpo y la sangre
de Jesucristo nuestro Señor
el cual cuando iba a ser entregado
a su pasión voluntariamente aceptada
tomó pan dándote gracias lo partió
y lo dio a sus discípulos diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE EL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
36:32
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el caliz, y dandote gracias,
de nuevo lo pasó a sus discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
37:17
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Éste es el Misterio de la Fe.
℟. Anunciamos tu muerte, proclamamos tu Resurrección.
℟. ¡Ven, Señor Jesús!
37:40
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Así, pues, Padre,
al celebrar ahora el memorial
de la muerte y resurrección de tu hijo
te ofrecemos el pan de vida
y el cáliz de salvación
y te damos gracias porque nos hace dignos
de servirte en tu presencia
te pedimos humildemente
que el Espíritu Santo congregue
en la unidad a cuantos participamos
del cuerpo y la sangre de Cristo
acuérdate Señor de tu Iglesia
extendida por toda la tierra
y con el Papa Francisco
con nuestro Obispo Carlos
con el Obispo Auxiliar Juan Antonio
y todos los pastores
que cuidan de tu pueblo
llevala a su perfección por la caridad
acuérdate también de nuestros hermanos
que durmieron la esperanza
de la resurrección de ... de ...
y de todos los que han muerto
en tu misericordia admitelos
a contemplar la luz de tu rostro
ten misericordia de todos nosotros
y así con María la virgen madre de Dios
su esposo san josé los apóstoles
y cuántos vivieron en tu amistad
a través de los tiempos
merezcamos por tu hijo jesucristo
compartir la vida eterna
y cantar tus alabanzas:
38:52
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Por Cristo, con Él y en Él
℟. A ti Dios Padre Omnipotente
en la unidad del Espíritu Santo
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos
℟. Amen.
39:21
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Fieles a la recomendación del salvador
y siguiendo su divina enseñanza
nos atrevemos a decir:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro que estás en el cielo
Santificado sea tu nombre
venga a nosotros tu reino
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo
danos hoy nuestro pan de cada día
perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden
no nos dejes caer en la tentación
y líbranos del mal
℟. Amen.
39:54
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
líbranos de todos los males Señor
y concedenos la paz en nuestros días
para que ayudados por tu misericordia
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro salvador Jesucristo
℟. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria por siempre Señor
40:24
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Señor Jesucristo que dijistes a Tus apóstoles
la paz os dejo mi paz os doy
no tengas en cuenta nuestros pecados
si no la Fe de Tu Iglesia
conforme a tu palabra concédele
la paz y la unidad
Tu que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
40:30
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. La paz del Señor esté siempre con vosotros
℟. y con Tu Espíritu
℣. Daos fraternalmente la Paz.
℟. la Paz esté contigo.
40:45
CORO de la BASÍLICA:
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. danos la paz
41:50
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Este es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo
dichosos los invitados a la cena del Señor
℟. Señor no soy digno de que entres en mi casa pero una palabra tuya bastará para sanarme
℣. El cuerpo de Cristo me guarde para la vida eterna. Amen.
45:27
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Oremos
Señor te proclamamos admirable
y él sólo Santo
entre todos los Santos
por eso imploramos de tu misericordia
que realizando nuestra Santidad
por la participación
en la plenitud de tu amor
pasemos de esta mesa de la Iglesia peregrina
al banquete del reino de los cielos
por Jesucristo Nuestro Señor
℟. Amen.
47:06
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Antes de marchar os cuento los avisos para estos días, mañana Conmemoración de los Fieles Difuntos pues habrá horario de misas. El horario de Misa habitual de todos los días, de 08:00 a 13:00 por la mañana y luego por la tarde el horario habitual. Y luego tres misas en cada una de las criptas, por las mañanas 10:00, 11:00 y 12:00 en unas 10:30, 11:30, 12:30 en otras. Por la tarde solemne funeral por los Difuntos de nuestra Parroquia y siguen también habiendo columbarios, sepulturas que se pueden adquirir, quienes estén interesados deben hablar con el señor Párroco.
47:55
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
El Dios gloria y felicidad de los Santos
que os ha concedido celebrar hoy
esta solemnidad os otorgue
sus bendiciones eternas.
℟. Amen.
Que por la intercesión de los Santos
os veáis libres de todo mal
y alentados por el ejemplo de su vida
persevereis constantes
en el servicio de Dios
y de los hermanos.
℟. Amen.
y que Dios os conceda reuniros
con los Santos en la felicidad del reino
donde la Iglesia contempla con gozo
a sus hijos entre los moradores
de la Jerusalén celeste.
℟. Amen.
℣. Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo, y Espíritu Santo descienda sobre vosotros.
℟. Amen.
℣. Que paséis todos un día muy feliz, podéis ir en Paz.
℟. Demos gracias al Señor.
Lector del Santo Evangelio: - En aquel tiempo al ver Jesús el gentío subió al monte se sentó y se acercaron sus discípulos y abriendo su boca les enseñaba diciendo: «Bienaventurados los pobres en el espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos, Bienaventurados los mansos porque ellos heredarán la tierra, Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados, Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos quedarán saciados.
13:20
Lector del Santo Evangelio: - Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia, Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios, Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios, Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos, Bienaventurados vosotros, cuando os insulten y os persigan y os calumnien de cualquier modo por mi causa. Alegraos y regocijaos, porque vuestra recompensa será grande en el cielo.
℣. Palabra del Señor
℟. Gloria a Ti Señor, Jesús.
HOMILIA
14:20
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Muy queridos todos, hoy es un día que nos invita a mirar a lo alto y mirar ahí, a todos los que han vivido como decía San Juan Pablo II, el alto grado de la Vida Cristiana, de la Vida Cristiana Ordinaria. El heroísmo de lo pequeño, la Perfección del Amor, en lo corriente, la Santidad. Han vivido ese Alto Grado y han alcanzado, conquistado su premio, Dios mismo. Dios Bienaventurado, Dios Bienaventuranza de todos los Santos, los que están ya con Él en el cielo y los que aún vamos de camino hacia Él, en la tierra.
15:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Porque también nosotros, podemos, debemos aspirar a ese Alto Grado de ser Santos. Basta con que queramos, preguntado una vez, el Gran Santo Tomás de Aquino por una de sus hermanas sobre ¿qué había que hacer para llegar a ser Santo? El deteniéndose serenamente respondió con concisión: «querer». Y Dios, ¿no tiene que querer?, también y sobre todo Dios. Es la Santidad un voluntarismo, pues no, lo que pasa es que Dios ya quiere. Lo que hace falta es que al querer de Dios, se una el querer del hombre, de cada hombre.
16:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Querer lo que Él quiere, Amar lo que Él Ama y por el contrario no Querer, lo que Él no quiere, no Amar, lo que Él no Ama. Esto es lo que hace Santo, al Santo, la unión de voluntades, la sumisión de nuestra voluntad, a Su Voluntad, de nuestro yo, a Su Yo. Dios quiere esto, ya lo hemos dicho, pero nosotros ¿lo queremos?, deseémoslo, querámoslo. ¿Quiénes han sido los Santos?, veremos después, los mejores miembros o hijos de la Iglesia.
17:04
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y ¿éstos mejores quienes han sido?, los Apóstoles pues sí, pero ¿sólo ellos?, pues no. También los Papas, San León Magno y otros muchos seguro que no están Canonizados, también los Obispos, San Antonio María Claret y otros muchos seguro que no están Canonizados. Y así los Sacerdotes, los religiosos y las religiosas, Santa Teresa, los Sabios Doctores, San Juan de la Cruz, los Grandes Fundadores, San Ignacio de Loyola.
17:49
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Los valerosos Mártires, San Pedro Poveda, varones, mujeres, reyes, San Fernando, Labriegos San Isidro, niños San Pelayo y otros muchos, como ellos, seguro que no están Canonizados. El Santoral es sólo la punta de un inmenso Iceberg, la parte oculta, oculta de ese Iceberg, conocida sólo de Dios es lo que celebramos, contemplamos hoy. La Santidad lo sabemos, no es exclusiva de ninguno de estos grupos y sin embargo es propia de todos ellos. Propia nuestra también, el Evangelio, el Evangelio de la Santidad, de las Bienaventuranzas es para nosotros también.
18:48
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Así dice, Bienaventurados los pobres en el espíritu, quién de nosotros no se ha sentido pobre, pequeño, una verdadera nada, en algún momento de su vida. Bienaventurados los Mansos, quién de nosotros no ha reparado, preparado al fijarse en alguna persona en la belleza, la excelencia, de la mansedumbre y la ha deseado para sí. Bienaventurados los que llora, ¿quién no ha llorado, no se ha lamentado?, si quiera en su interior, de no Amar a Dios, como debiera, o de verle tan mal, o tampoco Amado.
19:34
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, ¿quién no ha sentido alguna vez hambre y sed de justicia?, deseos de convertirse de verdad, de una vez para siempre y vivir en adelante sólo pendientes de Él. Bienaventurados los misericordiosos, ¿quien no ha experimentado en alguna ocasión, sentimientos de piedad o compasión?, o los ha agradecido cuando los ha recibido de otros. Bienaventurados los limpios de corazón, ¿quién no ha sentido alguna vez el latigazo de la carne, de la sensualidad?, y se ha encandilado con el ideal de una vida de pureza de limpio amor.
20:21
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados los que trabajan por la paz, ¿quien ha valorado la paz, sobre todo después de haberla perdido?, y ha tratado luego de recobrarla como ha podido. Bienaventurados finalmente los perseguidos por causa de la justicia, ¿quién de nosotros, no se ha visto en algún momento señalado por la burla, por la ironía, de los demás?, al manifestarse o ser descubierto como Cristiano. Como vemos la Santidad no está lejos de nosotros, la posibilidad de la Santidad, su germen está en nosotros, desde el instante en que por el Bautismo Dios puso en nosotros su Gracia Santificante.
21:14
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y nos hizo hijos Suyos, miembros de Cristo en su Iglesia, Templos del Espíritu Santo, Aposento de la Santa Trinidad. Frente a las Bienaventuranzas de Cristo, se yergue las malasventuranzas del mundo,
| BIENAVENTURANZAS y SU OPUESTO |
|---|
|
22:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Al final, ante cada vida humana, no se abre más que una alternativa insalvable, recogida sintéticamente en el título de esa magistral Obra del gran Cardenal Africano Robert Sarah: «Dios o nada». Es decir el Amor o el Vacío, Amor o el Abismo, la nada. Porque así como la Ley del Señor, se resume todo en el Amor, así también las Bienaventuranzas de Cristo se resumen todas en el Amor. Pues todas estas cosas, la pobreza de espíritu, la mansedumbre, el llanto, etcétera, no son acaso frutos del Amor.
23:29
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Bienaventurados, pues los que Aman a Dios y por Dios a su prójimo como a sí mismos. Los Santos, son los que han aprendido el Amor, los que han creído en el Amor, los que han esperado en el Amor, los que han Amado al Amor. El Amor, es el camino real de la Santidad y Jesús el Amor nos lo quiere enseñar. Por eso nos dice, no súplica: «venid a mí». Santo serán por tanto los que entre nosotros vayan a Él y aprendan de Él, el Amor y crean en el Amor y esperen en el Amor y Amen al Amor.
24:23
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Y no sólo en algún momento de su vida, en alguna ocasión, sino día a día, perseverantemente, sin eludir la Cruz. Hasta alcanzar, conquistar, el fin, el alto grado de la Vida Cristiana, para gloria de Dios y gozo nuestro. Contemplamos esa multitud inmensa, entre la que se encuentran, por qué no, familiares, amigos, bienhechores. Gente que hemos conocido, de la que hemos tratado y en medio de esa muchedumbre, la pura joya del cielo, la mediadora entre Dios y los hombres.
25:09
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - El canal por el que fluye toda gracia, la estrella radiante que brilla sobre todas las almas, en el cielo y en la tierra. La toda Santa, más Santa que el Santo, más Santo, más Santa que el ángel más perfecto, más Santa que todos los Santos y todos los ángeles juntos. La Virgen Inmaculada, María Santísima, más que Ella, sólo Dios. Todos los Santos que han sido son y serán, coincidirán en más o menos cosas, pero una que de seguro, nunca ha faltado, ni falta, ni faltará, será el reconocimiento, la veneración hacia la Santa madre del Santo.
25:58
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Todo tiene más valor, cuando por sus manos se lo ofrecemos a Dios, hoy con audacia de hijos, por medio de ella le pedimos: «haznos Santos, hazme Santa, hazme Santo», y a Ella Señora, Madre Mía ayúdanos, ayúdame. Porque sin duda los tiempos calamitosos, para la humanidad pero no más calamitosos que otras épocas, si no echamos un vistazo a la historia. Pero en todas ellas, florecieron Santos maravillosos los que cada época necesitaba, porque Dios siempre vela y no abandona nunca a su Iglesia, ni por su Iglesia al mundo.
26:46
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Va a ser nuestra época una excepción, entre nosotros, entre esta generación que busca el rostro de Dios, han de florecer los Santos, que esta época necesita. Entre nosotros quiere Dios, hacerlo florecer, pero la eterna pregunta con la que Él siempre se topa: «¿queremos nosotros?». Terminamos como empezamos, hoy es un día que nos invita a mirar a lo alto, basta con empezar a levantar un poco más, los ojos de la cara, hacia el azul del cielo y los del corazón hacia la Grandeza, la Bondad y el Amor hacia Dios, vamos a hacerlo, pues sí, vamos a hacerlo.
28:03
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Profesemos la Fe que profesaron todos los Santos.
EL CREDO
Creo en un solo Dios
Padre Todopoderoso,
creador del cielo y de la tierra
Creo en Jesucristo
Su Único Hijo nuestro Señor
que fue concebido por obra y gracia
del Espíritu Santo
nació de Santa María Virgen
apareció bajo el poder
de Poncio Pilato
fue Crucificado, muerto y sepultado
descendió a los infiernos
al tercer día resucitó
de entre los muertos
subió a los cielos
y está sentado a la derecha
de Dios padre todopoderoso
desde allí ha de venir
a juzgar a vivos y muertos
creo en el Espíritu Santo
la Santa Iglesia Católica
la Comunión de los Santos
el perdón de los pecados
la Resurrección de la carne
y la Vida Eterna.
℟. Amen.
28:46
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
En comunión con tantos hermanos nuestros
que nos han precedido con la señal
de la Fe y gozan ya
de la claridad de Dios
oremos a Dios nuestro padre:
34:22
PETICIONES:
Por la Iglesia para que sean
a los ojos del mundo
imagen de la nueva humanidad
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por los que gobiernan las naciones
para que trabajen por la paz
fruto de la justicia
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por los pobres, los enfermos
los que tienen hambre, los perseguidos
para que puedan experimentar
el consuelo, la riqueza, la altura
y la recompensa de Dios
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por nuestra asamblea
para que el ejemplo de los Santos
cuya memoria celebramos
nos estimule a vivir
las Bienaventuranzas de Cristo
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Pedimos perdón al Señor
por los desmanes, torpezas, ofensas
e incluso ultrajes y sacrilegios
cometidos ayer en la noche de halloween
Señor Dios envía a los hombres tu luz
para reconocer el mal
y tu fuerza para apartarse de él
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
30:12
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Por el eterno descanso
de nuestros amados difuntos
especialmente en esta misa
por ... y ...
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Por nuestras necesidades e intenciones
especialmente por aquellos entre nosotros
que más lo necesitan en este momento
℣. Roguemos al Señor
℟. Te rogamos oyenos
Escucha Señor nuestras súplicas
son la Oración de tu Iglesia
por Jesucristo nuestro Señor
℟. Amen.
30:45
MÚSICA de la BASÍLICA:
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
Bendito seas señor
Por este pan que nos diste
Fruto de la tierra
y del trabajo de los hombres
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
Bendito seas señor
El vino tú nos lo diste
Fruto de la tierra
y del trabajo de los hombres
Te presentamos el vino y el pan
Bendito seas por siempre señor
32:26
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Orad hermanos,
para que este sacrificio mío y vuestro
sea agradable a Dios Padre Todopoderoso
℟. que el Señor reciba de Tus manos
este Sacrificio para alabanza
y gloria de tu nombre y por el bien
de toda Su Santa Iglesia
32:39
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Sean agradables a tus ojos Señor
los dones que te ofrecemos
en honor de todos los Santos
y haz que sintamos interceder
por nuestra salvación
a los que creemos ya seguros
en la vida eterna
por Jesucristo nuestro Señor
℟. Amen.
32:52
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. y con tu espíritu
℣. Levantemos el corazón.
℟. Lo tenemos levantado hacia el Señor.
℣. Demos gracias al Señor nuestro Dios.
℟. Es justo y necesario.
33:22
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
En verdad es justo y necesario
es nuestro deber y salvación
darte gracias siempre
y en todo lugar
Señor, Padre Santo
Dios todopoderoso y eterno
porque nos concede celebrar
a la ciudad Santa la jerusalén celeste
que es nuestra madre
donde eternamente ya te alaba
la corona de nuestros hermanos
hacia ella como peregrinos guiados
por la fe nos apresuramos jubilosos
compartiendo la alegría
por la glorificación de los mejores
miembros de la Iglesia
en la que nos concedes también ayuda
y ejemplo para nuestra debilidad
por eso con la muchedumbre de los Santos
y de los ángeles proclamamos tu grandeza
y te alabamos clamando a una sola:
34:11
CORO de la BASÍLICA:
Santo, Santo, Santo es el Señor,
Dios del universo.
Llenos están el cielo y
la tierra de tu gloria.
Hosanna en el cielo.
Bendito el que viene en nombre del Señor.
Hosanna en el cielo.
35:36
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Santo eres en Verdad Señor
fuente de toda Santidad
por eso te pedimos que Santifiques
estos dones con la efusión
de tu espíritu de manera que se conviertan
para nosotros en el cuerpo y la sangre
de Jesucristo nuestro Señor
el cual cuando iba a ser entregado
a su pasión voluntariamente aceptada
tomó pan dándote gracias lo partió
y lo dio a sus discípulos diciendo:
TOMAD Y COMED TODOS DE EL,
PORQUE ESTO ES MI CUERPO,
QUE SERÁ ENTREGADO POR VOSOTROS.
36:32
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Del mismo modo, acabada la cena,
tomó el caliz, y dandote gracias,
de nuevo lo pasó a sus discípulos, diciendo:
TOMAD Y BEBED TODOS DE EL,
PORQUE ÉSTE ES EL CÁLIZ DE MI SANGRE,
SANGRE DE LA ALIANZA NUEVA Y ETERNA,
QUE SERÁ DERRAMADA POR VOSOTROS
Y POR MUCHOS
PARA EL PERDÓN DE LOS PECADOS.
HACED ESTO EN CONMEMORACIÓN MÍA.
37:17
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Éste es el Misterio de la Fe.
℟. Anunciamos tu muerte, proclamamos tu Resurrección.
℟. ¡Ven, Señor Jesús!
37:40
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Así, pues, Padre,
al celebrar ahora el memorial
de la muerte y resurrección de tu hijo
te ofrecemos el pan de vida
y el cáliz de salvación
y te damos gracias porque nos hace dignos
de servirte en tu presencia
te pedimos humildemente
que el Espíritu Santo congregue
en la unidad a cuantos participamos
del cuerpo y la sangre de Cristo
acuérdate Señor de tu Iglesia
extendida por toda la tierra
y con el Papa Francisco
con nuestro Obispo Carlos
con el Obispo Auxiliar Juan Antonio
y todos los pastores
que cuidan de tu pueblo
llevala a su perfección por la caridad
acuérdate también de nuestros hermanos
que durmieron la esperanza
de la resurrección de ... de ...
y de todos los que han muerto
en tu misericordia admitelos
a contemplar la luz de tu rostro
ten misericordia de todos nosotros
y así con María la virgen madre de Dios
su esposo san josé los apóstoles
y cuántos vivieron en tu amistad
a través de los tiempos
merezcamos por tu hijo jesucristo
compartir la vida eterna
y cantar tus alabanzas:
38:52
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Por Cristo, con Él y en Él
℟. A ti Dios Padre Omnipotente
en la unidad del Espíritu Santo
todo honor y toda gloria
por los siglos de los siglos
℟. Amen.
39:21
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Fieles a la recomendación del salvador
y siguiendo su divina enseñanza
nos atrevemos a decir:
PADRE NUESTRO
Padre nuestro que estás en el cielo
Santificado sea tu nombre
venga a nosotros tu reino
hágase tu voluntad,
en la tierra como en el cielo
danos hoy nuestro pan de cada día
perdona nuestras ofensas
como también nosotros perdonamos
a los que nos ofenden
no nos dejes caer en la tentación
y líbranos del mal
℟. Amen.
39:54
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
líbranos de todos los males Señor
y concedenos la paz en nuestros días
para que ayudados por tu misericordia
vivamos siempre libres de pecado
y protegidos de toda perturbación
mientras esperamos la gloriosa venida
de nuestro salvador Jesucristo
℟. Tuyo es el reino, tuyo el poder y la gloria por siempre Señor
40:24
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Señor Jesucristo que dijistes a Tus apóstoles
la paz os dejo mi paz os doy
no tengas en cuenta nuestros pecados
si no la Fe de Tu Iglesia
conforme a tu palabra concédele
la paz y la unidad
Tu que vives y reinas
por los siglos de los siglos.
℟. Amen.
40:30
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. La paz del Señor esté siempre con vosotros
℟. y con Tu Espíritu
℣. Daos fraternalmente la Paz.
℟. la Paz esté contigo.
40:45
CORO de la BASÍLICA:
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. ten piedad de nosotros
℣. Cordero de Dios Tú, que quitas el pecado del mundo
℟. danos la paz
41:50
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. Este es el Cordero de Dios
que quita el pecado del mundo
dichosos los invitados a la cena del Señor
℟. Señor no soy digno de que entres en mi casa pero una palabra tuya bastará para sanarme
℣. El cuerpo de Cristo me guarde para la vida eterna. Amen.
45:27
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
Oremos
Señor te proclamamos admirable
y él sólo Santo
entre todos los Santos
por eso imploramos de tu misericordia
que realizando nuestra Santidad
por la participación
en la plenitud de tu amor
pasemos de esta mesa de la Iglesia peregrina
al banquete del reino de los cielos
por Jesucristo Nuestro Señor
℟. Amen.
47:06
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid: - Antes de marchar os cuento los avisos para estos días, mañana Conmemoración de los Fieles Difuntos pues habrá horario de misas. El horario de Misa habitual de todos los días, de 08:00 a 13:00 por la mañana y luego por la tarde el horario habitual. Y luego tres misas en cada una de las criptas, por las mañanas 10:00, 11:00 y 12:00 en unas 10:30, 11:30, 12:30 en otras. Por la tarde solemne funeral por los Difuntos de nuestra Parroquia y siguen también habiendo columbarios, sepulturas que se pueden adquirir, quienes estén interesados deben hablar con el señor Párroco.
47:55
Rvrndo.: Basílica de la Concepción de Madrid:
℣. El Señor esté con Todos Vosotros.
℟. Y con tu espíritu.
El Dios gloria y felicidad de los Santos
que os ha concedido celebrar hoy
esta solemnidad os otorgue
sus bendiciones eternas.
℟. Amen.
Que por la intercesión de los Santos
os veáis libres de todo mal
y alentados por el ejemplo de su vida
persevereis constantes
en el servicio de Dios
y de los hermanos.
℟. Amen.
y que Dios os conceda reuniros
con los Santos en la felicidad del reino
donde la Iglesia contempla con gozo
a sus hijos entre los moradores
de la Jerusalén celeste.
℟. Amen.
℣. Y la bendición de Dios todopoderoso, Padre, Hijo, y Espíritu Santo descienda sobre vosotros.
℟. Amen.
℣. Que paséis todos un día muy feliz, podéis ir en Paz.
℟. Demos gracias al Señor.
